Con un comunicado institucional, Jesús Madueña Molina, rector separado del cargo en la Universidad Autónoma de Sinaloa, ha regresado a la escena pública.

Al rector le fue retirada la medida cautelar que le separaba del cargo y regresará a despachar como máxima autoridad en Casa Rosalina.

¿Por qué? Aparentemente entró en razón, presionado por los numerosos casos penales a los que se encuentra vinculado a proceso.

¿Cómo entró en razón? En diálogo con el gobernador Rubén Rocha Moya y gobierno federal, seguramente entendió que es mejor transitar con la voluntad del pueblo que oponerse a ella.

Lo dijimos mucho en este espacio, Jesús Madueña pretendía resolver sus asuntos legales desde lo político y, al mismo tiempo, utilizar a la universidad para atender sus procesos. Equivocó la ruta y aparentemente ahora intentará una vía diferente.

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Por un lado, debe encarar sus procedimientos legales mediante los mecanismos de resolución abreviada de conflictos, y ofrecer un plan de reparación del daño, lo que al mismo tiempo implica una admisión de culpa. No hay acuerdo político que le quite a él y su grupo la obligación de acatar esta medida si quiere poner fin a su viacrucis legal. ¿Le funcionará?

En el otro frente, el político, ha decidido retomar el diálogo con el gobernador y el gobierno federal. Desistirán entonces los amparos interpuestos para frenar la reforma a la Ley Orgánica de la UAS, y desde la misma institución apoyarán la elección por voto directo que prevé la nueva ley. En el comunicado, al parecer Madueña hizo una reflexión profunda y expresa de manera recatada; “La democracia directa se afirma cuando las y los ciudadanos emiten su voto para elegir a sus gobernantes”, lo que significa que ahora sí respetará la voluntad de la comunidad universitaria.

Un triunfo democrático para el pueblo a todas luces, pues democratizar Casa Rosalina es voluntad de la comunidad universitaria y de las y los sinaloenses. Para quienes aún dudaban, queda demostrado que el gobernador nunca violó la autonomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa. Todo lo contrario. Ha sido y seguirá siendo un impulsor de la democratización del alma mater y de las instituciones educativas. También, es indudablemente otro triunfo político para el gobernador Rocha Moya, principal impulsor del combate a la corrupción y la democracia en la UAS, agua de mayo para él, sobre todo por lo que implica la tregua o el cese al fuego desde este grupo político opositor.

De algún modo, debería ser digno de análisis el cambio en la voluntad por parte de Jesús Madueña. El fallecimiento de Héctor Melesio Cuén ha generado dudas al interior del grupo político y queda claro que su voz era la de mayor peso. El aún rector ha dado un paso al frente para tomar control y liderazgo en el grupo que Cuén Ojeda habría dejado acéfalo. Una jugada que era previsible y que adelanta a Víctor Corrales, Robespierre Lizárraga y Gene Bojórquez en esa intención.

A esperar las reacciones internas del grupo o del propio Partido Sinaloense (PAS).

X: @vanessafelixmx