El alcalde mazatleco, ni viendo atina, como dicen popularmente. Porque ha sido testigo de cómo el Congreso, Fiscalía, la Auditoría del Estado y sobre todo el pueblo, removieron de la alcaldía a su homólogo de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro.

Los reflectores apuntan rápido al gobernador Rubén Rocha Moya cuando buscan un salvavidas. El mandatario sinaloense es hábil. También respetuoso. Su proyecto de estado es más grande que cualquier alianza. Para que su plan de gobierno sea exitoso debe hacer justo lo que está haciendo. Gobernar bien, informar a la gente, y ser respetuoso de las reglas del poder y la política. Sabe que intentar interceder por un presidente municipal puede “manchar el plumaje en su travesía por el pantano”. Así cayó Estrada Ferreiro.

El munícipe de Mazatlán escuchó las expresiones vertidas por el gobernador en su semanera. Pero la realidad es la que es. En este espacio he dicho, que los políticos pueden pecar de diversas formas y sobrevivir. Así es la política. Pero el primer pecado mortal de un hombre dedicado a estos menesteres es la soberbia. Esa anti cualidad destruye todo. “Nada cava más rápido una tumba política que la soberbia”.

¿El futuro del Químico pende de un hilo? No. Su futuro depende de él mismo y del pueblo mazatleco. Al tiempo que se halla supeditado a realizar cambios en su actitud, comportamiento y quehacer. El regente de la Perla del Pacífico debe ser humilde. Reconocer sus errores de gestión y atender ante las instancias correspondientes el subsanar las observaciones hechas por la ASE.

En esa ruta, deberá ser transparente. Nada de ocultarle información a la gente que confió en él. La sociedad sinaloense aprendió a ser inquisidora. En Culiacán un grupo de mujeres valientes pusieron la muestra. El mandatario local debe ganarse el favor de su pueblo sometiéndose al escrutinio público y a la redición de cuentas.

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Así mismo, es mandatorio que haga gala de voluntad política. En el quehacer público, la voluntad política es prácticamente todo. El “Químico” debe abonarse a las buenas maneras políticas para salir de su “bache”. Atender sus problemas sin la mediación adecuada, pudiera traer consecuencias. El tozudo ex alcalde culichi es muestra de ello. Estrada Ferreiro fue soberbio y terco, quiso atenderlo todo a manera de los malos litigantes, todo o nada. El resultado fue el que fue.

El gobernador Rocha Moya seguro pudiera ayudar al presidente Benítez. Para ello, la ayuda que este requiera, no deberá ser comprometedora, política y ni legalmente hablando. Al final, es el jefe político del estado y nada conviene más que ofrecerle a la gente un buen gobierno. Al tiempo que ofrecerle al presidente López Obrador buenas cuentas en lo político.

El próximo fin de semana puede ser un punto de inflexión para Don Luis Guillermo Benítez. Irse a España en medio de lo que ante la comentocracia es una crisis política, no parece la mejor idea. Quedarse, y no mover un dedo, tampoco es la solución. Mazatlán es un destino turístico impresionante, con una oferta más que atractiva. Que la Perla del Pacífico encabece el desfile de la Hispanidad en España 2022 es una gran noticia. El municipio invertirá más de tres millones de pesos en este evento que puede redituarle bien en materia turística. No estoy tan segura de que la presencia del edil en Madrid sea factor decisivo.

Lo mismo para los viajes en puerta a la Fórmula 1 en CDMX y para Arabia Saudita. El primer edil porteño, tiene asuntos más importantes de fondo que atender para Mazatlán.

Vanessa Félix | Twitter: @vanessafelixmx