Desde el año pasado la Agencia Federal de Aviación estadounidense (FAA por sus siglas en inglés) ha puesto en jaque a la armadora de aviones Boeing, ya que está “incompleta” la documentación que presentó para obtener la aprobación que le permita reanudar las entregas de 787 a las aerolíneas después de un año.
La fabricante de aviones ya no siente lo duro, sino lo tupido, pues desde el mes de abril la agencia de seguridad aérea detectó una serie de omisiones en la documentación de Boeing, presentada a finales de abril, y ha devuelto partes de la misma al fabricante de aviones. Esto atraerá retrasos en las entregas por defectos de producción en los equipos, es decir, los aviones de modelo 787 Dreamliner presentan fallas estructurales.
En entrevista para Reuters, Dave Calhoun, Presidente y Director Ejecutivo de The Boeing Company, destacó la presentación de resultados de la compañía del 27 de abril, calificándola de “paso muy importante” y diciendo que estaba preparando los primeros 787 para su entrega, pero se abstuvo de dar una fecha.
Y como podemos observar este retraso en las entregas de los aviones modelo Boeing 787 Dreamliner, han derivado en pérdidas millonarias a la compañía, por lo menos de 5,500 millones de dólares, y la cifra irá incrementando en la misma medida que no le den una pronta solución.
El fabricante cuenta en sus bodegas con más de 100 aviones, pero sin poder moverlos. Preocupa a los directivos de la armadora el atraso en las entregas, además de generar “inquietud” entre sus clientes, que son diversas líneas aéreas de todo el mundo.
Si tomamos en cuenta que la industria aeronáutica comienza apenas a recuperarse tras la pandemia, este tipo de retrasos en entregas de equipos hará que las aerolíneas hagan una reingeniería en el manejo de sus actuales flotas.
Por ejemplo, Emirates anunció que retrasará la integración de nuevos equipos Boeing 787 Dreamliners hasta el 2024. Lo que nos indica que se irán con tiento, y no los culpo, no son motivos menores, estamos hablando de fallas en la producción y defectos estructurales. Razón más que suficiente para que la aerolínea del medio oriente no quiera arriesgarse.
El paquete para certificar este tipo de avión de la Boeing está conformado por un vasto conjunto de documentos y datos que deben demostrar la viabilidad de los equipos. La FAA tendrá la última palabra después de realizar una serie de inspecciones y reparaciones a una docena de aviones. Para la armadora es vital que la agencia de seguridad aérea de su país avale toda la documentación, para que a la brevedad pueda tener la posibilidad de reanudar las entregas de los aviones que tiene en lista de espera.
En Boing son optimistas con las certificaciones del 787 Dreamliner
En conferencia de Goldman Sachs, el grupo de banca de inversión y de valores más grande del mundo, Brian West en su carácter de Director Financiero de la armadora Boeing, se dijo optimista sobre los avances que han tenido con la certificación de su modelo Boeing 787 Dreamliner:
“La presentación de este plan de certificación ha sido un hito importante, y refleja un conjunto muy completo de documentos que verifica que estamos en conformidad. Y ha habido una enorme cantidad de trabajo en eso, trabajando codo con codo con la FAA a lo largo del camino”.
Es importante decir que en nuestro país, la aerolínea Aeroméxico cuenta con varios equipos de este modelo, por lo que esperamos que todo este proceso de revisión llegue a buen puerto. Aeroméxico por su parte no ha declarado nada al respecto.
Por otra parte el director comercial de United Airlines, Andrew Nocella, dijo que la Administración Federal de Aviación (FAA) emitió la documentación final de los 777 con motor Pratt Whitney para que puedan regresar a volar.
Recordemos que los aviones fueron inmovilizados después de que un vuelo de United con destino a Honolulu sufrió un fallo de motor y arrojara restos sobre las ciudades cercanas y realizara un aterrizaje de emergencia en Denver en febrero del año pasado. United cuenta con 52 aviones de este modelo.
Finalmente, todo indica que el accidente del avión de la línea aérea China Eastern se estrelló de manera intencional, con lo que se descarta alguna falla en la aeronave modelo Boeing 737-800 y a su vez le da un respiro a esta armadora que en los últimos tiempos ha estado en el ojo del huracán.