Se aproxima la celebración del evento de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), anunciado en el marco de su “Simposio Mundial de Sostenibilidad”, cuyo eje principal es que las líneas aéreas puedan adquirir unidades de emisiones elegibles (EEU, por sus siglas en inglés).

Las unidades de emisiones elegibles son una especie de “créditos de compensación de carbono” que podrán ser compradas durante este último trimestre del año a través de la Bolsa de Carbono de la Aviación (ACE).

¿Y qué significan? Que las líneas aéreas pueden adquirir este instrumento para reducir su huella de carbono. Es un plan que se está trabajando en conjunto por parte de la IATA y CORSIA (Carbon Offsetting and Reduction Scheme for International Aviation).

A partir del año 2016, varios gobiernos aceptaron el plan de compensación y reducción de carbono para la aviación internacional de CORSIA, con la finalidad de estabilizar las emisiones netas de gases de efecto invernadero a la atmósfera a partir del año 2021.

Las unidades de emisiones elegibles (EEU) que saldrán a la venta, tienen previsto cubrir las emisiones realizadas del periodo de 2024 a 2026 y las cuales deben de cancelarse antes del 31 de enero del 2028. Resaltando que el Estado de Guyana es el único que ha realizado la venta de 7 millones de dólares.

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Marie Owens Thomsen, vicepresidenta sénior de sostenibilidad, y economista en jefe de la IATA declaró a los medios:

“Esta es la primera vez que se organiza un evento de este tipo y no podría haber llegado antes. Los Estados aceptaron CORSIA, pero hasta ahora Guyana es el único país que cumple con su obligación de poner a disposición los créditos de carbono necesarios. CORSIA es fundamental para los esfuerzos de descarbonización de la aviación y este evento será un llamado de atención para que los Estados hagan posible que las aerolíneas cumplan con la obligación de liberar los EEU necesarios”

Marie Owens Thomsen, IATA

Y dicho por ellos mismos dentro del manual CORSIA: “La compensación no pretende sustituir los esfuerzos por reducir las emisiones de carbono del sector mediante avances tecnológicos, operativos y de infraestructura. CORSIA no hará que las aerolíneas se esfuercen menos por aumentar el uso de SAF y abogar por una mayor producción, aumentar la eficiencia del combustible e implementar otros avances tecnológicos, como parte del compromiso #FlyNetZero de la industria.”

Es decir, es una herramienta más para ir trabajando rumbo a la descarbonización de la industria aérea. ¿Qué es lo que se requiere para poder acceder a este tipo de compensación?

Debemos dejar claro que este tipo de medidas comenzaron a utilizarse en 2021 y que además las aerolíneas que se acojan a este deben comprometerse a cumplir con la ruta de descarbonización.

La Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), acordó que los requisitos de la compensación del CORSIA se hiciera en fases:

  • Desde 2021 hasta 2026 (fase piloto de 2021 a 2024; y primera fase de 2024 a 2026), solo los vuelos entre Estados que se ofrezcan voluntariamente a participar en CORSIA estarán sujetos a requisitos de compensación.
  • A partir de 2027, todos los vuelos internacionales estarán sujetos a requisitos de compensación. Sin embargo, los vuelos con origen o destino en países menos adelantados, pequeños Estados insulares en desarrollo, países en desarrollo sin litoral y Estados que representaron menos del 0,5% del total mundial de RTK (Real Time Kinematic o navegación cinética satelital en tiempo real) en 2018 estarán exentos de los requisitos de compensación, a menos que estos Estados participen de forma voluntaria.

Por otro lado, la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) calcula que las reducciones a las emisiones de CO2 a la atmósfera ronden o sean equivalentes a una tonelada, así que se incentiva a las líneas aéreas a utilizar este mecanismo.

Todo con el objetivo final de hacer de la aviación una industria más sostenible y amigable con el medio ambiente. La meta es que para el año 2050 las emisiones se reduzcan a cero.

Es una meta ambiciosa, y en el camino hemos podido ver que no será sencillo; son muchos los factores que intervienen, no solo los científicos y tecnológicos; también intervienen factores humanos, políticos y macro económicos.

Pero vale la pena hacer el esfuerzo, pues como lo dijo Mahatma Gandhi: “Lo que le hacemos al mundo, nos lo hacemos a nosotros mismos”. Es un hecho ineludible, somos la primera generación que siente los efectos del cambio climático, pero también somo la última que puede hacer algo al respecto.