El compañero presidente Andrés Manuel López Obrador está pasando por momentos difíciles, ya no puede ocultar la corrupción que impera en su gobierno, mantener su narrativa anticorrupción e insistir en una imagen impoluta, ya no le alcanza.
Los últimos eventos han sido demoledores para su imagen y su discurso, el reportaje de la revista Proceso y de Carmen Aristegui sobre el conflicto se interés de sus hijos, los empresarios dueños de la chocolatería Rocío con Sembrando Vida y la de su secretario particular Alejandro Esquer, pillado en video haciendo “carrusel” con fuertes cantidades de dinero en efectivo, como en su momento lo hizo su otrora secretario particular, René Bejarano.
En defensa de la corrupción
El presidente, dedicó la mañanera del lunes a justificar lo injustificable y eso es algo ya no puede hacer. En su larga perorata justificadora, acabó defendiendo al señor de las ligas, René Bejarano y a Gustavo Ponce, su exsecretario de finanzas, por andar apostando los recursos de la CDMX en Las Vegas, todo para decir que él es víctima de sus adversarios.
Tan grande es su afán de deslindar a los suyos de los evidentes actos de corrupción, que acabó por reconocer que su discurso y su cantaleta de “honestidad valiente” simple y llanamente son pura falsedad. Así lo dijo: Y resulta que Ahumada tenía penetrado todo el gobierno, todo el gobierno, delegados, todo, comprados a todos.
Así aceptó que Ahumada, un simple y corrupto contratista, tenía comprados a todos, pero ¿cuántos de los “comprados” en ese gobierno son hoy parte del equipo de AMLO? Empezando Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Martí Batres y muchos más de los que participaron en armar el “cochinito” para la campaña de 2006 y ahora son flamantes funcionarios de la 4T.
AMLO se ha dedicado a justificar a Bejarano, Ponce, Esquer y a todos los funcionarios de la 4T sin importar que sean claramente exhibidos sus actos de corrupción, para él es simple, quien los denuncia o los exhibe, son traidores a la Patria que están en contra de su movimiento.
Normalizar la corrupción
De acuerdo con lo que AMLO señala, es justificable recibir bolsas con dinero y admitir que no las declararon; está bien aceptar públicamente ser un desempleado y, cuando tu papá llega a la presidencia, convertirte en un próspero empresario con ingresos millonarios, viajar por el mundo y asistir a sitios vacacionales exclusivos.
Está bien depositar efectivo en carrusel, eliminarlas licitaciones de ley para adjudicar contratos del gobierno federal mediante asignaciones directas, realizar compras a sobreprecio; es correcto que los hermanos del presidente de la República reciban dinero en efectivo de origen desconocido, porque es para “la causa”, es lo normal, es estar a favor del movimiento.
Gertz Manero
AMLO tampoco considera grave que el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, y quien fuera el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto, utilicen sus puestos para acusarse mutuamente de corrupción, uno de hacerse de grandes propiedades y el otro, el Fiscal, de robar a su familia, de tener dinero en paraísos fiscales o robarse el dinero de la Fundación de la Universidad de Puebla.
Para AMLO los hechos de corrupción que derivaron en la tragedia de la Línea 12 del Metro con un saldo de 26 muertos, son solamente un ataque contra su persona, porque la culpa la tuvieron un perno y un tornillo y que el director de la CFE, Manuel Bartlett, acumule al menos 23 propiedades y una fortuna de poco más de 700 millones de pesos, que la directora de la Conade haga y deshaga con el presupuesto de la institución lo que se le ocurra, compra de camionetas blindadas, desvío de recursos, etc.
Es aceptable que el senador de Morena por Hidalgo, aún contrariando sus políticas de austeridad, viaje en jets privados; para AMLO esas denuncias no son más que “politiquería”.
Para el compañero camarada no es necesario desmentir, aportar datos y ni siquiera argumentos, simplemente justifica la corrupción de los suyos.
Es la realidad de este gobierno, lo que Andrés a través de su narrativa ha venido haciendo es “institucionalizar” la corrupción, todo se vale, siempre y cuando, se haga en favor de él o de la 4T, quien lo cuestione es traidor y quien lo denuncie, actúa contra México. Qué cinismo.