Samuel García acaba de hacer lo que tenía como promesa de campaña: detuvo a “el Bronco” por un presunto desvío de dinero usado para la recolección de firmas en el proceso electoral del 2018.
No es la primera vez que pasa en Nuevo León. El mismo “Bronco” Rodríguez trabajo para detener a su antecesor, Rodrigo Medina. Medina estuvo lo suficiente para tener una fotografía con el uniforme naranja del reclusorio, salió y se refugió un buen rato en la Ciudad de México.
Cuando “el Bronco” pudo detener a Medina se convirtió en un héroe por unos días y su popularidad se cayo cuando pudo salir libre. Eso empezó con la debacle de “el Bronco”, que terminó en su postulación para la candidatura presidencial. Después empezó a caer tanto que su vuelta al gobierno combinado con la pandemia se convirtió en uno de los periodos más grises en la gubernatura de Nuevo León.
El ahora gobernador Samuel García detuvo a “el Bronco” Rodríguez con un gran riesgo. ¿Cuál es ese riesgo?
Si Samuel y su equipo de trabajo construyeron un buen caso, un caso con el que se garantice que “el Bronco” pisaría la cárcel y que se quede ahí un buen rato, la popularidad de García se iría a las nubes. Sería el primer gobernador que detiene y mantiene en la cárcel a su antecesor y podría ser un ejemplo para otros gobernantes para hacer lo mismo, entre ellos el mismo presidente.
El riesgo está en que si el caso no está tan bien construido y “el Bronco” no llega a la cárcel o no se queda encerrado el tiempo suficiente, el ridículo que haría Samuel sería enorme y todo lo que han construido desde la campaña se caería y esto casi al principio de su mandato. Todos los proyectos podrían parecer poco al momento de que “el Bronco” saliera libre, si este fuera el caso.
La moneda esta en el aire y Samuel ya tomó el riesgo. Debe de tener algo bastante bien construido pues lo que está haciendo en donde tiene más experiencia por el estudio y por ser lo que siempre ha visto con su familia. Esperemos…
Ricardo Pedraza en Twitter: @rickypedraza