Morena y el PT tienen una relación simbiótica. Son partidos aliados y sobre todo amalgamados por el inconmensurable poder político logrado con la ola obradorista el 2018. El Partido del Trabajo no estará sin Morena en un momento en el que las gotas del poder salpican más en favor del rojo laborista. Morena, aún en un punto altísimo de bono popular, no dejará de la mano al PT pues el desgaste de ejercer el poder tiene un costo. Mejor aliados. Lo han sabido desde el día uno.
Dicho lo anterior, creo que la política tiene estas cosas. Se arreglan en una mesa, cuestiones que debatimos, argumentamos y comentamos en las mesas de café y las tardes de tertulia.
Me parece que desde la 4T se dieron el lujo de experimentar con el electorado este 2023. He venido diciendo que para López Obrador es importante mantener su base, conocer el pulso de ‘abajo’, y estar vigente. Para eso las consultas populares, marchas, y bueno, las elecciones locales. Vamos, cada evento lo tomó como una práctica de bateo para ver como andaba de muñecas y reflejos para ver si sigue ‘macaneando arriba de .400′, como dicen en el beisbol.
Dos elecciones, dos bastiones del PRI, dos gubernaturas en juego, con similitudes y diferencias. En el Estado de México, fueron a la segura. Coalición total desde el inicio. Recuerdo que siempre dijimos que, de acuerdo a los números, Mejía era el mejor posicionado para encabezar la elección de Coahuila. No fue así, la gente en la encuesta morenista, decidió que fuese Armando Guadiana. A López Obrador no se le descarrila un candidato a una gubernatura y menos un partido completo. El escenario en Coahuila fue medido, tienen los números y decidieron experimentar. Terciaron la elección y observaron el comportamiento en las encuestas.
Se habló de todo. Que entregaron Coahuila a cambio de Edomex. Que los Moreira conservarían el poder en el estado del norte como una concesión a cambio del apoyo legislativo y la sumisión priista.
En tres días la alianza de la izquierda se consolidó. Lo hicieron justo al cierre de la campaña. Cuando el margen de maniobra para Manolo Jiménez y su gente es muy poca. Hay preocupación en el war-room de la alianza PAN-PRI-PRD en Coahuila.
Por supuesto que se ve mal. Pero el poder funciona así. En la 4T huelen la sangre y saben que las posibilidades de ganarlo todo se incrementan con las declinaciones del PVEM y del PT en el estado norteño. Hay quienes aun así se resisten a ver en Armando Guadiana un candidato ganador. Por supuesto que para salvar su dignidad política ni Ricardo Mejía ni Lenin Pérez aceptarán públicamente las decisiones cupulares. El PT le encendió fuego a la elección en Coahuila. El domingo sabremos el resultado.
El acuario más bonito del mundo
Déjenme aventarme esta echada. El día de ayer se inauguró formalmente el Gran Acuario Mar de Cortés. Un proyecto que le da una dimensión distinta a la Perla del Pacífico.
El legendario y mítico biólogo marino Jacques Cousteau apodó a el Mar de Cortés “el acuario del mundo” por la diversidad y riqueza de su ecosistema. El científico pasó años investigando las aguas internas de los litorales entre Sinaloa, Sonora y las dos Bajas, nunca dejó de sorprenderse del majestuoso mundo acuático del también llamado golfo de California.
Hoy el proyecto arquitectónico más importante para el puerto sinaloense, es una realidad. La inauguración oficial tuvo como invitados al secretario de Turismo Federal Miguel Torruco Marqués, el gobernador Rubén Rocha Moya y el empresario inversor Ernesto Coppel Kelly.
Sinaloa es sede del acuario más grande de Latinoamérica. Su inversión público privada suma 1.800 millones de pesos (97 millones de dólares). La obra diseñada en 50.000 metros cuadrados fue realizada por la arquitecta mexicana Tatiana Bilbao.
La apuesta del gobierno de Rocha Moya es continuar con el detonante turístico de Mazatlán. El atractivo del Gran Acuario en conjunto con el proyecto “Muros de Agua” en las Islas Marías, serán el complemento perfecto para el turista nacional e internacional.
Vanessa Félix | Twitter: @vanessafelixmx