Hoy vengo hablarles del arduo trabajo que ha venido realizando la secretaria de Género e Igualdad Sustantiva de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA). Martha Vera Araujo cuenta con una importantísima trayectoria dentro de la aviación: más de 35 años como piloto aviador, y actualmente se desempeña como comandante del avión B787, en Aeroméxico.
Está comprometida con visibilizar un tema poco abordado en la aviación: la lactancia materna. Sabemos que nuestro país, está muy rezagado en esa materia y no se diga dentro del mundo aeronáutico, donde lactar se convierte en una proeza.
Las madres trabajadoras padecen la falta de espacios para poder lactar mínimo los seis meses que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). En el mes de abril ASPA, en conjunto con la diputada Julieta Kristal Vences Valencia del partido Morena, organizó y presidió el conversatorio “Lactancia como derecho en la Aviación Civil” en la Cámara de Diputados.
Del boletín emitido por Comunicación Social de dicho recinto, quiero resaltar, porque coincido al cien por ciento con lo externado por la diputada, lo siguiente:
“[…]la maternidad está “romantizada”, porque las circunstancia en el campo de trabajo no son fáciles, por ello es fundamental generar espacios integrales y adaptados para la lactancia.”
Julieta Kristal Vences Valencia
Como parte de la industria aeronáutica, me consta porque atestigüé la infinidad de veces en que mis compañeras sobrecargos, terminaban su lactancia al término de los permisos contemplados en el contrato laboral; la gran mayoría dejaba de lactar a los tres meses, aunque la recomendación mínima es dejarla después de los seis meses.
Tras la celebración del conversatorio, el tema se turnó a la Comisión de Comunicaciones y Transportes de la cámara baja, para elaborar la iniciativa que reforma y adiciona los artículos 33 y 47 bis de la Ley de Aviación Civil. Voy a compartirles partes sustanciales del “DICTAMEN DE LAS INICIATIVAS QUE REFORMAN Y ADICIONA LOS ARTÍCULOS 33 Y 47 BIS DE LA LEY DE AVIACIÓN CIVIL (EXP. 7172, 7243, 7275, 7483, 7795, 7902, 8289)”
En la página 6 podemos encontrar el siguiente párrafo: “La Lactancia Materna es un derecho para las mujeres, niñas y niños, mismo que se establece en el artículo 76, fracción XVI de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en el artículo 50 de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.”
Un poco más adelante encontramos, y cito textual: “Por su parte, la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado en el artículo 39, establece que la mujer trabajadora tendrá derecho a recibir capacitación para incentivar la lactancia materna como alimento exclusivo durante los seis primeros meses y complementario hasta el segundo año de vida, así como también, dos reposos extraordinarios por día para amamantar o extraer la leche materna.”
Destaco estos dos párrafos, porque en el caso de las mujeres dentro de la industria aérea -como el caso de las madres trabajadoras que por necesidad deben de viajar-, esto se vuelve casi un imposible. Sobre todo, cuando no hay claridad en qué dice la ley y cómo debe de aplicarse.
Muchas madres, tanto trabajadoras de la industria aeronáutica como madres que tienen que utilizar el avión como medio de transporte para cumplir con sus compromisos laborales, se han visto afectadas por el “poco criterio” que existe en los filtros de seguridad para abordar un avión, y verse obligadas a derramar la leche que recolectaron porque “excede” de los 100 mililitros permitidos, y peor si además cometieron “el gran pecado” de intentar pasar esos biberones de leche “sin el lactante”.
Como bien cita el dictamen, y como se abordó también en el conversatorio, el Estado tiene la obligación de garantizar que se cumpla con la lactancia materna, incluso de fortalecerla a través de programas y facilidades para ello, pues es un derecho humano.
Por ello se debe garantizar desde el gobierno, a través de los legisladores, fomentar e impulsar el derecho a la lactancia. Y es que merecen mención especial las compañeras del sector aéreo, por la naturaleza de su trabajo. Tanto a pilotos como sobrecargos les resulta imposible solicitar los dos reposos a los que tienen derecho al día, ya sea para amamantar a su bebé o para extraerse la leche materna.
No solo hablamos de los lactarios en las terminales aeroportuarias, sino también del derecho que tienen a pasar su leche, para prolongar lo más que se pueda la lactancia materna y no suspenderla a los tres meses, cuando se acaban los permisos laborales.
¿En qué consiste esta iniciativa de reforma a la Ley de Aviación Civil? En el caso del artículo 33, atañe a los concesionarios y permisionarios, entiéndase los aeropuertos, para que se pueda atender de manera adecuada a las mujeres que están en periodo de lactancia, así como las personas con discapacidad o edad avanzada.
Y el artículo 47 bis, me parece aún más significativo, porque se pide una adición, para que las pasajeras, acompañadas o no de un lactante, puedan transportar su leche materna en cantidades por arriba de los 100 mililitros.
Justamente el 20 de septiembre de este año, la Comisión de Comunicaciones y Transportes de la Cámara de Diputados, encabezada por el Víctor Manuel Pérez Díaz, de la bancada del Partido Acción Nacional, presentó el documento que lleva por título “Proyecto de Decreto por el que se adiciona un párrafo a la Fracción II del Artículo 47 Bis. de la Ley de Aviación Civil.”.
El Boletín No. 4973 de la Cámara de Diputados publicado el 20 de septiembre, cita: “Comisión aprueba reformas a la Ley de Aviación Civil para la transportación de leche materna en aeropuertos”, con el cual las pasajeras y las mujeres del sector aeronáutico podrán llevar en el equipaje de mano la leche materna. Un punto a destacar es que para viajes internacionales se tendrán que sujetar a las disposiciones y protocolos de inspección que la Agencia Federal de Aviación Civil emita.
Un punto radicalmente significativo es que también habrá que sensibilizar al personal aeroportuario para que no haya más “interpretaciones a modo” y se respeten los derechos de las mujeres lactantes, sean pasajeras o trabajadoras.
En entrevista, la Secretaría de Género e Igualdad Sustantiva de la Asociación Sindical de Pilotos de Aviación (ASPA), Martha Vera, manifestó su beneplácito por este resultado, y con prudencia señaló que falta todavía que la Cámara de Senadores continúe con este proceso legislativo, pero se manifestó confiada en que exista la disposición y sensibilidad en la cámara alta para que llegue a feliz puerto esta acción tan importante y necesaria.
Desde este espacio la felicito por el gran trabajo realizado, ya que, aunque se dice fácil, no lo es. Sobre todo, porque su gremio es mayoritariamente masculino, sin embargo, para ella esto no ha sido impedimento para buscar que sus compañeras logren un equilibrio entre su vida familiar y la laboral.
Con anterioridad he abordado lo trascendental de la conciliación materno-paterno laboral; aunque las mujeres sean las responsables directas de la lactancia materna, es fundamental el involucramiento de los padres en esta labor vinculativa con el bebé.
Espero que el proceso legislativo de esta importante iniciativa siga adelante, hasta llegar a publicarse en el Diario Oficial de la Federación; entonces podremos gritar, por todo lo alto, que sí se puede legislar en favor de las mujeres, en beneficio de ellas, y de su descendencia.