Morena ha tomado decisiones en la definición de cuadros para Veracruz y Durango. Esta última entidad, sin duda, inclinó la balanza por un perfil altamente competitivo que, en el pasado ejercicio legislativo, se convirtió en una de las piezas claves del engranaje. Es, para ser exactos, parte de esa camada de perfiles que se fueron encaminando para puestos de primer nivel. José Ramón Enríquez Herrera, como tal, será el abanderado de Morena para la alcaldía de Durango. Respecto al futuro que se avecina en ese territorio, las encuestas comienzan a esbozar los primeros datos que, en concreto, favorecen al partido guinda para conquistar uno de los ayuntamientos más importantes a nivel nacional. Esa tendencia, evidentemente, ha incrementado luego de conocer el resultado final de la encuesta. Ayer, de hecho, se reveló el nombre del ganador y, ante los órganos colegiados de la dirigencia, fue presentado como coordinador de la defensa del voto.

Pensando en ese escenario que la lógica nos indica, Morena, sin contratiempos, ganaría la alcaldía de Durango con José Ramón como abanderado. Por esa sencilla razón, las expectativas son muy altas para conquistar un punto clave que, a su vez, abra la puerta para apuntalar el proceso electoral del 2027. En junio de este año, desde luego, será un triunfo abrumador a favor del lopezobradorismo. Es verdad, el partido guinda tendrá que enfrentar a los partidos conservadores y, con ello, la guerra sucia que desemboca. Sin embargo, no hay punto de comparación: Morena es, de pies a cabeza, inmensamente superior a la oposición. De hecho, resulta muy difícil imaginar un contrapeso rentable a estas alturas, sobre todo por la sacudida que recibió el pasado 2 de junio. Para tal efecto, se espera una victoria contundente en el norte del país. Se puede decir, anticipándonos al clima que se percibe, que será un triunfo de la coalición Seguimos Haciendo Historia.

El propósito de Morena, para arrancar con el pie derecho, es ganar el mayor número de ayuntamiento en Durango y Veracruz. La primera alcaldía, lo dijimos, tiene una representación al más alto nivel. Sabemos que, en la pasada legislatura del Senado, los representantes de las entidades, en su inmensa mayoría, jugaron para puestos de elección popular. No hay que olvidar el triunfo sólido de Nayarit, Baja California Sur, Estado de México, Sinaloa, Puebla, Oaxaca y Chiapas. Eso, desde un ángulo político, constituyó algo así como el trampolín o la antesala para llegar en el mejor nivel para la competencia. Y como esto apenas comienza, la cámara alta, de nueva cuenta, será la vitrina para encarrilar a cuadros, que casi podemos decir que, por mucho, llevan la delantera en las encuestas de opinión pública que se han divulgado en los últimos días.

Hay, por lo menos, una decena de perfiles que para las elecciones del 2027 se perfilan para encabezar a cada una de las entidades que tendrá transición del ejecutivo estatal. De hecho, la balanza, de acuerdo con las encuestas, está sumamente inclinada a cuadros como Andrea Chávez en Chihuahua; en Guerrero, lo hemos ido asegurando, la disputa está entre Félix Salgado Macedonio y Beatriz Mojica. Otra de las entidades que parece cantada, con una enorme ventaja en las encuestas desde ahora, es la del senador de Zacatecas, Saúl Monreal. Él, por cierto, ha ido acumulando mucha estructura con las ‘Audiencias del Pueblo’ que ha puesto en marcha. En ese mismo tenor, Campeche también tendrá relevo y, como tal, otro senador se perfila. Hablamos de Aníbal Ostan.

A medida que las semanas avancen, seguramente irán trascendiendo más nombres que, en sí, engrosan esa larga lista de participantes que, llegado el momento determinante, levantarán la mano para medir su rentabilidad en la encuesta interna que levante el partido. En tanto que eso ocurra, sabemos que, para ir hilvanando esos pronósticos que hemos anticipado, el juego por los ayuntamientos del 2025, como tal, son el parteaguas para las 17 entidades federativas que se jugarán en 2027. Para detonar ese preludio, es importante conseguir el mayor número de alcaldías en Durango y Veracruz. No tengo la menor duda de que eso pasará de manera contundente. Inclusive, Morena, a diferencia de otros procesos, llega más embalado en unidad; los altos índices de aprobación de la presidenta constitucional de México, sumado a la decadencia que vive la oposición, son componentes para ir imaginando lo que sucederá.

La oposición, en efecto, tiene que preocuparse por las derrotas que sufrirán en 2025. Con ese alarmante escenario para el conservadurismo, el PRIAN, como pasó en la elección presidencial, no asomó ni las narices en la cancha, por lo que todo pinta bien para estos procesos que vienen en puerta. Uno de ellos será en junio del 2025 y, posterior a ello, el juego que más ha atraído la atención en las elecciones intermedias que, sin exagerar, el partido guinda conquistará 16 de 17 estados.