Desde la perspectiva de la encuestadora local de SDP Noticias —MetricsMx— la presidenta constitucional de México, que ha trascendido a nivel mundial, mantiene niveles muy altos de aprobación. Sobra decirlo que, como tal, SDP ha forjado un precedente importante en los estudios de evaluación que miden el pulso de la población en temas relacionados con la confianza de los servidores públicos. Hace unos meses, recuerdo, fue, sino es que la más precisa, una de las tres más exactas para anticipar el triunfo de Sheinbaum, y los demás gobernadores que, hace poco, han tomado protesta. En definitiva, eso se logra siendo responsable en la aplicación de un modelo estadístico que, en concreto, ha resultado eficiente, al grado de ganarse el reconocimiento de instituciones importantes.
El punto es que, en este nuevo periodo, MetricsMx ha dado seguimiento a la labor que realiza Claudia Sheinbaum. La evaluación, de hecho, se hace de forma periódica para ir haciendo un comparativo del trabajo. Es, para ser más precisos, una revisión minuciosa de las labores de la presidenta constitucional en rubros sustanciales de sus políticas públicas. En promedio, la ponderación de la jefa de Estado, sin exagerar, no ha bajado del 74%; es decir, es potencialmente alto considerando el arranque de sus quehaceres. Ella, con su propio estilo, se ha convertido en un fenómeno social; su poder político, para los asuntos nacionales e internacionales, tiene repercusiones positivas. La misma revista Forbes, que estimó una lista larga de mujeres importantes del mundo, calificó su imagen como la cuarta más poderosa a nivel global. Eso solo es posible cuando la confianza de la población civil continúa inclinando la balanza a su favor y, de paso, le entrega el cariño sin condiciones.
SDP Noticias, a nivel nacional, hizo un ejercicio similar que a diario pone en práctica; midió el grado de confianza de Claudia Sheinbaum a lo largo y ancho de México. En sí, todo el territorio, sin excepción alguna, está convencido del trabajo que está llevando a cabo la presidenta, y de los alcances que se pueden llegar a concretar en obra e infraestructura. Me llamaron la atención dos epicentros claves de Morena que, como tal, fueron punta de lanza en la elección presidencial. Lo de Michoacán, por ejemplo, viene siendo una constante porque se ha hecho una chamba conjunta con el gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla. Él, por cierto, está en el ranking de los diez mejores gobernadores calificados por su labor al frente de la administración. Sucede lo mismo en ambos casos; es decir, el 81% de los michoacanos aprueba la gestión de la jefa de Estado. Es, en definitiva, una base social muy significativa que, para las elecciones intermedias del 2027, pone como gran favorito a la coalición Seguimos Haciendo Historia.
Otro ejemplo claro, que por cierto está enfrentando un reto fundamental en la pacificación del territorio, es el estado de Chiapas. Sin ir más lejos, Claudia Sheinbaum, desde los tiempos de campaña, ha sido la entidad que más ha visitado. Ella, en conjunto con Eduardo Ramírez, han dicho que movilizarán una cantidad importante de recursos para que el sur del país siga trascendiendo. La muestra más clara fue la puesta en marcha y operación del Tren Maya: una de las obras de mayor impacto en las últimas décadas. De hecho, Ramírez, con ese respaldo abrumador que recibió en las urnas, aprovechará al máximo la ayuda de la federación. Eso se hizo posible, recordemos, con el proyecto que aterrizará de la primera Universidad Rosario Castellanos en Chiapas. Eso, como tal, le tocará darle seguimiento al nuevo titular de la Secretaría de Educación en el Estado, Roger Mandujano. Diría que, para esa trinchera, Mandujano encajó perfectamente en esa misión de convertir los espacios de enseñanza y aprendizaje en terrenos de calidad.
En concreto, la encuesta que publicó SDP Noticias a nivel nacional, muestra el respaldo abrumador a favor de la presidenta constitucional. El peso de sus decisiones, al igual que lo hizo el de Andrés Manuel López Obrador, son potencialmente fuertes, máxime cuando las políticas públicas avanzan a pasos agigantados con el primer tramo de reformas constitucionales. Conforme pasen los meses, en efecto, se irán materializando más y más ajustes a la carta magna. Uno de ellos, aunque la oposición se empeñe en mentir, es el proyecto de INFONAVIT, que ha planteado un cambio profundo para bien de la clase trabajadora de México.
Y Sheinbaum, a casi tres meses de tomar protesta como presidenta de México, acapara no solamente la atención de todo el país, sino los reflectores del mundo entero. En todos los casos, su aprobación y sus niveles que ha mantenido, además de legitimar sus acciones, la ponen en la cima de un universo sociopolítico que, desde luego, jamás alcanzó la oposición en décadas. Eso será suficiente, lo dijimos, para que Morena, que está en pleno apogeo, gane las 15 gubernaturas que se disputarán en 2027. Supongo que la derecha estará evaluando el impacto del tsunami que se avecina; es decir, el PRIAN continuará perdiendo terreno que, a la postre, les traerá costos políticos más altos. Sin importar si hacen alianzas o no, el lopezobradorismo arrasará en las urnas.
La lectura es muy clara: el abrumador respaldo que recibe Claudia Sheinbaum, en sí, constituye una base sólida de militantes, simpatizantes y población en general que, como tal, están atestiguando la construcción del segundo piso de la Cuarta Transformación.