Al cerrar el capítulo de este año políticamente intenso, con la vuelta triunfal de los últimos meses de AMLO y los descalabros constantes de la oposición y su candidata “artificial”, quiero expresar mi profundo agradecimiento a mis “tres lectores”, como dijeran los clásicos.
Algunos festejarán el “fin de AMLO” (al cumplir su mandato constitucional). Otros se sentirán en la zozobra al perder al referente que ha encabezado la política mexicana las últimas dos décadas y la política latinoamericana durante el último lustro.
Esperemos, entonces, que este nuevo año traiga debates acalorados y confrontación ideológica, sí, pero no violencia de la derecha, ni mucho menos guerra sucia, aunque dudo que sean capaces de hacer otra cosa.
En estas líneas, seguiré compartiendo hasta donde me sea posible reflexiones, análisis y perspectivas sobre los acontecimientos políticos que definirán el rumbo de nuestro país y el resto del mundo, así cómo algunos de mis desvíos a temas musicales y a veces cinematográficos.
Les deseo un próspero año nuevo, lleno de esperanza en un mundo en crisis y zozobra desde la entrada de la pandemia en el 2020. Que nos sea más leve después de un tercio de década lleno de zozobra y sufrimiento.
¡Feliz año nuevo 2024!