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La presidenta de México Claudia Sheinbaum Pardo, se reunió este martes 12 de noviembre con integrantes de su gabinete y empresarios para la firma en Palacio Nacional del Paquete contra la inflación y la Carestía, el cual tiene como objetivo bajar la inflación a través de diferentes acciones.
La firma del Paquete Contra la Inflación y la Carestía inició en 2021, cuando el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un primer acuerdo en mayo de ese año.
Esta nueva versión del Pacic para 2024-2025 plantea fijar precios en 24 productos de la canasta básica. “El compromiso es fijar el precio máximo en 910 pesos; esto representa 129 pesos de reducción respecto al acuerdo anterior, que fue de mil 39 pesos”, dio a conocer la presidenta Sheinbaum en su cuenta de X.
El repunte de la inflación de las últimas semanas ha generado preocupación en el segundo piso gobierno de la Cuarta Transformación (4T), por lo cual se elaboró un plan con acuerdos con el sector privado, para amortiguar la escalada de precios, sobre todo la que tiene que ver con la canasta básica, que es la que más afectan a las familias de menores ingresos.
Hace unos días el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) público el dato que, en octubre de este año, la variación de los precios en la canasta familiar, tuvo un incrementó de 0.45% respecto a septiembre, colocando ese indicador a tasa anual en 4.45%.
Algunos de los grandes corporativos privados con los que negoció el gobierno federal para la firma del acuerdo fueron: Bimbo, Gruma, Maseca, Sigma, Bachoco, Pepsico, Lala y Femsa, mientras que las cadenas de supermercados son Walmart, Soriana, Chedraui, Comercial Mexicana, HEB y la cadena de tiendas Oxxo.
El Pacic incluye 22 productos alimenticios de la canasta básica y 2 productos de higiene de primera necesidad. También incluye esfuerzos para estabilizar el costo de gasolinas, diésel y gas LP.
La sequía que azotó a México el año pasado y el primer semestre del 2024 ha provocado que haya malas cosechas en el campo, lo que ha provocado que se tenga una menor producción del sector agropecuario, además de la inseguridad que hay en muchas zonas rurales del país y la intervención del crimen organizado en esa actividad económica, factores que han contribuido a que haya carestía de alimentos de la canasta básica.
Otro aspecto que se tendría que ver para que no se incrementen los precios de frutas y verduras, es que la cadena de distribuidor de estos productos acabe con los intermediarios, acaparadores y coyotes que encarecen los productos agrícolas de primera necesidad alimentaria para los mexicanos.
La inflación significa en estricto sentido el impuesto más regresivo que puede resentir la población, sobre todo la que padece una mayor carencia de ingresos, por lo que el del segundo piso de la Cuarta Transformación no debe escatimar esfuerzos para parar el incremento de los precios de la canasta básica.
X: @esquivelancona_