1.- Es un acto de justicia. Uno de los hombres mas leales a AMLO no merecía estar en la banca solo por haberse enamorado y permitido a su pareja organizar una boda más o menos elegante. Qué bueno que César Yáñez está de regreso a la 4T, me alegra bastante.
2.- Fortalece al equipo. Que César haya sido nombrado subsecretario de Desarrollo Democrático Participación Social y Asuntos Religiosos sin duda fortalece al grupo de colaboradores del secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández.
3.- Cercanía a AMLO. El equipo de Adán Augusto se vuelve todavía más sólido no solo por la capacidad de trabajo y por la preparación de Yáñez, sino también —y sobre todo— porque suma a alguien verdaderamente identificado con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
4.- Crece Adán como aspirante. La cercanía de César con AMLO —probada durante muchísimos años— beneficia a Adán Augusto no solo porque mejorará la eficiencia de Gobernación, sino especialmente porque refuerza la idea de que el titular de la dependencia es uno de los más fuertes aspirantes a quedarse con la candidatura presidencial de Morena para las elecciones de 2024.
5.- Presiona a Claudia y a Marcelo. Gracias a César Yáñez el secretario de Gobernación es un aspirante presidencial mucho más fuerte hoy que ayer; presiona sin duda a Claudia Sheinbaum y a Marcelo Ebrard, ello a pesar de sus números no muy elevados en las encuestas —Adán está en un lejano tercer lugar, superado con facilidad por la líder, Claudia, y por quien marcha en segundo lugar, Marcelo—.
6.- Mala noticia para el canciller. El crecimiento de Adán Augusto como precandidato presidencial perjudica sobre todo a Marcelo, quien no tiene a su lado a nadie que pueda presumir de tanta cercanía y lealtad de décadas con AMLO.
7.- La jefa de gobierno resiste. Claudia se ve menos afectada, ya que la gobernante de la Ciudad de México está arropada por gente que Andrés Manuel aprecia y respeta por su entrega a la causa de la 4T, como Martí Batres y, muy destacadamente, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, quien antes de ocupar este puesto fue la segunda en la estructura encabezada por Sheinbaum.
8.- Mejorar en las encuestas. Desde luego, César Yáñez será fundamental para que Adán Augusto crezca en las encuestas; no tiene mucho tiempo, pero si se aplica en un año podría volverse muy competitivo. César conoce algunas fórmulas para lograrlo.
9.- Columnistas. Es en el juicio de la comentocracia donde Adán Augusto verdaderamente mejorará su posición: los medios empezarán a mostrarlo como un aspirante presidencial más sólido que Ebrard y ya casi del nivel de Sheinbaum.
10.- El décimo y más importante mandamiento de la sucesión: no pelear. El reto para Adán Augusto —y para César— será no lastimar con Claudia, tan cercana a AMLO como cualquiera de ellos dos. Ella es una mujer de izquierda muy destacada desde su época estudiantil y con una trayectoria al lado de AMLO que merece respeto, y se hará respetar.