TENGO OTROS DATOS
La entrada en operación del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) ha provocado un sin número de criticas por parte de la oposición al gobierno de la Cuarta Transformación. Los comentarios y juicios de valor respecto al nuevo aeródromo ubicado en Zumpango, Estado de México, son mucho y a veces desproporcionados, carentes de veracidad y llenos de mala fe.
La senadora del Partido Acción Nacional (PAN) Kenia López Rabadán dijo que la puesta en marcha de la terminal aérea se había hecho con obras inconclusas y representa un grave riesgo para los mexicanos y aseguró que se tendrá un costo descomunal para el erario. “El capricho presidencial saldrá en más de 400 mil millones de pesos, con lo que se pudieron construir 245 hospitales generales, más de 6 mil 500 escuelas en todo el país o comprar 1 millón de patrullas”, afirmó la legisladora.
La política panista manifestó que este “elefante blanco” no cuenta con certificación para realizar ni recibir vuelos internacionales.
Los datos que maneja López Rabadán no corresponden a la realidad, la información que usa es incorrecta y manejada con muy mala intención para denigrar a sus adversarios.
La entrada en operación del AIFA este lunes 21 de marzo transcurrió sin novedad y los usuarios y las aerolíneas no reportaron que hubiera anomalías en la operación que significara riesgo para los pasajeros o para el personal que labora en el nuevo aeropuerto.
En lo que se refiere a los datos sobre el costo de la construcción y puesta en marcha del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles que maneja la senadora estos no son correctos ya ella esta sumando un costo exagerado sobre la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) en Texcoco, Estado de México y sobre precios para la construcción del AIFA.
En febrero de 2021 se filtró a la prensa que la cancelación del NAICM tuvo un costo 232% mayor a lo previsto por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, al ascender a 331 mil 996 millones 517.6 mil pesos, monto que aún podría incrementarse, reveló la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
La información que fue ampliamente difundida todo por medios de comunicación opositores al Gobierno de la Cuarta Transformación señalaba que de acuerdo a la institución que dirige David Rogelio Colmenares Paramo, la administración actual estimaba un costo de 100 mil millones de pesos, la suspensión de la terminal aeroportuaria, sin embargo, la diferencia alcanzaba los 231 mil 996 millones 517.6 mil pesos.
El gozo de los contrarios a la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador por la información filtrada se acabó tres días después cuando en un comunicado, la ASF afirmó haber detectado que dicho monto que arrojaba la auditoria por la suspensión del AICM “es menor a lo estimado inicialmente” y lo achacó a “una deficiencia metodológica”.
Hasta diciembre del 2021, el desembolso que se ha hizo para construir la nueva terminal aérea ha sido de más de 104 mil millones de pesos, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, aunque no incluye la inversión de 2022.
Según datos del mandatario mexicano haber construido el AIFA y cancelado el proyecto del aeropuerto de Texcoco trajo ahorros para el erario en más de 100 mil millones de pesos, además de que no se destruyo el aeropuerto Benito Juárez.
El nuevo aeropuerto ubicado en Zumpango, Estado de México si cuenta con la categoría internacional.
El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles requiere dos certificaciones para considerarse de escala internacional. La Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) avala la infraestructura en aire; mientras la de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) acredita la que se encuentra en tierra.
En un acuerdo publicado en el Diario Oficial el pasado mes de febrero, el presidente Andrés Manuel López Obrador declaró “la internacionalización del aeródromo” de Santa Lucía; en el documento se asegura que el AIFA fue construido “con estricto apego a las normas y métodos recomendados por la OACI, las leyes aeronáuticas y las mejores prácticas en materia aeroportuaria a nivel mundial”.
Con base en eso, mandata a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes para que por conducto de la Agencia Federal de Aviación Civil se notifique a la OACI que Santa Lucía puede tener operaciones internacionales. Una declaratoria que está permitida bajo el anexo 14 del Convenio sobre Aviación Civil Internacional.
El caricaturista del Reforma, Francisco Calderón “que es un fiero opositor al Gobierno del presidente López Obrador y que se cree “experto en todo” publicó el pasado 22 de marzo tuit donde asegura que: “Lo dicho: fue algo planeado para provocar y poder llamar “clasista” a quien se moleste. El punto es que el A(I)FA no es un “hub”, no tiene certificación, redujo nuestra calificación aérea, salió carísimo, está lejos, e inacabado. La fiesta de ayer sólo fue propaganda”.
El pasado mes de mayo la Administración Federal de Aviación (FAA, por su sigla en inglés) de Estados Unidos degradó a México a la Categoría 2 del Programa de Evaluación de Seguridad Operacional de la Aviación Internacional (IASA), de acuerdo con la base de datos de países publicada en el sitio de la autoridad estadounidense.
El que a las terminales aéreas mexicanas se les haya degradado su categoría en seguridad no fue debido a la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, es ilógico lo que afirma el monero narcisista Paco Calderón de que la construcción de la central aeroportuaria de Zumpango, que todavía no entraba en operación fuera la culpable de que haya bajado la categoría aeroportuaria de México.
Con este cambio, en la categoría en la seguridad las aerolíneas mexicanas que vuelen a Estados Unidos podrán continuar haciéndolo bajo las condiciones previas a la aplicación de la medida, es decir, sin agregar o modificar nuevas rutas, incorporar nuevos aviones, aumentar o reducir frecuencias, ni iniciar nuevos programas de códigos compartidos.
Esta degradación de la categoría en seguridad impedide en este momento que se establezcan rutas del AIFA a los aeropuertos de Estados Unidos; pero no impide que vuelos cargueros provenientes del país de las barras y las estrellas lleguen a la nueva terminal aérea que está en el Estado de México. El pasado 21 de marzo aterrizó en el nuevo aeropuerto una aeronave procedente de Laredo Texas que llego en el aeródromo de Santa Lucia.
El nuevo aeropuerto cuenta con recinto fiscal aduanero y oficina de migración para hacer los tramites de importación y exportación de mercancías y tramites migratorios.
La Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) tiene prevista la aplicación de la auditoría de Evaluación de la seguridad operacional de la aviación internacional (IASA, por sus siglas en inglés) durante el mes de junio, esto luego de cumplir con el último hallazgo encontrado por la autoridad de aviación estadounidense.
Cuando se recupere la categoría 1 en seguridad el AIFA podrá establecer rutas a los Estados Unidos.
Aerala, la nueva aerolínea que está constituyendo José Luis Garza Álvarez, exdirector general de Interjet, tiene un pie dentro del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, dado que se prevé que hacia el segundo semestre de 2022 inicie operaciones en este nuevo complejo aeroportuario.
La nueva aerolínea tendrá tres rutas de carácter internacional, las cuales aún están por definirse por la empresa y la autoridad regulatoria y tendrá vuelos desde Santa Lucia a varias partes del interior del país.
Las verdades a medias, ignorancia y la mala fe de los opositores al Gobierno de la Cuarta Transformación sobre el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, hablan de una muy mala estrategia política de los adversarios de la actual administración federal.