Los zoológicos de Chapultepec, Aragón y Los Coyotes se han convertido en espacios desolados, donde las especies que los habitan carecen alimentación adecuada y de atención médica zootecnista, ello ha llevado a que durante la administración de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum, hayan muerto al menos 1,318 ejemplares.

Cuando Manuel Camacho Solís, fue regente de la Ciudad de México, se propuso rescatar importantes espacios públicos como el Auditorio Nacional, la Feria y el Zoológico de Chapultepec, este último incluso llegó a ser algo más que una atracción, fue un lugar que albergó y dio esperanza a diversas especies en peligro de extinción como los osos panda.

Sin embargo, hoy se van destruyendo las bases que se crearon desde las épocas de Camacho Solís.

La tijera cuatroteísta

Los recortes a los presupuestos que el gobierno morenista impone a todo lo que no consideren “prioritario” han afectado directamente a los Zoológicos. El presupuesto destinado a estos espacios en 2019 fue de 212 millones 206 mil 422 de pesos y para 2020 y 2021 lo han ido reduciendo hasta dejarlo en tan solo 57 millones 259 mil 904 pesos. Un recorte sin precedentes en la historia de estos recintos y que afecta directamente a su funcionamiento.

Entre las áreas de los zoológicos donde se detectaron más recortes, de manera terrible destaca el de los alimentos para los animales. En el 2019 se destinaban poco más de 40 millones de pesos para cumplir con sus dietas, pero en 2020, mientras los alimentos subían de precio como consecuencia de la pandemia del Covid-19, se sufrió un primer recorte de 2.1 millones de pesos y para 2021 se aplicó una nueva reducción de 1.8 millones.

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Al escasear la alimentación adecuada, crecieron las denuncias porque algunos animales se encontraban en evidente mal estado y con desnutrición avanzada y animales muy queridos, como Toto, el último orangután del Zoológico de Chapultepec, murieron por falta de la atención adecuada.

Irresponsable abandono

Quién no recuerda a los osos Panda, Pepe y Tohuí, que se procrearon en cautiverio en el Zoológico de Chapultepec y, en su momento, representaron una gran esperanza para esa especie en peligro de extinción. Actualmente el Zoológico ya no representa ninguna esperanza y los animales que aún sobreviven, sin exagerar, lo hacen en lo que parece un campo abandonado.

Por otro lado, en el Zoológico de Aragón, se han presentado denuncias por la práctica de dar a los animales alimentos en descomposición y de dudosa procedencia.

Cinismo

Ante la evidencia de la deplorable situación de estos espacios, la mismísima Claudia Sheinbaum tuvo que reconocer que fue un problema en el diseño del presupuesto lo que afectó los recursos que reciben los zoológicos de la ciudad para la alimentación de los ejemplares.

Al comparecer ante diputados en el marco de la glosa por el cuarto informe de Claudia Sheinbaum, Luz Elena González, secretaria de finanzas, admitió que fue por un “error” que se asignaron menos recursos para el mantenimiento y conservación de los zoológicos en 2022.

Por su parte, la panista Ana Villagrán, integrante de la comisión de Bienestar Animal, consideró “grave” que se haya pasado por alto un tema tan delicado como la asignación presupuestal para los animales en cautiverio.

Sin embargo, tal como lo hace AMLO con su aplanadora morenista que aprueba iniciativas por mandato y sin ni siquiera leerlas, en la Asamblea Legislativa hacen lo que diga la señora regenta y los legisladores de Morena, PVEM y PT no advirtieron el intencional “error”.

Los zoológicos de la CDMX son el vivo reflejo de la irresponsabilidad de un gobierno al que solo le interesa su ambición de poder o de partidos como el PVEM, capaces de hacer toda una faramalla por las corridas de toros, pero que en temas sustantivos como el mantenimiento y la alimentación de los animales que viven en cautiverio, sumisos se alinean a Morena.

Twitter: @diaz_manuel