En casa cuando algo no cuadra, no es lógico o de plano es contradictorio, solemos decir: “no checa el audio con el video” y eso es justamente lo que está ocurriendo con la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. ¿Con qué cara, Andrés Manuel, se puede hablar de una Cuarta Transformación, de acabar con la corrupción, y sostener que ya no es lo mismo de antes, si la STPS de tu gobierno está metiendo las manos en favor del actual líder de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA)?
De hecho, sigo sin salir de mi asombro, pues en todas las redes sociales de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social fue publicado un video sobre el tema de la Reforma Laboral, que lleva por nombre “En la #NuevaRealidadLaboral eliges las condiciones de tu contrato colectivo de trabajo mediante el voto personal, libre, directo y secreto.”
Hasta aquí todo bien, pues la Secretaría está promoviendo la Legitimación de los Contratos Colectivos, y eso no nos debe de extrañar; sin embargo, lo que a mí me ha puesto los pelos de punta es el personaje que habla en el video. Lo hace Ricardo Del Valle Solares, actual Secretario General de la ASSA. Esto no sería motivo de encono, pero sucede en pleno proceso electoral de mi sindicato (ASSA), justamente en la etapa de proselitismo o campañas, como gusten llamarlas.
Ricardo Del Valle es candidato, y busca llegar a su quinta gestión consecutiva, es decir, de lograrlo sería su cuarta reelección, pues desde agosto del 2011 está al frente del sindicato de sobrecargos. En varias ocasiones les he comentado que Arturo Alcalde Justiniani es el asesor legal del sindicato, y de hecho, él es el encargado de revisar todo el expediente que se integra para solicitar la Toma de Nota a la Secretaría del Trabajo, donde despacha su hija.
Así que por más vueltas que le doy, no le encuentro la cuadratura al círculo. La dependencia federal publica un video dándole reflectores a un candidato en plena campaña. Por supuesto, Ricardo y su gente ya lo está utilizado para hacer proselitismo a su favor, dejando un mensaje -nada velado por cierto- de que cuenta con el respaldo total del Gobierno Federal, a través de Luisa Alcalde.
Esto coloca a la compañera Ada Salazar -la otra candidata a la Secretaría General- en una franca desventaja. El piso “no está parejo” y se está favoreciendo a Ricardo Del Valle desde el poder ejecutivo.
No es un asunto menor, o que no nos deba de importar, ¿Cómo pretendemos que el país cambie si seguimos haciendo lo mismo que el más rancio priísmo? Por eso en diferentes foros he señalado lo preocupante que es la simulación, pues deja abiertas puertas muy grandes para que ese prianismo que tratamos de dejar atrás regrese con más fuerza, porque no se han hecho cambios de raíz. ¿Creen que exagero? Les recuerdo que apenas hace 4 años Del Valle Solares estuvo haciendo campaña a favor de los candidatos de la Alianza del PAN-PRD-MC, es decir por Ricardo Anaya y Alejandra Barrales.
Apenas el pasado 21 abril Andrés Manuel habló de “rebelarse contra los líderes charros” diciendo: “…los trabajadores son libres y tienen que ejercer su libertad, la libertad no se implora, se conquista, porque pueden haber las condiciones, que las hay, nuevas para que el voto sea secreto, para que no compren el voto, para que no haya amenazas. Pero si el trabajador no se atreve, no tiene la arrogancia de sentirse libre, pues va a seguir apoyando a los líderes antidemocráticos, líderes charros. Entonces depende mucho de los trabajadores”.
Entonces, hago uso de tus palabras Andrés Manuel, y en mi infinita arrogancia, con la que me siento libre, denuncio públicamente a Luisa María Alcalde Luján de meter la manos en el proceso electoral de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación, en favor un cliente de su padre: el actual Secretario General Ricardo Del Valle Solares, que lleva en ese mismo cargo once años, y quiere ir por tres años más.
Presidente de la Nación, usando mi libertad -esa que no se implora- denuncio que el actual Secretario General de ASSA está utilizando perfiles falsos -sobre todo en la red social Facebook-, y no ha tenido empacho en utilizar una fotografía de tu menor hijo para comparar su fisonomía con la de una compañera que Ricardo considera es “una desagradecida” por no apoyarlo en estas elecciones. Sí, está desesperado, a tal grado que ha comprado una granja de bots para que le dé más vistas y tráfico a sus publicaciones, e imponga una narrativa, falsa, de que el gremio de sobrecargos “clama” por qué se quede otros tres años más.
El pasado 2 de octubre se llevó a cabo una Asamblea sindical para cubrir el formalismo legaloide (y muy debatible, jurídicamente hablando) que le permitirá al señor Del Valle ser candidato por quinta ocasión a la Secretaría General. Hay que decirlo, hubo un sinfín de irregularidades en dicha asamblea, comenzando porque no se llevó a cabo en el auditorio de la sede sindical de ASSA, sino en el auditorio del STUNAM, pues el hijo de Agustín Rodríguez, quien fuera Secretario por muchos años de ese sindicato, es el flamante Secretario de Relaciones de ASSA, y su hermano es Secretario de Finanzas del STUNAM, así que dicho auditorio se lo “prestan”… o como les gusta decirlo a ellos: es una muestra del apoyo entre organizaciones sindicales “hermanas”. Sí, el chiste se cuenta solo.
En la convocatoria para dicha asamblea, jamás se estableció en su orden del día un “horario de votación”; la hora para abrir la asamblea fueron las 12:00 del día, la primera convocatoria y 12:15 la segunda, un procedimiento normal. Sin embargo Ricardo Del Valle, con apoyo de los trabajadores del STUNAM, cerraron las puertas a las 13:00 alegando que “no podían votar los compañeros porque no habían llegado a tiempo”. Esto es totalmente falso, los sobrecargos agremiados pueden participar en una asamblea, en cualquier momento.
Jamás puso un “horario de votación”, así que cerrar las puertas fue un acto ilegal, pues impidió que compañeros que venían llegando de vuelo, o como el caso del Presidente de la Comisión de Hacienda, que venía de una consulta médica en el hospital, no tuvieran acceso al recinto, argumentando que “habían llegado tarde”.
Es un hecho, desde 2011 el actual Secretario General ha echado mano de un sinfín de triquiñuelas (casi nunca legales) para mantenerse en el cargo. No es objetivo de esta columna desglosarlas, pero tengo las pruebas de que ha modificado ilegalmente los estatutos para poderse reelegir, celebrado asambleas irregulares, rodeado la sede sindical con granaderos para evitar el acceso de los agremiados, coaccionado el voto, amenazar con despidos y prometer contrataciones a cambio de votos.
Todo esto está debidamente documentado en las diversas demandas encabezadas por Ada Salazar, y hay denuncias en los medios de esta serie de atropellos. Sin embargo, estas acciones legales tienen que ser resueltas por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social. De poco sirve que el trabajador sea libre, ejerza su libertad (no implorada sino conquistada), que se atreva, que tenga la arrogancia de sentirse libre y decida no apoyar a los líderes antidemocráticos y charros si al final del día, la STPS no solamente los solapa, sino que además hace campaña con ellos.
Sin duda Ricardo Del Valle sabe que a lo largo de sus mediocres gestiones ha ido perdiendo el apoyo que alguna vez tuvo. Tan lo sabe que por eso le ha pedido a su abogado y representante legal que haga todo lo posible para que la Secretaría que encabeza su hija sea parte del engranaje corrupto que le permita eternizarse en el poder. Ya sea por acción u omisión, pues estoy segura de que la autoridad laboral hará como que no ve que Del Valle Solares está forzando a los sobrecargos a votar por él para una quinta gestión, bajo amenazas de perder el empleo.
Es claro el espaldarazo que Luisa le está dando en plena campaña electoral, dándole espacio a través de un video que sube la dependencia federal. Por ese simple hecho, la contienda ya es inequitativa, pues Ada Salazar no tendrá esa misma oportunidad.
No se puede decir que el país está cambiando, que se combate la corrupción y la simulación, si al mismo tiempo nos hacemos de la vista gorda ante estos atropellos. Los trabajadores estamos cansados de un discurso que en los hechos no se refleja. Los líderes charros se siguen manteniendo, manoseando impunemente y a su favor los esfuerzos democráticos que buscaba la reforma laboral de 2019. Francamente se convierte en una burla cruel que sean precisamente los líderes charros, como Del Valle, los que salen a decir “estamos muy contentos con la reforma”.
Si queremos creer que la Cuarta Transformación va en serio, es urgente y de vital importancia que la Maestra Luisa María Alcalde Luján “saque las manos” de la campaña de ASSA, y que la autoridad laboral sea imparcial en la próximas elecciones, como marca la ley.