El pasado 25 de septiembre, la titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) Luisa María Alcalde Luján se reunió con la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Ciudad de México, y por ello hablaremos de la legitimación de los contratos, específicamente de la industria aeronáutica.
De acuerdo con la página centrolaboral.gob.mx la legitimación de un Contrato Colectivo de Trabajo garantiza el conocimiento de su contenido por parte de los trabajadores y la opción para ellos, de avalar o rechazar los contratos a través del voto personal, libre, directo y secreto; un procedimiento en el que deberá garantizarse la aplicación de los principios de eficiencia, austeridad, legalidad, seguridad, transparencia, máxima publicidad, confiabilidad, certeza y, en caso de duda, prevalecerá la interpretación más favorable al trabajador.
En pocas palabras, se trata de una medida implementada por este gobierno para combatir las prácticas de los líderes charros y sempiternos del histórico sindicalismo mexicano. Sin embargo, en los hechos, se ha generado un fenómeno digno de ser desmenuzado.
Y es que ante una medida como esta, sería muy fácil imaginar precisamente a los sindicatos charros y líderes sempiternos haciendo oídos sordos a las peticiones que realice la autoridad laboral. Sin embargo, resulta que los sindicatos blancos de la aviación, de manera podríamos decir “mágica” han sido los primeros en legitimar sus contratos colectivos ante la STPS.
Algo verdaderamente impresionante. Me llama la atención que precisamente estos sindicatos de corte de protección patronal, no hayan dudado ni un minuto en llevar a cabo dicha legitimación. Ya la llevó a cabo el Sindicato de Trabajadores de la Industria Aeronáutica (STIA), con la familia Romo al frente, tiene varios contratos con personal de tierra y vuelo de Volaris, Aeroméxico Connect y VivaAerobus.
Así como también los sindicatos de tierra Sindicato Nacional de Trabajadores de Transportes, Transformación, Aviación, Servicios y Similares (SNTTTASS) que aglutina a los trabajadores de Mexicana MRO. También el Sindicato Independencia a cargo de Tomás de Toro y cuyos agremiados laboran para la troncal del Aeroméxico.
En el caso del sindicato de pilotos, la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA), de los cinco contratos colectivos que detentan, tres de ellos ya fueron legitimados: Aeroméxico, Aerolitoral y Aeromar.
En cambio en mi sindicato, la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), ni uno de los cuatro contratos colectivos que tiene hoy vigentes se han legitimado, y eso que el papá de Luisa, el abogado Arturo Alcalde Justiniani, es el asesor legal del gremio.
En la reunión entre la STPS y la Coparmex de la Ciudad de México, la titular de la dependencia federal resaltó que se pretende que con la legitimación de los contratos colectivos se pueda proteger la libertad y la democracia al interior de los sindicatos, apostándole a una negociación colectiva auténtica.
Señaló que los sindicatos tienen como fecha límite hasta el próximo 1ro de mayo del 2023; en el caso de no poder o no llevar a cabo el proceso de legitimación, el sindicato perderá la representación de dicho contrato colectivo y se pasará a una relación individual y no colectiva con el empleador.
Pongo este tema en la mesa para su discusión y análisis porque el día de ayer me compartieron una comunicación interna de los pilotos de Aerovías Caribe, mejor conocida como “Click”, que era una de las filiales de Mexicana de Aviación.
Dicha publicación me aclara una duda que anteriormente expuse a mis compañeros en mi blog personal, en la que cuestionaba si los sobrecargos de Mexicana de Aviación y de Click estamos obligados a legitimar nuestros contratos colectivos, dada la situación jurídica sui generis que guardan ambas empresas, y la respuesta es “sí”.
Reproduzco parte del comunicado de la delegación de Aerovías Caribe (Click):
“De igual forma se tocó el tema de la legitimación laboral, misma que es de suma importancia para todos nosotros en ASPA, ya que se tiene que efectuar antes del mes de mayo del 2023 y de no hacerlo, ASPA perdería la representación de nuestros contratos colectivos, por lo que seguiremos insistiendo en su cooperación para saber con cuantos de ustedes contamos, ya que para poder legitimar el contrato se necesita que vote el 50% + 1 de la planta.
Es importante recalcar que esta votación es presencial y es la STPS la que designa los días y horarios para efectuarla, ya que estarán presentes interventores de ésta vigilando el proceso; estamos explorando con los abogados laborales si existe alguna posibilidad de hacerlo de una forma diferente por la condición tan especial en la que nos encontramos.
Por lo anterior, para los compañeros que a la fecha no han dado respuesta a esta solicitud, les proporcionamos nuevamente los correos a donde deberán enviar su confirmación de participación en caso de ser necesario la legitimación.”
Comunicado de la delegación de Aerovías Caribe
Los sobrecargos de Mexicana de Aviación y de Click, a diferencia de los pilotos agremiados a ASPA, carecemos de información oficial por parte de nuestro sindicato; nuestro “delegado” ni siquiera se presenta a laborar, pues al ser sobrino de Alejandra Barrales, se siente protegido por el secretario general de la ASSA, Ricardo Del Valle Solares, ahijado político de Alejandra Barrales.
La legitimación de estos dos contratos colectivos (Mexicana y Click) es un tema que se debe debatir, y más cuando muchos de mis compañeros están viviendo en el extranjero, en lugares como España, Noruega, Suiza, Vietnam, Estados Unidos, Canadá, República Checa, Nicaragua -por nombrar algunos lugares-, y muchos otros que hoy se encuentran en el país, prestando sus servicios para Aeroméxico.
En dicha reunión Luisa Alcalde expresó:
“Los sindicatos deberían aprovechar esta oportunidad porque una vez concluido el proceso de legitimación, llegado el próximo año y vencido el plazo, habrá muchos contratos que se den por concluidos”.
Luisa María Alcalde
Según la propia STPS, del medio millón de Contratos Colectivos que existen, estiman que sólo alrededor de 20 mil se legitimarán, lo que representa, un bajísimo porcentaje, cerca del 5%, y eso señores, es lavarle la cara a la propia Reforma Laboral del 2019.
¿Qué está haciendo ASSA al respecto?, un cuerpo gremial que se jacta de ser un sindicato democrático. Honestamente, ese carácter lo perdió en 2011, con la llegada de Ricardo Del Valle, quien va por su quinto periodo al frente del sindicato.
Ni siquiera ha legitimado los Contratos Colectivos con las dos aerolíneas que mantienen operaciones: Aeroméxico y Aeromar. Sabemos de sobra que a la cabeza de ASSA no le importa el tema de Mexicana de Aviación, en el que van incluidas las sobrecargos de Click. y que le urge deshacerse de nosotros pues considera que somos un lastre.
Pero en el caso de Aeroméxico y Aeromar, ¿Cuál es el pretexto? Ricardo está confiado en que Arturo Alcalde mueva los hilos y se legitime el CCT ante su hija Luisa, sin llevar todo el proceso que mandata la propia Reforma del 2019. De esta manera el líder de la ASSA lo ha venido haciendo, con las ilegales reformas al estatuto, a nuestra ley interna, pidiendo que con voto a mano alzada, consiga seguir al frente del sindicato.
Se los he venido comentado, toda la aviación está entrelazada, y con esto podemos percatarnos que no se está llevando a cabo una muy necesaria transformación para el país, sino una simulación, por lo menos en materia laboral y en la industria de la aviación.
¿Cómo podemos pasar del discurso al hecho? No permitiendo que se simule la democracia sindical, dejando de encubrir a los líderes corruptos. El caso de Ricardo Del Valle, quien tiene dos procesos ante la STPS por violar el estatuto y reelegirse de manera ilegal, duerme el sueño de los justos gracias a Luisa Alcalde y a su papá, quien lleva la defensa de Ricardo ante dicha dependencia.
Diría López Portillo: “el orgullo de mi nepotismo”, frase al parecer incrustada en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, dejando en el total desamparo a los trabajadores, al pueblo, a la clase obrera ávida de justicia laboral.
Yo pregunto seriamente: ¿Qué evaluación puede darse a este ejercicio de legitimación de CCT? Por supuesto que aplaudo que se combata al charrismo y al sindicalismo blanco, pero si en los hechos, solo lo hará el 5%, y de ellos los primeros en hacerlo fueron los sindicatos patronales, creo que la mejor definición la resume un dicho popular: “es atole con el dedo”.