Se volvió tendencia contratar personas mayores de edad encargadas de la seguridad privada en las principales ciudades de México, de ambos géneros, incluyendo, obviamente, a la Ciudad de México, y esto ha causado diversas aristas que deberían analizarse.

En primer lugar, reconocer que una gran mayoría de las personas que actualmente trabajan en seguridad privada, son ciudadanos sin previa preparación policiaca o militar, y aunque reciben cursos intensivos para pertenecer a dichas corporaciones, se genera una desventaja en cuanto al manejo de reglas y situaciones que requieren de preparación policiaca y/o miliar completa.

En segundo lugar, vemos, en muchos edificios, casas, y empresas particulares, personas de seguridad portando armas largas tipo ametralladoras, lo cual seguramente es bajo restricción gubernamental oficiosa, pero esto genera ostentación de los lugares que protegen, y de alguna manera, incertidumbre sobre los bienes de dicha protección.

En tercer lugar, las guardias laborales que tienen que realizar las personas que trabajan en seguridad privada generalmente son de 24 por 24 horas, es decir, un día completo se quedan cuidando y descansan al siguiente, diariamente, lo cual es verdadera y humanamente agotador, deberíamos proponer ya que dichas guardias sean de cada tercer día, es decir, trabajan un día completo, 2 días por 8 horas laborables, y así sucesivamente.

En cuarto lugar, varias dependencias del gobierno, incluyendo oficinas institucionales y hospitales, han contratado a estas compañías de seguridad privada, lo que genera, por un lado, confusión y desorientación por no estar preparados para dicha función, al no son servidores públicos y no conocer los fundamentos legales y organizacionales de dichas instituciones, y por otro lado, están ocupando lugares laborales que deberían ocupar miembros de la Guardia Nacional, incluso cuando ésta sea parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).

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Por todas estas aristas, en conclusión, al presente análisis, podríamos ir planteando que las compañías de seguridad privada se alíen de alguna manera con el Gobierno Federal para mejorar las condiciones de todas las personas que trabajan en ellas, mejorar su preparación, sus sueldos, prestaciones y jubilaciones, y, en general, apoyar a que en México exista un mucho mejor nivel de seguridad pública, social y privada.

Nota agregada: recomiendo la lectura sobre la Guardia Nacional publicada en el presente portal SDP Noticias, con fecha: enero 10, 2019.