Es imposible no hablar de Michoacán como uno de los puntos más importantes de la lucha democrática del país. Desde luego, su línea del tiempo nos obliga a citarlo entre los territorios más trascendentales. Su posición geográfica, de hecho, fue crucial para el proceso de transformación que vivió el territorio nacional con personajes que brotaron para sembrar la semilla y, con ello, se vieron obligados a luchar ante la demanda de un territorio libre y democrático. La guerra de independencia y la revolución mexicana, produjeron movimientos para la defensa de la soberanía nacional desde allí.

Aquí, de igual forma, surgieron las primeras manifestaciones pacíficas de la lucha estudiantil y magisterial. Con ese clima álgido, Michoacán es pionero en la base social de la izquierda. Ante esa demanda por democratizar los procesos electorales, nació el Frente Democrático Nacional. Eso generó, por supuesto, un efecto a lo largo y ancho del país. Se convocaron, de hecho, grandes concentraciones públicas después de las elecciones federales, donde el fraude era el común denominador de los gobiernos conservadores. En cuestión de meses, se generó una columna muy nutrida que dio la batalla pacífica en las calles.

A lo que voy es que, desde hace décadas, Michoacán tiene un significado especial. El presidente López Obrador, a propósito, siempre ha encontrado un respaldo incondicional en la población civil. Se llevó todos los procesos presidenciales y, por cierto, este último con una votación histórica de más del 60%. Hoy, de hecho, Morena vive un momento inmejorable en esta nueva era democrática que ha sembrado el movimiento que encabeza AMLO. Eso propició, de igual forma, que la alternativa de la izquierda siga siendo una prioridad para la inmensa mayoría.

Claudia Sheinbaum, por ejemplo, ganará la elección presidencial en Michoacán. De acuerdo con las estimaciones, Morena, a nivel nacional, tiene una intención del voto de más del 50%. A su vez, cuenta con un gobernador constitucional en plenitud. Alfredo Ramírez Bedolla, en trabajo institucional, ha sido calificado como uno de los mejores mandatarios estatales de México. De entrada, Bedolla ha conformado una gran estructura administrativa. Y no solamente en el rubro de la gobernabilidad, sino en el tema político. Él, junto a Sheinbaum, ha logrado cohesionar a todos los liderazgos regionales en Michoacán.

La lealtad al proyecto de la 4T, y el liderazgo que significa Alfredo Ramírez Bedolla, como el principal activo y referente político de Michoacán, ha hecho posible que el movimiento se fortalezca de cara al proceso de elección. De hecho, quien dirigirá la batuta será el gobernador constitucional. Suele ser así porque hablamos del protagonista principal. O sea, del líder y guía de los trabajos. Bedolla, en ese sentido, enfrentará esta tarea con una estructura que ha entendido perfectamente el momento coyuntural que se vive.

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Por eso Michoacán constantemente se ha situado como un punto crucial para el país. De igual forma, siempre ha respondido a cada una de las etapas que, a lo largo de los años, han dejado un legado importante. Pasó en los movimientos sociales que mencionamos al inicio de la columna. Con esa premisa, se han desencadenado otros sucesos de gran trascendencia. Uno de ellos, queda claro, la base social que ha construido el lopezobradorismo. Dada la importancia, este punto geográfico será punta de lanza para Claudia Sheinbaum. Además de constituir un bastión de la izquierda, es un motor que alimenta la participación activa de la población civil.

Lo más importante de todo es que, para la historia, habrá más episodios que se escribirán en los anales de la línea del tiempo. Uno de ellos, sin duda, el momento valioso que vivimos con la llegada de un gobierno de izquierda. En Michoacán, dando el máximo, Alfredo Ramírez Bedolla ha cargado con esa responsabilidad de forma significativa.

El fin de semana, por ejemplo, los Fabulosos Cadillacs, grupo de trascendencia Argentina, nos recordaron en Morelia que la lucha social es constante. “Tiempos de libertad, sangre combatiente”. Vibró la capital del estado de Michoacán con un grito ensordecedor.