De manera silenciosa y a veces tolerada, el sobrepeso y la obesidad se han hecho presentes o acrecentado en nuestras vidas como una de las consecuencias del Covid-19, el cambio de hábitos y el largo confinamiento.
Si bien estos problemas parecen parte de nuestro acontecer diario no podemos perder de vista que son un riesgo importante para la salud y la calidad de vida, por lo que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tiene diversas opciones y programas para ayudar a superarlos.
La presencia de estas enfermedades crónicas no son un reto nuevo, México ya luchaba contra el sobrepeso y la obesidad mucho antes de la aparición del coronavirus. De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), México es el país de América Latina que tiene la mayor prevalencia de sobrepeso y obesidad entre su población.
En los últimos 18 meses, enfrentamos una complicada circunstancia, primero, sujetos a la Jornada de Sana Distancia y, después, a la disminución de la movilidad para evitar la propagación del coronavirus. Todo ello provocó que, a pesar de cualquier esfuerzo, las familias han ido modificando sus estilos de vida y descuidando su alimentación con impacto en la salud.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2020 sobre Covid-19, el 61.7 por ciento de los adultos de 20 años y más disminuyó su actividad física, y 29.1 por ciento incrementó el tiempo sentado o reclinado debido a los cambios y al confinamiento por la pandemia.
Las restricciones en la movilidad, que han provocado una disminución en los tiempos de actividad física, el cierre de los gimnasios, las limitaciones para salir a ejercitarse y el fácil acceso a alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas, han favorecido aún más la ganancia de peso entre la población mexicana.
El interés que compartimos todos en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) radica en el impacto negativo que el sobrepeso y la obesidad tienen en la salud del pueblo de México, pues generalmente desencadenan otros padecimientos crónicos, como la hipertensión y la diabetes; además, pueden aumentar las posibilidades de presentar complicaciones en caso de contagio por Covid-19.
Por ello, en el IMSS fortalecimos nuestras estrategias habituales y buscamos innovar para prevenir el sobrepeso y la obesidad.
Una de ellas es la toma de peso, talla y circunferencia de cintura como parte del Chequeo PrevenIMSS, pues la atención del padecimiento empieza por el control del peso, siempre con un trato digno y humano porque uno de los impedimentos más fuertes para no acudir al médico en esos casos es la pena. Por ello, esta acción en todas las unidades de primer nivel es fundamental y la base de cualquier otra estrategia.
En tanto, en las unidades de Medicina Familiar (UMF) que cuentan con servicio de nutrición, se aplica el programa NutrIMSS “Aprendiendo a Comer Bien”, que consiste en sesiones educativas enfocadas a pacientes de diferentes grupos de edad y cuyo objetivo es mejorar los hábitos de alimentación para prevenir o revertir el sobrepeso y la obesidad. En todos los casos, el área de Nutrición da seguimiento individual mediante consultas agendadas.
Actualmente se desarrolla la estrategia preventiva “Pierde Kilos, Gana Vida” con el objetivo favorecer la pérdida de peso, tanto en derechohabientes como en el personal de salud que tiene sobrepeso u obesidad.
Conscientes de que el sobrepeso y la obesidad deben atenderse de manera integral y multidisciplinaria, el proyecto consiste en realizar una evaluación del estado de nutrición con medidas antropométricas, consulta con el médico, análisis de laboratorio, consulta psicológica y de nutrición.
Posteriormente se otorga un plan de alimentación y las recomendaciones necesarias para lograr un peso saludable y se da seguimiento quincenal para evaluar sus resultados. A este momento, se ha logrado la pérdida de casi 10 mil kilos alrededor de todo el país (dato 22 de sept 2021).
El proyecto tiene tres modalidades:
- En empresa
- Los Unidad de Medicina Familiar
- La modalidad para trabajadores del IMSS.
El objetivo en los tres casos es dar a conocer a los trabajadores y derechohabientes los riesgos de esta enfermedad y los beneficios para la salud de una buena alimentación y buenos hábitos cotidianos.
La obesidad y el sobrepeso son una enfermedad y existen procedimientos médicos profesionales para apoyar a quienes la padecen; su impacto negativo con la salud es un hecho por lo que, es importante que, desde muy pequeños, las personas desarrollemos buenos hábitos alimenticios. Es una tarea en la que estamos trabajando y siempre requeriremos el apoyo de las familias para salir adelante.
@TU_IMSS