El periodismo en México ha vuelto a ser víctima de una agresión, particularmente en la persona del reconocido periodista Jaime Barrera Rodríguez, presentador del noticiero estelar de Televisa Guadalajara, editorialista cotidiano en El Informador, conductor estrella de noticieros en Líder Informativo de Mega Radio y sobre todo, un personaje mucho muy respetado en la sociedad por su solvencia como profesional del periodismo y la comunicación, más allá de los medios en que se desempeña.
De acuerdo con las pesquisas de la Fiscalía del Estado de Jalisco, Jaime Barrera fue privado de su libertad la tarde del pasado lunes por cuatro hombres y al menos uno de ellos portaba un arma larga. Hasta el momento en que redacto este texto, no se conoce información oficial respecto a su localización.
A Jaime se le vio por última vez al salir de las instalaciones de una radiodifusora en la que trabaja alrededor de las 14:05 horas. La familia confirmó que perdieron contacto con él y las alarmas se encendieron cuando el presentador no llegó a preparar el corte informativo previo y a conducir el noticiero nocturno de N+ en Guadalajara.
En conferencia de prensa la fiscalía de Jalisco dio detalles la mañana de este martes sobre la desaparición del periodista y confirmó que habría sido secuestrado por un grupo de sujetos armados.
Luis Joaquín Méndez, fiscal de Jalisco informó que, según un video, el destacado comunicador habría sido privado de su libertad a las 14:03 al abandonar la sede radiofónica.
El funcionario también dijo que se lo habrían llevado entre 3 o 4 personas y que al menos una de ellas portaba un arma larga.
Según lo dado a conocer por la fiscalía de Jalisco, se realiza un operativo de búsqueda y localización del periodista Jaime Rodríguez, mismo que lleva a cabo el personal de la Fiscalía Estatal, Seguridad Pública, Ejército, Guardia Nacional y otras autoridades federales.
También se informó que tras la realización de este operativo conjunto en Guadalajara y Zapopan hallaron el vehículo del periodista en el que se encontraron huellas dactilares.
Se informó que se dio seguimiento al vehículo que posiblemente participó en el probable secuestro del periodista Jaime Barrera, quien por cierto, no llevaba su teléfono celular, factor por el que se hace más compleja su búsqueda y localización.
¿Quién es Jaime Barrera?
Jaime Barrera es un periodista muy reconocido en Jalisco, que comenzó a trabajar como reportero desde que era estudiante de Ciencias de la Comunicación en la Universidad ITESO (1985-1989).
A lo largo de casi 30 años, Barrera ha laborado en estaciones de radio, medios impresos, y televisión, además de ser columnista en un diario local y haber sido director editorial de Milenio Jalisco.
Actualmente trabaja como conductor de noticias de N+ en Televisa Guadalajara, también colabora en EL INFORMADOR y en Canal 44.
Ha impartido clases en el ITESO, UNIVA y en la Universidad Panamericana. Es fundador del noticiero Línea Universitaria en Radio Universidad y ha laborado para otros medios como el diario El Norte y Reforma.
La noticia en Jalisco tiene conmocionado al medio periodístico, y a la ciudadanía en general, siendo que es la primera vez que un periodista de esta entidad es alcanzado por criminales, según refirieron en su reporte las autoridades al tratarse de un grupo de hombres que portaban armas largas.
El tema es que sin afán de hacer de esta tragedia un tema político, no se puede dejar de mencionar que estamos bajo la égida de un gobierno que ha sido complaciente con los delincuentes a quienes les ha otorgado toda clase de concesiones desde el momento en que se decanta por repartir abrazos en lugar de balazos, que pide que se les dé un trato humanista, y que como castigo a su criminalidad pide a sus padres y abuelos que les jalen las orejas.
Andrés Manuel López Obrador ha sido complaciente con los grupos delincuenciales y al mismo tiempo implacable en la persecución de periodistas que no le son afines.
La protección a periodistas no es un tema prioritario para el gobierno obradorista, y los asesinatos de alrededor de 50 comunicadores en el presente sexenio es prueba fehaciente de ello.
“Se estima que durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador en el gobierno federal, han muerto violentamente más de 50 personas dedicadas al oficio de informar, principalmente a través de los llamados medios informativos tradicionales.
La diferencia de cifras se ejemplifica a la perfección en 2022, cuando el gobierno de México reconoció 13 asesinatos con estas características, mismo número que avala el organismo Artículo 19, señalando que los crímenes están relacionados directamente con el ejercicio del periodismo; mientras que la Federación Internacional de Periodistas (IFJ) advierte que fueron 16 los informadores privados de la vida, y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés) contabiliza 19 homicidios de reporteros”. (Semanario Zeta 09/01/24).
“Las cifras de violencia hacia los periodistas en México son alarmantes y no dejan de aumentar. El país está arriba en la lista de impunidad en estos crímenes y específicamente en desaparición de comunicadores ocupa el primer lugar del mundo, con 100% de impunidad, según Reporteros Sin Fronteras.
En crímenes cometidos contra periodistas, “México es uno de los países con mayores índices de impunidad en América Latina, sólo seguido por países como Honduras, Colombia, y Brasil. Pero en el mundo se encuentra a la par de Siria, que es un país en guerra”, señala Balbina Flores, representante en México de Reporteros Sin Fronteras.
Además, según reporta la organización, el país “ostenta el triste récord del mayor número de asesinatos de periodistas en el mundo desde 2017″. Y añade: “Desde esa fecha, México suma el 14% de todos los periodistas asesinados en el mundo”. (France 24 03/11/23).
La tarde de este martes más de un centenar de periodistas jaliscienses se concentraron en la Plaza de la Liberación de Guadalajara, frente al Teatro Degollado y a espaldas de la Catedral, para exigir a las autoridades se le localice sano y salvo. Jaime Barrera no será una estadística más. Desde aquí me sumo a la exigencia de que se le localice sano y salvo. Porque no se calla la verdad desapareciendo o quitándole la voz a un periodista. En donde estés Jaime, tu familia, tus amigos, tus colegas y tus múltiples audiencias te estamos esperando.