“Nuestra esperanza… es ser un pueblo libre en nuestra tierra.”

Himno Nacional de Israel

Para ser Primer Ministro de Israel, un país que acaba de cumplir 75 años de existencia como tal, no es requisito indispensable ser israelí, ya que varios de los primeros ministros que han gobernado ese gran país han sido extranjeros, pero sí es indispensable ser judío.

He escrito varios artículos en éste portal SDPnoticias y en otras fuentes, que son fácilmente referenciables, sobre el problema palestino, los gobiernos de Israel, y su historia política, y propuestas para resolver dicho problema, pero ahora, con la intervención defensivamente aceptable al campamento de Jenin por parte del ejército de Israel, surgió en mí y en mi inconsciente y consiente un deseo idealista de resolver ya de raíz la problemática existencialista en Israel y en los mal llamados “territorios ocupados”, y lograr la tan anhelada paz entre árabes y judíos, gestante desde hace 75 años.

Y, aunque pareciera una alegoría de un grado logístico inentendible, si yo hubiera participado en la decisión del intervencionismo en Jenin, les hubiera aconsejado a los líderes de Israel, en primera instancia, y muy probablemente definitiva, negociar, antes de invadir: Si sabían que esos 10 terroristas palestinos tan expuestos en los noticieros estaban acumulando armamento en el campamento de Jenin, independientemente de su origen que se especula iraní, se los hubiéramos comprado, en dólares americanos, o si hubieran preferido, en libras esterlinas, y así pudieran haber viajado a Londres y visitar al Rey Carlos III durante el cambio de guardia en el Palacio de Buckingham.

Y así, continuaría yo, como Primer Ministro de Israel, negociando con los árabes y con los palestinos, en todos los aspectos y en todas las problemáticas, hasta lograr la tan anhelada paz, y si lo logramos, establecemos un nuevo estado independiente y sin intervencionismo de ninguna índole en la Península del Sinaí, tal cómo está propuesto ya en este portal SDPnoticias, y difundido en redes sociales internacionalmente de manera insospechada, desde el 27 de Marzo pasado.

Finalmente, logrando la paz en Israel, toda la tecnología que se ha utilizado estos 75 años para tener el ejército más poderoso del Mundo, se podrá ahora utilizar para conquistar el espacio, y los planetas y estrellas que nos rodean, y que conforman la impresionante Vía láctea, que hasta hoy, por suerte, no pertenece a ningún país ni a ninguna potencia mundial.

Nota agregada: Recomiendo la lectura del artículo sobre política israelí que escribí para el portal: Enlace Judío, el 12 de Agosto del 2020, para complementar el entendimiento del presente ensayo.