El origen de los videos
Felicidades a Carlos Loret: muy buenas notas ha difundido, sobre todo las relacionadas con los videos de dos hermanos de AMLO.
¿Realizó Loret de Mola una investigación periodística seria para descubrir los videos de Pío y Martín López Obrador? No, de ninguna manera.
Gente de poder filtró a don Carlos Loret tales videos. Lo contó Raymundo Riva Palacio en El Financiero: “Dos semanas antes de que se difundiera el video de Pío, un personero no identificado se lo ofreció a una televisora, que se negó a difundirlo. Latinus fue la segunda apuesta y lo detonó”.
¿Qué es Latinus?
Un portal de internet en el que colabora, y quizá dirige en lo editorial, el señor Loret de Mola.
Latinus es algo más. Es una empresa con recursos sorprendentemente abundantes para pagar, veamos:
- producciones televisivas caras, que en la actual crisis mediática no financian, para sketches políticos poco comercializables, ni las cadenas de TV más importantes;
- los honorarios —elevados, me alegro por ellos y ella— de sus principales colaboradores, Brozo, Galilea Montijo, Carlos Loret y Fernando del Collado; este último dejó su espacio en Milenio, donde no le iba mal, seguramente porque en Latinus se le ofreció muy buen dinero, y
- patrocinar encuestas electorales carísimas al diario Reforma, que ni este periódico, el más capitalista de los diarios mexicanos, se atrevió a costear.
¿De dónde sale el presupuesto de Latinus?
De la familia de Roberto Madrazo, exdirigente nacional del PRI, que entre otros negocios se dedica a la venta y arrendamiento de equipos médicos sofisticados a los gobiernos estatales, como el de Michoacán.
¿Michoacán? Sí, entidad cuyo gobierno, se sabe, ha financiado a Latinus. No puede ser casualidad, entonces, que la encuesta de Reforma para el portal en el que trabaja Loret de Mola haya dado la ventaja al candidato que finalmente perdió, pero que era el único que podía seguir apoyando con recursos a la familia de Roberto Madrazo.
¿Quién es el personero?
Si Loret no realizó ninguna investigación periodística para descubrir los videos de los hermanos del presidente López Obrador, ¿cómo los consiguió? Ya lo dijo Riva Palacio: “un personero no identificado” los entregó al colaborador de Latinus.
¿Quién es ese “personero no identificado”? Lo ignoro, pero debe ser alguien que ha dedicado muchos años de su vida a espiar a AMLO y a quienes le rodean.
¿Sospecho de alguien en particular que tenga interés especial en espiar a Andrés Manuel y, además, capacidad para hacerlo? Sí, mis sospechas me llevan a pensar en:
- gente de los anteriores gobiernos, el de EPN y Calderón;
- el propio Madrazo, quien odia a AMLO desde los tiempos en que ambos se enfrentaron electoralmente en Tabasco;
- Carlos Salinas de Gortari, el expresidente que teme ir a la cárcel si la 4T encuentra elementos para enjuiciarlo, y
- grupos empresariales que rechazan la ideología de López Obrador.
El jabón del mártir
Dice Loret que AMLO no ha tenido “empacho en usar el poder del estado” para atacarlo con el viejo tema del montaje del caso Cassez-Vallarta.
¿Tanto así? No lo creo. El presidente de México solo ha recordado, en sus mañaneras, uno de los episodios más lamentables en la historia del periodismo mexicano, en el que Carlos Loret jugó el triste papel de cómplice de dos policías corruptos deseosos de popularidad mediática, Genaro García Luna y Luis Cárdenas Palomino; en el mejor de los casos, Loret resultó el clásico tonto útil al que recurrieron tales personajes.
Dice Loret de Mola que AMLO lo ataca “contado con instrumentos útiles como los medios de comunicación que se la viven lavándole la cara: Carmen Aristegui, Julio Astillero, La Octava, los youtuberos, otros más, que han alentado esta mentira acusándome a mí”.
¿Eso es cierto? Es falso, ya que al menos Carmen Aristegui y Julio Hernández han denunciado durante años, desde mucho tiempo antes de que Andrés Manuel llegara al poder, el montaje de Loret.
En su defensa, Carlos Loret encuentra que el fondo del ataque que recibe por parte de los periodistas que se dedican a lavarle la cara a AMLO radica en que ha dado a conocer los videos de los hermanos del presidente.
Eso es falso. En primer lugar porque Andrés Manuel no necesita que nadie le lave la cara: la tiene limpia, hagan lo que hagan sus parientes o los funcionarios y funcionarias de su gobierno. En segundo lugar, se trata de una gran mentira porque Aristegui y Astillero, por elemental defensa del periodismo ético, han cuestionado desde hace muchos años a Loret por el montaje Cassez-Vallarta, y cuando lo han hecho Carmen y Julio no han pensado en beneficiar —o perjudicar— a López Obrador.
Las críticas a Loret por el montaje solo podrían lavarle la cara al propio Loret; al menos es lo que pretende el colaborador de Latinus, la empresa de la familia Madrazo, quien ha usado las críticas en su contra para limpiarse la mancha de conductor de noticieros que participó —voluntaria o involuntariamente— en un enorme engaño periodístico, y que hoy usa el montaje como crema cosmética para maquillarse e intentar presentarse con la imagen de un prócer de la libertad de expresión acosado por un gobierno autoritario y sus medios aliados.
Ni la burla perdona don Carlos Loret.