No pocas personas inteligentes y demócratas se han tragado completita la tesis de Luis Carlos Ugalde, expresidente del IFE —a quien no respeto porque, me consta, contribuyó bastante al fraude electoral de 2006—.
Ugalde, de plano, ha propuesto no acudir a las urnas durante la consulta de revocación de mandato. Según él, para no hacerle el juego a AMLO, quien utilizará tal proceso electoral para su propio beneficio.
Lamento que intelectuales con experiencia y que normalmente no se dejan convencer por charlatanes —como Enrique Krauze, Jorge Castañeda y Héctor Aguilar Camín— repitan y repitan y repitan, sin analizar las cosas, lo que afirma Ugalde.
En Reforma leí los argumentos de Krauze contra la revocación de mandato y me parecieron lamentables.
Ya en SDPNoticias el activista regiomontano Javier Livas dedicó un artículo a refutar lo dicho por el historiador.
Ahora solo diré que quienes se oponen a la revocación deberían leer lo que hoy publica en este sitio de internet el señor José Miguel Calderón, “Acudir a las urnas para salvar al INE”.
Krauze y todos los otros intelectuales que se oponen a la consulta de revocación —Gabriel Zaid, Héctor Aguilar Camín, Jorge Castañeda, etcétera— son honestos defensores del Instituto Nacional Electoral.
Si de verdad quieren que el INE no pase por un mal momento, que hasta podría llevarlo a la aniquilación, deberían promover la SÍ participación en la revocación.
Creo que el INE ha hecho su trabajo correctamente, pero…
El instituto presidido por Lorenzo Córdova en vez de permitir la promoción de la consulta de revocación, se ha opuesto a la misma.
Dicen Córdova y los otros consejeros electorales que solo pretenden que se cumpla le ley. ¿En serio?
Como jurista, Lorenzo Córdova debería saber que toda ley es interpretable; así, el presidente del INE, ante la escasez de recursos para promover debidamente la revocación, debió permitir a los políticos con más seguidores hablar de la consulta.
En lugar de ello, Lorenzo Córdova ha insistido en callar a quienes se expresan, lo que es poco respetuoso de las libertades personales.
La actitud del consejero presidente del INE ha sido interpretada por un elevado porcentaje de la sociedad mexicana como contraria a la consulta de revocación, que si se afina en el futuro será un gran instrumento de control democrático sobre quienes gobiernan.
Ahora mismo, muy probablemente la consulta de revocación no dará el resultado de dejar fuera del poder a Andrés Manuel López Obrador; la aprobación del presidente es alta y no hay razón para pensar que la gente busca que deje el cargo antes de cumplir seis años en el mismo.
Pero hemos conocido casos de presidentes fallidos que debieron haber abandonado el poder a la mitad de sus sexenios, y podremos en el futuro volver a tener gobernantes tan malos que sea necesario despedirlos lo más rápidamente que se pueda.
No es una mala idea una consulta de revocación. Entiende que a sus críticos les moleste que AMLO vaya a utilizarla para presumir su aprobación, pero...
Más les va a molestar a tales críticos que si hay una baja participación se culpe al INE.
Lo culpará la 4T, sin duda, donde no abundan los simpatizantes del Instituto Nacional Electoral, pero también responsabilizará al instituto un sector importante de la población.
Señores Enrique Krauze, Jorge Castañeda y Héctor Aguilar Camín:
Todavía tienen tiempo de apoyar la revocación; son ustedes influyentes y podrían motivar a muchos ciudadanos para acudir a las urnas.
No lo hagan por Andrés Manuel, a quien detestan, sino por el INE; lean a José Miguel Calderón, un crítico de la 4T cuyos argumentos son mucho más inteligentes que los de Luis Carlos Ugalde.
Lo mismo pido a todos los otros comentócratas que se han dejado convencer por un tipo —el tal Ugalde— que tiene como principal dato de su currículum haber sido cómplice del más grande fraude electoral de la historia, el de 2006.