“Gobierno o individuo que entrega los recursos naturales a empresas extranjeras, traiciona a la Patria.”
General Lázaro Cárdenas del Río
La pregunta que nos debemos hacer todos los que pensamos y que analizamos la vida actual, y a la Humanidad, es:
¿Por qué otras ciudades del mundo, sobre todo de países de primer mundo, y de los Estados Unidos, principalmente, no sufren la contaminación que vivimos en la Ciudad de México y zonas conurbadas del Estado de México, incluyendo la que generó contingencia ambiental el pasado 13 de Noviembre, a pesar de que dichas ciudades de países desarrollados pueden estar a la misma altura que la Ciudad de México, estar rodeadas de montañas similares a las del Valle de México conocido también como del Anáhuac, de que circulan los mismos automóviles y camiones en todas las ciudades independientemente del país que se trate, incluso de las mismas marcas o muy similares, y que las calles y avenidas tienen las mismas características de pavimentación y circulación en todos los lugares citados?
La respuesta más racional, intelectual, y coherente al presente planteamiento, es, porque en las ciudades de los países desarrollados o de primer mundo los automóviles y camiones utilizan gasolinas de mucho mejor calidad de las que se venden y comercializan en México, y que las gasolinas disponibles en México, obviamente de menor calidad, valga la redundancia, por el mismo proceso de combustión de los automóviles y de los camiones que circulan acá, generan más partículas contaminantes al medio ambiente, y por eso precisamente surge la necesidad de imponer medidas de control ambiental, como son las contingencias.
Y lo que corroboraría más la presente teoría sobre el uso de gasolinas de mayor calidad en el extranjero y de menor en México, es el análisis de que en las ciudades mencionadas de los países desarrollados y de los Estados Unidos, al visitarlas, no se ven en los caminos y en las carreteras automóviles y camiones contaminando como lo hacen en México, en esos países no verifican de emisión de gases contaminantes a los automóviles cada 6 meses como se tiene que hacer por obligación con los automóviles y camiones con placas de la Ciudad de México y área conurbada, o con los que van a visitar ésta Ciudad de México, y no se decretan, en dichas ciudades del extranjero, días de contingencia ambiental.
Por eso resulta inconcebible, desde un punto de vista de Macroeconomía y Geopolítica, que en México, y siendo uno de los principales países productores de petróleo crudo, no se puedan conseguir gasolinas de primera calidad como las que se comercializan en los países de primer mundo que compran el crudo mexicano.
Por eso también el sueño de las refinerías en México que produzcan gasolinas de alta calidad para consumo local, incluyendo las de 2 Bocas, es tan importante, y más, porque lo soñó el mismo general que expropió el petróleo para beneficio de México: el General Lázaro Cárdenas del Río desde que era joven y vivió física y emocionalmente la Revolución Mexicana.
Alberto Halabe en Twitter: @cancercuretop2