En las elecciones pasadas vimos una posible fórmula que pensamos que podría hacer una diferencia en las urnas electorales. Con la llegada del Bronco y la posibilidad de Margarita Zavala en las urnas se abría el camino de los independientes. Estos personajes que buscaban llegar a la presidencia sin partido y con un equipo ciudadano tras ellos.
La gente pensaba, al menos los que votan en Nuevo León, que la llegada del Bronco a las urnas podría traer esperanza y quizá una nueva manera de gobernar. Pero no, Don Jaime lo echó a perder. Hizo trampa para obtener las firmas mínimas y no era tan popular fuera de Nuevo León como él creía o le hicieron creer.
El fenómeno de los independientes que se había dado en el tradicional y conservador Nuevo León duró solo 6 años y después fue disminuido a su mínima expresión con un par de alcaldías independientes. ¿Por qué no fue un fenómeno más duradero? Creo que al final era pan con lo mismo, pues el Bronco se lanzó como independiente pero siempre había trabajado como político. Llegó con los mismos vicios y agregó otros que la gestión independiente le dio.
Seis años después, llegó otro fenómeno a Nuevo León, el de los influencers. Al parecer a mis paisanos les gusta votar por cosas no tradicionales. Samuel García, que fue de diputado local a senador y después a gobernador, es alguien como los de la vieja política, pero disfrazado de nuevo político. Busca ser el gobernador que se salga del pacto fiscal pero después se pone a modo con el presidente. Dice que sus antecesores tienen la culpa de lo malo que está pasando en el estado aún y cuando estuvo en el Congreso Local y en el Senado pudiendo denunciar esas malas prácticas.
Sabe usar las redes sociales, como lo hizo el Bronco, y su esposa es muy querida por un grupo de personas que la tienen como personaje aspiracional. La popularidad en redes es su principal arma y al parecer piensa utilizarla para buscar ser candidato para la presidencia, como lo hizo el Bronco. El gran problema es que él mismo, cuando era diputado local, criticó al Bronco por dejar la gubernatura. ¿Cómo podría justificar Samuel la posibilidad de salir a buscar la presidencia cuando en ninguna encuesta está cerca del más próximo competidor? Es más, en muchas encuestas donde se hacía una lista de posibles candidatos de Movimiento Ciudadano, tampoco era favorito.
Las próximas elecciones al parecer serán como tradicionalmente han sido. Lo diferente es que se están uniendo casi todos los partidos buscando ganarle al que está en el poder. Y la combinación del Frente es de lo más extravagante, un partido de izquierda, uno de centro y uno de derecha. Es como irle al América, al Cruz Azul y a los Pumas al mismo tiempo.
Habrá que esperar los debates y las ideas que traen los candidatos que aspiran al poder. Ojalá sean para el bien del país y no solo de algunos cuantos. Esperemos que no anden comprando votos con promesas que se contradicen con otras.
Esperemos que los elegidos sean los que necesitamos para poder crecer como país.