Desde hace décadas, México se había destacado por tener grandes y reconocidos secretarios de Salud que, con sus aportaciones médicas, no solo pusieron en alto el nombre de México, sino que mejoraron sustancialmente la calidad de la atención, medicamentos, servicios hospitalarios y cobertura a la población.
Se puede hablar del legado de reconocidos secretarios de Salud, desde Guillermo Soberón, Jesús Kumate, Juan Ramón de la Fuente, Julio Frenk, Salomón Chertorivski, Mercedes Juan y José Narro, quienes cambiaron por completo el sector salud, extendiendo los servicios y la cobertura hospitalaria, que enfrentaron crisis, enfermedades crónicas y pandemias como la del VHI y la de influenza A(H1N1) y que lograron, en su momento, la adición al artículo cuarto de la Constitución para establecer el Derecho a la Protección de la Salud, la creación del Seguro Popular y el programa nacional de vacunación.
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La transformación
Durante un largo periodo las cosas mejoraron en el sector salud, así lo indica un estudio de la CONEVAL, donde se muestra que en el año 2000 el porcentaje de población con carencia del servicio de salud era del 58.6% y para 2015 bajó a un 16.7%, es decir, mejoró en un 41.9%.
Sin embargo, para 2020, ya con los cambios en las políticas de salud de la 4T, la población con carencia de los servicios de salud incrementó al 21.5%, es decir, ¡casi 6 millones de mexicanos perdieron el acceso a la salud!
En la 4T, el secretario de Salud, Jorge Alcocer, resultó ser “florero” y, quien realmente asume las funciones, es Hugo López-Gatell, quien, por alguna desconocida razón, resentimiento, su gusto por los reflectores o simple ineptitud, en poco tiempo logró destruir lo que había llevado décadas construir.
En poco más de dos años, seis millones de mexicanos perdieron el acceso a la salud, los niños con cáncer se quedaron sin medicamentos y en general todo el sistema de salud pública acusa graves problemas en abasto, cobertura y servicios médicos que hasta 2018 no existían.
Sin embargo, las demandas de los padres de niños con cáncer fueron descalificadas por un soberbio Hugo López-Gatell, que prácticamente los tildó de tontos y manipulables al asegurar que su dolor es utilizado por grupos interesados en criticar las acciones del gobierno.
La pandemia
El Covid-19 no fue la causa, pero sí el factor que detonó el deficiente manejo de esta administración en el sector salud. México se encuentra entre los peores países en atención, prevención de contagios y aplicación de la vacuna. El proceso de vacunación fue utilizado con fines político-electorales y las fallas en el manejo y distribución de la vacuna ha generado cuantiosas mermas.
Lo peor es que, aunque las consecuencias por la falta de estrategia o de capacidad del subsecretario Hugo López-Gatell han sido catastróficas, se ha mantenido al frente del manejo por más de un año y medio. Para empezar, con sus “recomendaciones” y afirmaciones, dijo que la pandemia duraría dos o tres semanas, que su efecto sería menor a la influenza y que el uso de cubrebocas “tiene una pobre utilidad o incluso, tiene una nula utilidad”.
Así de científico:
• “Hay quien dice que por lo del coronavirus no hay que abrazarse. Pero hay que abrazarse, no pasa nada”.
• “Le voy a decir una cosa muy pragmática, casi sería mejor que padeciera coronavirus (AMLO) porque lo más probable es que él en lo individual, como la mayoría de las personas, se va a recuperar espontáneamente y va a quedar inmune y ya nadie tendría está inquietud sobre él”.
• “La fuerza del presidente es moral, no es una fuerza de contagio”.
• “Las mascarillas o cubrebocas dan una falsa sensación de seguridad”.
• “La influenza H1 es aproximadamente 10 veces más virulenta que el Covid-19″.
• El covid-19 “no representa una amenaza en términos ni sanitarios ni en términos sociales o económicos”.
• “México ha tenido una duplicación inicial de casos cada dos días. Para el día 40 tuvimos un cambio y ahora hay duplicaciones cada seis días, lo que significa que se hace cada vez más lenta la epidemia, hemos aplanado la curva”.
• Aun cuando la OMS decía lo contrario, Gatell afirmaba que eran “un desperdicio de tiempo, de esfuerzo, de recursos”.
• Aseguró que un escenario catastrófico para el país implicaría más de 60 mil muertos. La cifra oficial hasta el día de hoy (30 de septiembre), es de 276,972 decesos, es decir, 4.7 veces más.
Crisis
Ante la desgracia e irresponsabilidad de Hugo López-Gatell, cinco exsecretarios de Salud dirigieron una misiva al gobierno de la República en la que aseguraron: “La situación en México es grave y el gobierno no ha dado una solución para controlar la crisis” y presentaron un plan alternativo de 14 puntos para enfrentar el Covid-19, Hugo López Gatell desechó la propuesta, se burló y los acusó por supuestas vinculaciones políticas e intereses en la comercialización de medicinas.
El resultado del irresponsable manejo de Hugo López-Gatell es que México, de acuerdo con datos de la OMS, ocupa el primer lugar en muertes por Covid-19 en Latinoamérica y el segundo de nuevos casos.
Además, la UNESCO reveló que con un avance del 34.26% en la vacunación, México se encuentra por debajo del promedio regional en América Latina y el Caribe que es de 39%; en el puesto 15 en número total casos de Covid-19 en el mundo y que somos el cuarto país con más decesos.
¿Por esto votaste? ¿Votaste por la destrucción del sistema de salud? ¿Por dejar a los enfermos sin medicamentos, a la población sin cobertura y a los niños con cáncer a su suerte? ¿Votaste para que la pandemia hiciera escarnio y cayera “como anillo al dedo” para los fines políticos de unos cuantos que, de por sí, ostentan el poder?