Desde 2015, en la Ciudad de México el maltrato animal está tipificado como delito penal, gracias a la intervención e impulso de la entonces diputada del PRI, María de los Ángeles Moreno, con el apoyo del grupo parlamentario del PAN, Santiago Taboada, Christian Von Roerich, Jorge Gaviño de Nueva Alianza y Jesús Sesma del Partido Verde Ecologista de México, sin embargo, han sido varias ocasiones en las que en redes sociales, nuevamente salen a la luz nuevos casos. En esta ocasión fue Haru.
Haru, era un gatito callejero que fue adoptado por un colectivo del CCH, y quien fue brutalmente torturado y asesinado, el día 28 de septiembre de este año.
En redes sociales el colectivo “Q CCHeros” del plantel Vallejo de la UNAM, denunció los hechos. Como protesta, los jóvenes tomaron el plantel, ellos ya habían recibido bastantes amenazas en su contra, ya que son uno de los grupos más activos del plantel, ante el asesinato de su gatito Haru, estudiantes han pedido en diversas ocasiones a las autoridades del CCH acceso a las cámaras, pero se les ha negado.
¿Por qué el CCH niega información de un acto criminal que sucedió en sus instalaciones? ¿A quién protegen?
Estudios del FBI de los años 70 revelan que el maltrato animal es un indicador potencial de probables asesinos. Con seis meses de vida, Haru fue utilizado por grupos contrarios para dar un mensaje. Existen potenciales homicidas en el CCH quienes fueron capaces de arrebatarle la vida a Haru, son capaces de cometer actos violentos contra los humanos.
Me cuesta mucho escribirlo, pero hay que visibilizarlo, Haru fue encontrado destripado, ahogado, con golpes y fracturas en cráneo y mandíbula, un gatito de 6 meses, un bebé. Si esto hacen con un animal inocente, el siguiente paso es una persona.
A la fiscal Ernestina Godoy, como protectores de animales pedimos su intervención para tener acceso a las cámaras del Plantel y saber quien o quienes mataron a Haru, para hacer la denuncia pertinente ante la Fiscalía y que sean aplicadas las leyes.