Al expresidente Felipe Calderón Hinojosa le gusta presumir en redes sociales y otros medios los empleos que ha obtenido a través de grandes corporativos internacionales, así como su asistencia a espectáculos deportivos de gran trascendencia a escala mundial, (por ejemplo, la F1 en Mónaco o el Super Bowl) tal vez queriendo dar la impresión de que es una persona altamente preparada y que sigue siendo un personaje popular. Lo cierto es que, para los mexicanos, estas chambas regaladas y las invitaciones a este tipo de eventos, han sido costosísimas.

Avangrid, compañía fruto de la fusión de la filial de Iberdrola en Estados Unidos con UIL Holding (que empezó operaciones en diciembre del 2015), incorporó al consejo de administración al expresidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, tras su decisión de la empresa del 14 de julio de 2016 para incrementar el número de puestos en el consejo de administración, y así llegar a los 14 consejeros.

El incorporar al expresidente mexicano al consejo de administración de la filial de Iberdrola de los Estados Unidos pareciera ser una especie de pago de favores al político mexicano por parte del corporativo hispano.

Felipe Calderón e Iberdrola

Iberdrola México empezó a recibir contratos y canonjías muy favorables por parte del gobierno del país latinoamericano desde que Felipe Calderón era Secretario de Energía en la administración del expresidente, Vicente Fox, y nombró en puestos claves de esa dependencia a gente de su absoluta confianza, como César Nava Vázquez, de director jurídico; Juan Camilo Mouriño Terrazo como subsecretario, y Dionisio Pérez Jácome como titular de la Comisión Reguladora de Energía (CRE). Este grupo compacto otorgó al corporativo ibérico permisos para generar, transmitir, distribuir y comercializar energía eléctrica, todas ellas, actividades que, en ese entonces, según el artículo 27 constitucional, eran actividades exclusivas del Estado.

La Auditoría Superior de la Federación (ASF) determinó que los permisos otorgados por la Secretaría de Energía eran ilegales, pero esto no impidió que los funcionarios federales les autorizaran más contratos de ese tipo y con mayores privilegios a la empresa española.

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Dionisio Pérez Jácome como titular de la Comisión Reguladora de Energía, en el 2003 permitió de forma ilegal (según lo determinó la ASF), que Iberdrola porteara electricidad que excedía más del doble de la cantidad que se le autorizó en 2002, para el “autoconsumo” de su socio Nylon de México, por lo que pidió abrir una indagatoria contra los servidores públicos de esa comisión y los de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

La participación del sector privado en la industria eléctrica del país no es nueva, tenemos que recordar que desde 1995 la colaboración privada se dio primero en proyectos de electricidad para la CFE, bajo el esquema de Construir – Arrendar – Transferir (CAT) que evolucionó en un esquema de Producción Externos de Energía (PEE), que son productores independientes acotados a la demanda del mercado. Con este esquema la CFE se encarga de producir y comprar a privados energía eléctrica, conservando a la empresa estatal la exclusividad en la transmisión y distribución de la electricidad en el territorio nacional.

Desde antes de la Reforma Energética del 2014, ya el 48 por ciento de la electricidad consumida en el país era maquilada por los conocidos como “Productores Independientes de Electricidad” (PIE), destacándose la empresa española Iberdrola, que tiene como consejera a Georgina Kessel, quien fuera en el gobierno de Felipe Calderón la secretaría de Energía.

Desde antes de la Reforma Energética del 2014, ya el 48 por ciento de la electricidad consumida en el país era maquilada por los conocidos como “Productores Independientes de Electricidad” (PIE), destacándose la empresa española Iberdrola, que tiene como consejera a Georgina Kessel, quien fuera en el gobierno de Felipe Calderón la secretaría de energía.

Si bien es cierto que había autorización para que empresas privadas maquilaran energía eléctrica para la CFE, los permisos que otorgó la CRE cuando era titular Dionisio Pérez Jácome, rebasaban lo permitido por la ley, por lo que se resolvió que los permisos a consorcios privados para generar y vender electricidad en México eran ilegales, la ASF detalló que Iberdrola fue la principal beneficiada. Para esas fechas, la CRE había otorgado 17 permisos de producción independiente que sumaban 7.092 megavatios (MW), lo cual representa el 19 por ciento del parque de generación de la CFE. Entonces habían entrado en operación ocho centrales que producían 3.495 MW. El resto estaba en construcción.

La forma que tenían las compañías ibéricas de maquilar electricidad para CFE es a través de plantas termoeléctricas a base de gas natural. La ASF en su informe adelantado del 2011 señaló que CFE solamente utiliza el 69 por ciento de su capacidad instalada en hidroeléctricas y, en cambio, usa el 80 por ciento de la luz total que generan las empresas privadas, a través de sus plantas y termoeléctricas a base de gas natural.

Los beneficios para Iberdrola por parte del gobierno mexicano no pararon, ya que en el 2006 a la empresa española se le autorizó vender energía a 194 corporativos entre ellos Bimbo, Barcel, British American Tobacco México, Cemex, Cervecería Cuauhtémoc Moctezuma, Tiendas Soriana, Maseca, esto mediante la modificación al Permiso para Generar Energía Eléctrica bajo la Modalidad de Autoabastecimiento, expedido a nombre de Iberdrola Energía de Monterrey.

Las canonjías que tuvo en México el corporativo ibérico durante el gobierno de Calderón se vieron reflejados en los estados financieros de acuerdo con información del corporativo en España, su subsidiaria en el país azteca representó en 2007 ganancias netas de 54.7 millones de euros, 64.3 por ciento más que en 2006. En ese año, que fue el primero de la presidencia del panista, se le adjudicaron al corporativo hispano 2 mil 669 millones de euros.

Felipe Calderón y Pepsico

Felipe Calderón Hinojosa presumió en redes sociales su asistencia junto con su esposa Margarita Zavala a la edición XILX del Super Bowl, resaltando también la afición del político panista por uno de los equipos contendientes del juego, los Patriotas de Nueva Inglaterra.

El expresidente acudió al espectáculo deportivo celebrado en Phoenix, Arizona, el día primero de febrero del 2015, invitado por la compañía transnacional refresquera y de alimentos chatarra Pepsico.

El político mexicano, escribió en su cuenta de Twitter: “Agradezco a @PepsiCo y a su CEO, la destacada Indra Nooyi, por su invitación al SuperBowlXILX”.

La relación de Felipe Calderón con los altos ejecutivos de Pepsico se remonta al 2006, cuando la transnacional chatarrera lanzó en el país una campaña en radio y televisión para promocionar sus bolsas de papas fritas de marca Sabritas, que pertenece a su corporativo, en donde el comercial mostraba a una familia: la mamá, el papá, el hijo y la hija que presumían “tener las manos limpias” con lo que se mandaba un mensaje subliminal para apoyar la campaña a la presidencia del candidato panista, que su slogan era que él tenía las manos limpias.

El comercial en cuestión tuvo un costo para la compañía transnacional de más de 14 millones de pesos según datos de Ibope, pero lo grave de esta publicidad es que violaba flagrantemente la Constitución, que prohíbe a extranjeros intervenir en los procesos electorales nacionales, y la legislación en la materia.

El crecimiento de Pepsico en México está asociado también al apoyo con el que ha contado a nivel tributario por parte de las autoridades hacendarias y de la ineficiente legislación para normar las agresivas y engañosas campañas de publicidad, de la empresa, sobre todo en el gobierno del político michoacano.

Coca Cola Femsa y Pepsico fueron beneficiadas de régimen tributario, ya que están bajo el régimen de consolidación fiscal que les permite deducir pérdidas de una de sus empresas contra las utilidades fiscales de otra, en materia de ISR e IVA y, al mismo tiempo, posponer gravámenes si resultan con un saldo en contra. Sólo Femsa Coca-Cola en 2008 tuvo ingresos por 168,022 millones de pesos y sólo pagó el 2.5% de impuestos en relación a sus ventas, teniendo impuestos diferidos por 2,400 millones de pesos.

Según el Informe de Resultados de la Fiscalización de la Cuenta Pública 2013, reveló que el Sistema de Administración Tributaria (SAT) le condonó, durante los ejercicios del 2007 al 2011 de manera presuntamente improcedente, multas y recargos por 929 millones 492 mil 858 pesos a Sabritas. Curiosamente el jefe del ejecutivo mexicano en esos años era Felipe Calderón.

Felipe Calderón, Checo Pérez y los contratos para la Fórmula 1

El pasado domingo 29 de mayo el piloto de Fórmula 1 Sergio ‘Checo’ Pérez, conquistó el Gran Premio de Mónaco festejando su triunfo junto con el expresidente Felipe Calderón con un gran clavado en la piscina de Red Bull.

El chapuzón del expresidente y el corredor de autos no fue de a gratis ya que detrás de estos alegres festejos están jugosos contratos y donaciones que salieron del erario público de México cuando el político michoacano fue jefe del ejecutivo.

Cabe destacar que Felipe Calderón se encontraba en la competencia ya que es el presidente de la comisión de medio ambiente y sustentabilidad en la Federación Internacional del Automóvil (FIA).

El diputado federal por Morena, Antonio Pérez Garibay, quién es papá de Checo Pérez dijo hace unos días que hay que reconocer que por Felipe Calderón también tenemos Fórmula 1 en México, él apoyó a Checo para llegar a la Fórmula 1: “siendo presidente fue el primero en apoyar a Checo, precisamente para que Checo pudiera participar en Fórmula 1″.

El político michoacano ostenta el cargo dentro del organismo debido la fortuna desembolsada por el Gobierno de México en el sexenio calderonista, pues el exmandatario pagó al menos dos contratos millonarios por más de 60 millones de pesos para patrocinar la Marca México en la escudería Sauber Motorsport de la Fórmula 1.

Aunque oficialmente los recursos financieros fueron usados para “promover” a México en el ámbito internacional, en realidad con el desembolso de ese presupuesto, Felipe Calderón se convirtió en mecenas del piloto mexicano y por medio de billetazos de la administración del panista regresó a México en 2015 la Formula 1.

De acuerdo con documentos en poder de la revista digital Polemón, la dependencia ahora disuelta -Consejo de Promoción Turística de México, S.A de C.V, pagó 36.3 millones de pesos para que la Marca “México” fuera patrocinada en el marco del Campeonato Mundial de Fórmula 1, en un periodo de ejecución del 22 de mayo de 2011 a 31 de diciembre del mismo año.

“En el siguiente año, en el período de ejecución del 29 de mayo de 2012 al 20 de noviembre de 2012, cuando Felipe Calderón todavía era titular del Ejecutivo federal, la misma dependencia realizó otro contrato de 2 millones de dólares estadounidenses (en ese entonces, aproximadamente, 26 millones de pesos mexicanos) para que la Marca México estuviera presente en el equipo Sauber Motorspot Ag, durante la temporada del Campeonato Mundial de Fórmula 1″.

Como vemos las canonjías y jugosos contratos que dio el esposo de Margarita Zavala a empresas trasnacionales a costa del erario federal, le abrieron las puertas al exmandatario para tener muy buenas chambas y poder asistir a todo lujo a espectáculos deportivos internacionales.