Creo que las vocerías de las candidatas para la presidencia de México han sido un verdadero fracaso. Y pienso que la función de un vocero para un candidato presidencial es de suma relevancia, es fundamental.
Pero Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum respectivamente han elegido muy mal a sus voceros. No les aportan nada, no brindan una imagen positiva de sus candidatos ni de ellos mismos tampoco. También salen perjudicados.
Xóchitl Gálvez eligió mal al escoger a Santiago Creel como su vocero. Es que ni habla ni dice nada. Santiago Creel me parece un hombre bueno, un buen político también, pero muy serio y un poco aburrido. Y pienso que debería de ser, como vocero que es, un hombre más dinámico, que transmita emociones, que literalmente sea un buen promotor de Xóchitl Gálvez, que anime al electorado, no que lo duerma.
Pero no. Es gris, es silencioso e incluso parece que está alejado física y emocionalmente de Xóchitl en lugar de percibirse cercano.
Por eso es que creo que discreta y sutilmente le dieron las gracias a Santiago y colocaron en su lugar a Lorenzo Córdova y creo que fue muy buena elección. Al final y a través de los años, este adquirió fuerza y credibilidad en la ciudadanía. Tiene carácter y saber ser un buen orador. Por eso es que creo que los morenistas andan muy enojados con esta decisión, porque saben que es exitosa la elección pero lo atacan diciendo que entonces es verdad que Lorenzo Córdova como funcionario del INE siempre a estuvo a favor de la alianza PAN-PRI-PRD.
Él, por supuesto, ha salido a negar tal cosa y ha dicho que va adelante como un ciudadano más. La duda queda para muchos, pero de que era necesario desplazar a Santiago Creel, lo era.
Por su parte Claudia Sheinbaum tampoco da una con su vocería. Haber elegido a Fernández Noroña fue la peor elección. Me queda duda si esto fue decisión de López Obrador o de Claudia Sheinbaum. Porque AMLO siempre se ha distinguido por gritar, manotear, llegar a ser agresivo y lanzar ofensas al por mayor, cosa que también le sale muy bien a Noroña, pero no le ayuda en nada a la morenista este modo de ser, por lo que al verse rebasados y ante la incapacidad de Noroña para poder ser un vocero que aportara cosas positivas para la precampaña y no que estorbara, como lo había venido haciendo, entonces de igual manera y sin que nadie se diera cuenta, de pronto eligieron a Tatiana Clouthier para que fuera la vocera.
La imaginaron, creo yo, más mesurada, más educada por llamarlo así, más cordial, una imagen menos incendiaria.
Pero les salió muy mal porque hace unos días se hizo viral una entrevista que le hizo Fernando del Collado a Tatiana Clouthier en su programa “Tragaluz”, en la que se le notó incómoda, molesta, ansiosa, y no supo cómo ni qué responder, ante el bombardeo de cuestionamientos solo se limitó a decir, llena de nervios, que no sabía nada: “no sé… no sé… no sé”. Por supuesto fue el hazme reír de las redes sociales.
Pero luego quisieron seguramente componerle y la pusieron a subir un video a su cuenta en X en donde leyendo, atacó a Xóchitl Gálvez con respecto a que ésta solicitó tener un debate con ella. Salió igual de increíble e irrisorio porque quizá se le fue, pero en lugar de pronunciar “nadie” dijo “nadien” además de que todo mundo nos dimos cuenta que estaba leyendo lo que iba a decir por lo que ahí ya sin nadie que la cuestionara, se encontraba fortalecida y envalentonada.
Entonces, también resultó ser un fracaso.
Yo diría que la única persona de Morena que podría funcionar como vocero es Omar García Harfuch. Pienso que tiene la calidez (por llamarlo así), la caballerosidad y la clase para poder ser la voz de Claudia pero de una manera que le funcione a la candidata. Sin manoteos, sin gritos, sin llegar a ser agresivo.
Pienso que ya no funciona ser agresivo. Llevamos 6 años de vivir en el mismo tenor y estamos muy hartos.
Voltearemos a ver a quién no nos ofrezca gritos ni violencia en sus palabras. Creo que verdaderamente los mexicanos hoy como nunca buscamos la paz.
Después de vivir en una pandemia, de haber perdido personas amadas y empleos, de encontrarnos confundidos y lastimados emocionalmente, lo que menos queremos son porristas que griten y enloquezcan al tratar de defender a sus candidatos. Estamos hartos del fanatismo barato.
Pero más allá de la importancia de los voceros que de cada lado no han dado una, resulta importante ver cómo frente a frente se comportarán ambas candidatas. Ahí se medirá el carácter y de qué están hechas.
Claudia dice que es una provocación el que Xóchitl quiera un debate. Me parece que no. Lo grave es que ella lo tome así.
Pero tarde que temprano se tendrá que dar ese debate, en sus tiempos y formas o quizá no, porque López Obrador ya nos queda claro se está saltando todos los lineamientos del INE. Es algo que prácticamente ya no le importa. No, desde que Guadalupe Taddei lo dirige.
Veremos qué pasa. Nosotros tenemos que estar escuchando con atención, viendo con atención, poniendo en general toda nuestra atención para que finalmente tomemos la mejor decisión, la decisión que radica en la ciudadanía.
O al menos eso espero.
Es cuanto.