“With great power comes great responsibility”

Ben Parker, tío del Hombre Araña

Un grupo pequeño de argentinos se ha vuelto loco en redes y piensan que cualquier comentario que critique la actitud de cualquier integrante de la Selección de futbol es un ataque contra la nación.

Los Caligaris y el Dibu

Emiliano DibuMartínez es uno de los causantes de este desmán por lo que hizo en la premiación y por algunas cosas que ha hecho durante las celebraciones del título de Argentina.

El fenómeno de las barras argentinas es algo que hemos visto desde hace mucho. Si hay un elemento polarizante en el futbol, ahí hay una gran causa. Una buena cantidad de los “cantitos” denostan al rival en lugar de enaltecer al equipo que apoyan. Yo soy del Boca y tu del River, te mande a segunda y tonterías así que le dan folclor a la tribuna pero que también han llenado de sangre de aficionados las calles aledañas a los estadios. Esta en la cultura del futbol argentino decir que los que no le van al equipo son una piltrafa.

La piel de algunos aficionados argentinos es muy delgadita y ahora no se puede hablar nada de ellos, eso es lo que le paso a Federico Zapata, trombonista de los Caligaris, que en México son muy famosos curiosamente por el futbol.

Zapata se le lanzó a la yugular a Paco Villa, comentarista de TUDN cuando publicó el siguiente tweet:

Las columnas más leídas de hoy

Esto fue lo que contestó Zapata:

Federico Zapata, trombonista de los Caligaris

Aunque se disculpó, las redes no olvidan y unas 10 horas después de la publicación los Caligaris anunciaron la desvinculación de Zapata del grupo y cerraron con “México es patria y cada mexicano, un hermano. Si tocan a México, nos tocan a nosotros.”

Mucho le costó a Zapata “defender” al Dibu Martínez que seguramente ni lo hace en el mundo.

Martínez ya desprecio un sombrero de charro que ingenuamente le quiso regalar al equipo un aficionado mexicano. Insulto y dijo un montón de cosas en contra de una afición que quiere a Argentina por Messi y quizá por nadie más.

Si Messi es la unión de Argentina con los aficionados al futbol, Martínez es lo contrario.

Franco Escamilla

En entrevista con Adela Micha, le preguntaron a Franco Escamilla sobre la razón por la cual no hacia chistes sobre el presidente, el respondió lo siguiente:

“No soy de comedia de política aparte la gente -y menos en este sexenio eh- te juro que es el presidente más defendido de la historia… si tú te metes con el actual presidente te llueve hate en las redes y dices ¿para qué?”.

En un trabajo como el de Franco Escamilla donde se necesita tener popularidad en la mayoría de los círculos posibles, el eligió no meterse con el Presidente pues ya sabe la oleada de “hate” que le puede caer en las redes sociales. Se puede decir que lo de él es la neutralidad y lo ha manejado de buena manera.

Los periodistas de México

Leo en la columna del 21 de diciembre de Don Federico Arreola que 180 periodistas firmaron una carta donde le piden a AMLO que no pueda expresarse con las siguientes líneas:

“De no autocontrolarse el presidente López Obrador en sus impulsos de ira hacia periodistas críticos, el país entrará en una etapa aún más sangrienta que ya han experimentado otros países latinoamericanos: asesinar periodistas para desestabilizar al gobierno, o matar en pago de favores al gobierno”.

No conozco la relación de estos periodistas con personas contrarias a López Obrador, lo explica mucho mejor Don Federico. Si saber esto, lo que sí creo que con esta declaración pueden tener más hate de los seguidores de López Obrador por que le están pidiendo al Presidente que no hable de ellos cuando ellos hablan del presidente casi por deporte. Entiendo la crítica objetiva, pero meterte con el presidente en cada cosa que hace, a veces sin sentido, llega a ser hasta cansado. He visto criticas objetivas y respetables, pero eso de meterse hasta con los zapatos que usa es solo buscar cosas por las cuales criticar.

La intersección de las 3 historias

Expresar opiniones sin reflexionar sobre el impacto que tendrán en el público, aunque sea o no el objetivo, puede traer reacciones que en ocasiones no son las esperadas. Todos tenemos la libertad de expresarnos como lo consideremos necesario sabiendo que lo que decimos puede traer una oleada de reacciones.

Las opiniones incendiarias de cualquier lado de la ecuación pueden traer reacciones que no son las esperadas por nadie. Ya ven lo que le paso a Zapata de los Caligaris cuando hizo un comentario con pura calentura sobre México. Así pasa cuando opina cualquier otra persona, periodista, monero o el Presidente.

No puedes prohibir la libertad de expresión pero en este juego todos tienen que hablar con mesura y saber las posibles reacciones de los demás.

Dicen en una de las películas del Hombre Araña, “Con un gran poder, viene una gran responsabilidad”, hay que expresarse pero tener idea de lo que puede pasar con lo que se dice.

Por eso creo que en esto hay que ser más como Franco Escamilla que ha medido que decir y como decirlo.