La covid -19 ha presentado un nuevo desafío: Ómicron. ¿Pero qué sabemos realmente sobre esta nueva variante surgida en Sudáfrica y que ha puesto nuevamente en alerta al mundo?
A la luz de estudios realizados, Ómicron es la variante que mayor número de modificaciones genéticas ha sufrido en relación con la cepa original. Esta alteración, según ha informado la comunidad científica, eleva peligrosamente su contagiosidad. En adición a ello, podría reducir significativamente la efectividad de las vacunas.
Estas mutaciones permiten al virus una más efectiva infección de las células y una replicación más acelerada que las cepas previamente descubiertas. Países como el Reino Unido y Dinamarca han sido severamente castigados por Ómicron, superando a Delta como la variante dominante, lo que ha obligado a los gobiernos a reestablecer restricciones económicas y de movilidad.
La Organización Mundial de la Salud, por su parte, ha advertido sobre el riesgo presentado por Ómicron principalmente con miras a las celebraciones decembrinas, pues se teme un recrudecimiento de la crisis que pudiese recordar la pavorosa situación sufrida a inicios del presente año.
Sin embargo, Ómicron no presenta mayor peligrosidad en términos de letalidad. Desafortunadamente, en un sencillo ejercicio matemático, mismo si el número de casos graves y hospitalizaciones es relativamente bajo en relación con las variantes dominantes, principalmente Delta, un incremento masivo del número de casos conllevaría invariablemente un riesgo de saturación de los centros de salud.
En otras palabras, derivado de una mayor contagiosidad, y si los contagios superan en términos comparativos a la disminución de casos de gravedad, podríamos volver a sufrir una crisis hospitalaria semejante a la de inicios de 2021.
Al día de hoy, no obstante las características nuevas de Ómicron, Delta continúa siendo aún la variante dominante en la mayor parte de las regiones del mundo. Sin embargo, según se ha estimado, podría devenir la principal variante en Europa hacia mediados de enero del próximo año.
En el caso de México, de acuerdo con la información brindada por las autoridades, se han registrado siete casos de pacientes contaminados por la nueva variante. Sin embargo, ello no ha presentado un riesgo mayor en términos de capacidad hospitalaria, lo que ha hecho posible que la Ciudad de México y una gran parte del país continúen en semáforo verde, mientras la aplicación de dosis de refuerzo a los adultos mayores continúa adecuadamente. Todo indica que así llegaremos a las Navidades.