Quien a estas alturas piense que ganar la elección de 2024 va a ser un día de campo para Morena, peca de ingenuo. Y en el caso de que la ganara, días difíciles vendrán, pues no será fácil para Sheinbaum mantener la gobernabilidad, ya que tendrá que lidiar con un escenario de polarización y división, tanto en el ámbito nacional, como en el regional, creado y fomentado por su antecesor, como parte central de su estrategia política, particularmente en este último año de gobierno.
Aunado a lo anterior, en el caso de que Sheinbaum asumiera la presidencia, va a tener que gobernar al lado de un “expresidente” que nunca se preparó ni racional ni emocionalmente para irse, que no quiere irse y que no se va a ir. Un hombre cuya personalidad mesiánica le impide aceptar que alguien más de su secta pueda gobernar el país sin los “sabios consejos” de quien por derecho divino se siente el elegido.
Su inclinación natural al mesianismo y al poder autárquico fue muy clara desde el primer día de gobierno, cuando tomó la monárquica decisión de trasladarse a vivir a un palacio. El mensaje era claro, en un palacio hay un rey; el rey ordena, el rey impone y los súbditos obedecen. No hubo asesores que pudieran decirle que México es una democracia republicana.
Una vez instalado en palacio el presidente López sólo tuvo en mente seis objetivos:
1. Dividir a la ciudadanía, porque el que divide vence y es la forma de extender el poder omnímodo.
2. Amenazar y perseguir a miembros destacados de partidos políticos para acotar la actuación de la oposición.
3. Convertir a Morena en un partido aplanadora, obediente y servil, para tratar de modificar preceptos legales contrarios a sus intereses.
4. Destruir las instituciones autónomas para evitar contrapesos.
5. Mantener a los pobres más pobres y aprovecharse de sus necesidades, para convertirlos en votos electorales.
6. Preparar la imposición de su alfil para el siguiente período presidencial.
Las razones de la elección de Sheinbaum son de todos conocidas; ni Monreal, ni Ebrard ni siquiera Adán Augusto le hubieran asegurado la lealtad ciega y la sumisión que aquélla sí le garantiza. Adicionalmente, la exjefa de gobierno resulta la figura más débil y adecuada para imponer decisiones respecto al ejército que se tomarán única y exclusivamente desde la finca La Chingada.
Mantener de su lado al sector militar, al que ha comprado al entregarle todo el poder y todo el dinero, es un factor fundamental para el proyecto transexenal que el presidente López se ha trazado. La opacidad de los cientos de miles de millones entregados a los fideicomisos del ejército así lo demuestran.
Sin embargo, esta ruta para el proyecto transexenal trajo dos consecuencias que pueden alterar el mosaico político en el corto plazo: no todo le salió al presidente como él esperaba que saliera, y en el camino dejó muchos damnificados que, más temprano que tarde, pueden convertirse en un inesperado bumerang.
Veamos algunos de los acontecimientos que se engloban en estas consecuencias:
- Todas las acciones encaminadas a transgredir la ley para satisfacer los caprichos del presidente, se encontraron con un fuerte dique llamado Suprema Corte de Justicia de la Nación, que le ha recordado que un presidente no debe intentar violar la Constitución.
- La intentona particular de extender inconstitucionalmente el mandato de Arturo Zaldívar al frente del tribunal supremo, arrinconó a este ministro en el basurero de la historia, aislándolo dentro de la propia Corte por faltar al juramento que alguna vez hizo de defender la Constitución.
Mención aparte merece la jugada maestra maquiavélicamente fraguada entre el ministro tiktokero y el presidente. Creo que embaucaron a todos, pero la razón de la renuncia no es más que maniatar a la futura presidenta, sea Xóchitl o sea Claudia, impidiéndole nombrar un ministro que por ley debería de corresponderle.
- Las humillaciones, ofensas y groserías a la ministra Norma Piña, sólo engrandecieron su figura. Rara vez se ha visto un aplauso tan prolongado y cálido como el que le ofrecieron al cumplir 35 años de servicio en el poder judicial. Ella, con apego a la Constitución, le ha ganado las partidas al presidente y eso lo tiene fuera de sí.
- Las amenazas y ataques a la oposición no sólo mantuvieron unidos a los partidos políticos, sino que los hicieron cada día más sólidos en cuanto a actuación legislativa se refiere.
- Las afrentas directas a las clases medias y ciudadanos pensantes en este país, conformaron una sociedad más fuerte, más unida, y más participativa.
- El abandono brutal de las clases más necesitadas del país, quitándoles, entre otros, guarderías, medicinas y posibilidades de salir adelante por sí mismas, derivaron en reclamos y manifestaciones constantes de esa población, clamando por derechos que tenía con los gobiernos demócratas.
Por lo que toca a Morena, las situaciones son muchas y diversas, pero resaltaremos las más importantes:
- Las humillaciones a Monreal y a Ebrard, que dejaron en estos dos profundas heridas difíciles de resanar.
- El desecho cual pañuelo facial, del hermano Adán Augusto y su desaparición del mapa político tabasqueño.
- La injusta, inmerecida y brutal ofensa al pueblo guerrerense ante el abandono casi total y participación tardía de los gobiernos federal, estatal y municipal ante los estragos criminales de Otis.
- Y quizá, de las más importantes, por lo que representa en la elección por venir, la ofensiva imposición que el presidente hizo de las candidaturas de Morena el pasado viernes 10 de noviembre, dejándole a Claudia el bastón, pero quitándole el mando.
Alegando paridad de género, de la forma más ruin y electorera, Morena modificó en el papel lo que la gente, el “pueblo” al que ellos tanto recurren, había decidido en las “encuestas”.
Para favorecer las decisiones del presidente (encubiertas como decisiones del INE) dejaron a un lado a candidatos ganadores, y dieron paso a mujeres, a quienes, desde mi particular punto de vista, debiera darles vergüenza ganar posiciones sin tenerlas merecidas.
Es el caso al menos de Jalisco, Guanajuato y CDMX, situación que abre las puertas a que la oposición no sólo gane alcaldías, sino entidades completas, incluyendo a la CDMX.
Es muy importante ahora que la oposición muestre la seriedad y el compromiso, así como las propuestas que delineó en la selección de la coordinadora del Frente Amplio por México, lo cual permitió conseguir un amplio consenso, por la transparencia, la novedad y la frescura del método.
Es indispensable que los partidos se mantengan unidos y fuertes, tanto en la elección de sus precandidatos, como en la seriedad de los compromisos, y es fundamental que se tenga la certeza de que quienes participen sean realmente personas que puedan sin duda alguna ganarle a Morena.
La oposición tiene muy buenos gallos. Veo como los más fuertes y preparados a Adrián Rubalcava, a Sandra Cuevas y a Santiago Taboada.
El futuro de México está en juego, y puede ser uno muy alentador si nosotros como ciudadanía, damos la batalla.
El presidente puede tal vez ganar la presidencia, pero perder al país.
Puebla, Puebla, 13 de noviembre de 2023.