En las elocuentes respuestas o informes que ofrece el compañero presidente Andrés Manuel López Obrador desde su púlpito mañanero, no mencionó, el informe que publicó el pasado martes el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), aunque resulte de gran importancia para saber cómo va con su política social.
El contenido del informe contradice al presidente, quien afirma que las políticas neoliberales llevaron al país a una grave crisis y la pobreza predominó, pero los datos de CONEVAL muestran lo contrario.
Mal diagnóstico
AMLO parte de una premisa falsa, un mal diagnostico o una perversa lógica para justificar sus dichos.
“Frente a las crisis recurrentes, los gobernantes decían (…) que había que contratar más créditos; rescatar a grandes empresas y bancos; convertir deudas privadas de unos pocos en pública; establecer privilegios fiscales; aumentar precios de combustibles y de los servicios públicos; disminuir salarios; despedir a trabajadores y reducir la seguridad social”.
AMLO.
Se olvida de que entre los años de 1970 a 1995 las crisis fueron recurrentes, que cada cambio de sexenio dejaba una severa crisis económica y social. Sin embargo, desde el año 2000, independientemente de quién ganara la presidencia, ya no se presentaron crisis de fin de sexenio ni se aplicaron programas de emergencia económica, como ocurrió con los presidentes Luis Echeverría, José López Portillo, Miguel de la Madrid y Carlos Salinas de Gortari.
A partir del sexenio del presidente Zedillo, la política social tuvo un cambio radical, dejó de estar vinculada a programas electorales y se diseñaron programas de apoyo institucional para las clases de menores ingresos.
A partir de entonces ya no vimos la mano del presidente repartiendo dinero o incentivando apoyos en época electoral como sucedió durante el sexenio de Carlos Salinas con el programa Solidaridad o incluso, como lo pudimos percibir en las pasadas elecciones con los servidores de la nación quienes se aseguraban de que los beneficiarios tuvieran claro de parte de qué persona (y no del Estado Mexicano) venían los apoyos.
Con datos duros el CONEVAL muestra que en los últimos 30 años México registró una disminución en todos los indicadores de carencias sociales estimados a nivel nacional. Ese fue el resultado de las políticas implementadas por los antecesores de AMLO, algo que no tiene nada que ver con su narrativa.
Datos no discursos
De acuerdo con el CONEVAL, los datos muestran una disminución consistente y sostenida en todos los indicadores de carencias sociales en los años 2000, 2010, y 2015, tendencia que se sostuvo en 2020 para casi todos los indicadores, sin embargo, la carencia de acceso a servicios de salud aumentó.
La mayor disminución fue en el porcentaje de población en viviendas con carencia por servicio de drenaje, que pasó de 40.3% a 6%, durante el periodo mencionado. En cuanto a la carencia de acceso al agua entubada, la proporción disminuyó en un 20.4% y el porcentaje de la población en viviendas con carencia por servicio de electricidad bajó 12.5 puntos porcentuales.
En cuanto a educación, el porcentaje de la población con rezago pasó de 26.6 a 17.3%, es decir, un decremento de 9.3 puntos porcentuales.
En temas como la electricidad que tanto cuestiona el presidente, en 1990 el 13.1% de la población carecía de este servicio, pero para 2020, sólo el 0.6%. Es decir, entre 1990 y 2015 logramos (sí, porque el Estado somos todos) prácticamente una cobertura nacional.
Estos son datos duros y comprobables que nada tienen que ver con la narrativa apocalíptica del compañero y camarada presidente.
Retroceso en Salud
El estudio demuestra un severo problema en el sector salud. Es lamentable, porque en ese sector se habían logrado grandes avances. En el 2000 el porcentaje de población con carencia del servicio era del 58.6% y para 2015 bajó a un 16.7%, es decir, mejoró un 41.9%. Sin embargo, para 2020 ya con los cambios en las políticas de salud de AMLO y la 4T, la población con carencia de los servicios de salud incrementó al 21.5% ¡casi 6 millones de mexicanos perdieron el acceso a la salud!
La debacle en el sector se puede explicar, entre otros factores, por el cambio del Seguro Popular al INSABI, el tema de la escasez de medicamentos y la falta de atención a hospitales públicos.
Lo grave es que el cambio radical promovido por la actual administración se ha encargado de destruir lo que se había construido en los pasados 30 años.
Primero los pobres
El CONEVAL informó que para el mes de febrero el cálculo de personas en pobreza es de 70.9 millones, que representan un 56.7% de la población.
Cabe señalar que, en 2018, cuando tomó posesión AMLO, el porcentaje era del 41.9% y que la medición de CONEVAL a este indicador mostraba una tendencia consistente a la baja desde 2008 con un 44.4%.
Campaña tras campaña el camarada presidente se comprometió a gobernar para todos, para ricos y pobres. Pero en lugar de atender las causas de la pobreza y mantener una política social institucional, regresó a políticas sociales electoreras, a dar efectivo a cambio de votos y a alimentar día tras día un debate estéril y polarizante sobre clases medias, “fifís” y “aspiracionistas”, llegando al absurdo de generar rencores hacia quienes tienen un título universitario.
Ha sido AMLO, no la pandemia ni el pasado neoliberal, quien, con absoluta impunidad, convirtió a su gobierno en una maquina generadora de pobreza.