Sin entender que el cambio de poder ha modificado todas las estructuras políticas y sociales, en la toma de protesta de la presidenta Claudia Sheinbaum vimos ondeando banderines de centrales obreras en el Zócalo, como reflejo de los tristes líderes sindicales que todavía quieren asomar la cabeza fuera de su pantano de lodo.
Ya no caben en este modelo social productivo, y si han logrado sobrevivir fue gracias al contubernio del Centro Federal de Conciliación y Registro Sindical, que mediante criterios ilegales legitimó sus contratos colectivos, pues en la mayoría de las votaciones la gente los rechazó, y no alcanzaron el 50% más uno que se necesitaba para mantener el registro de sus contratos de protección.
Creen que son una fuerza política, intentan agruparse en nuevas centrales fantasmas, pero no pasan de ser bufones con registro, ya no les dieron candidaturas, no quedaron en sus eternos puestos legislativos parásitos.
Se está generando la relocalización de empresas a México, el nearshoring, los despachos patronales se están organizando para recomendar a sus líderes sindicales de confianza para ofrecer la protección contra huelgas y conflictos; pero habrá que explicar a los nuevos patrones que esa estructura es obsoleta, ya no sirve tener líderes que no trabajan en la fuente de trabajo, pues la decisión de la aprobación de los aumentos de salario, de las revisiones de contrato, está en manos de los trabajadores, sin su voto no podrán avanzar en las negociaciones colectivas.
Esperemos que en este sexenio se corrijan las malas prácticas que prevalecieron para que sigan subsistiendo estos líderes charros, se necesita cambiar la simulación de quienes están al frente del Centro Federal de Conciliación y Registro Sindical, a donde ya encontraron las centrales acomodo para poderse reelegir, mantener sus registros de simulación. Cambiando esto en el centro federal, poniendo a alguien comprometido con la libertad sindical, se erradicará por siempre la simulación y la extorsión sindical, solo falta la decisión política para hacerlo.
X: @riclandero | Vladimir Ricardo Landero Aramburu. Maestro en derecho por la UNAM