IRREVERENTE
Les platico: el gobernador de Jalisco anda buscando sindicatos a los cuales echarles el guante con miras a tener suficientes masas de votantes que le hagan el caldo gordo; primero, para ganar las elecciones internas del MC y luego buscar la presidencia.
¿Es muy pronto? N´ombre, Enrique ya va tarde, a juzgar por el nombramiento que AMLO hizo hace menos de un mes de Adán Augusto López Hernández -su incondicional- como Secretario de Gobernación, con lo cual se declaró oficialmente arrancada la carrera por la sucesión presidencial de 2024.
Una investigación de mi BigData -que fue confirmada por allegados al mismo gobernador- reveló la estrategia de Alfaro para quedarse con sindicatos como el que dirige a nivel nacional, Rafael Reyes Montemayor, la Federación de Trabajadores de Sindicatos de los Gobiernos de los Estados y Municipios, FTSGEM, que tiene cobertura nacional y cuenta con un millón 177 mil trabajadores afiliados en gran parte de México, más los que se acumulen ésta semana.
La estrategia es digna de Nicolás Maquiavelo, y como sucedió en el Renacimiento italiano, Alfaro requiere como cómplices, a gente voraz políticamente.
Nunca lo va a aceptar públicamente, pero primero, mi BigData lo descubrió y luego, lo confirmaron los informantes que nunca faltan dentro de las esferas más altas de todos los gobiernos, en éste caso, del de Jalisco.
Para conseguir las masas de votantes que Alfaro requiere para ganarse la nominación interna del MC, tiene dos caminos.
1.- Talonearle…
…casa por casa para convencer a los electores internos del MC que lo prefieran a él y no a Samuel García ni a Luis Donaldo Colosio Riojas como su candidato por la presidencia de México.
Esta sería una labor bestial, que muy pocos -uno de ellos El Bronco Rodríguez- consiguió para ser candidato a la presidencia en las elecciones de 2018, pero con un grado mayor de complejidad, porque como el gobernador de NL no pertenecía a ningún partido, lo único que tuvo qué hacer fue p3nd3j3ar buscando conseguir simpatizantes suficientes para estar en las boletas contra AMLO, Meade y Anaya.
Alfaro tendrá que rifársela diamadre, porque si quiere ser candidato a la presidencia, primero tendrá que mostrar su músculo en las elecciones internas, a diferencia del Bronco, que se brincó ese paso.
En esas elecciones internas -hasta ahora- tendrá qué vérselas contra el dueto maravilla: Samuel y LDCR.
2.- Comprar sindicatos…
Es bien sabido que los sindicatos siguen a sus líderes y aunque éstos presuman de que cada afiliado es libre de votar por quien se le pegue la gana, hay muchas “formas” en este México, para “convencer” a los sindicalizados de que se vayan por uno u otro lado.
Esa es la historia de los 70 años de hegemonía del PRI, que sigue vigente, nomás que con logos, colores y nombres de partidos diferentes.
Una sola ceja levantada, un guiño, una indirecta, una palmadita al elegido y una muestra de desdén al apestado, es suficiente para que los líderes “orienten” a sus afiliados sobre las preferencias electorales que le convienen al sindicato.
Para comprar a este tipo de gremios, no es lo mismo intentarlo con uno fuerte… que con otro debilitado.
ENRIQUE SE VALE DE MIGUEL
Y es aquí donde a Alfaro le salió lo maquiavélico, pues se valió de Miguel Treviño, el florerito socavón decorador de exteriores que finge como alcalde de San Pedro Garza García, para que golpeara a Reyes Montemayor, al despedir por sus pistolas a trabajadores sindicalizados.
Siguiendo las indicaciones de Alfaro, Miguel quiere bajarle la guardia al líder del sindicato de burócratas municipales, pero a juzgar por lo que vi y escuché hoy en una mesa del Invernadero, el tiro le va a salir por la culata.
El Secretario del Ayuntamiento de SPGG, José Dávalos Siller, se reunió con Reyes Montemayor y sus asesores, tratando de resolver el desmadre provocado por Miguel al interior del otrora pueblo más desarrollado de México.
Esto nadie me lo dijo, lo escuché con un micrófono omnidireccional modelo AT8010, igualito a los que vende Miguel en su negocio de espionaje que tiene en las oficinas de avenida Lázaro Cárdenas.
Ahí tiene en oferta lo que pomposamente llama “estudios de análisis de riesgos”.
No sentarse a la mesa con Reyes Montemayor fue una más de las muchas faltas de respecto de Miguel Treviño, quien seguramente prefirió quedarse en su casa p3nd3j3ando con el juego Lego que consume su tiempo como alcalde.
En un momento de la plática, Pepe llamó a su jefe y novelando un poco la cosa, le debe de haber dicho:
“Miguel, aquí don Rafa me está partiendo la madre. Urgen refuerzos. Cambio y juera”.
Pepe alegó ahí en la mesa, que los despidos se justifican porque son producto de la terminación de contratos.
Y Reyes Montemayor, muy educadamente, le hizo ver que eso no es posible, porque Miguel está rasurando a gente con más de 20 años de antigüedad.
Casi puedo adivinar lo que el líder sindical quiso decirle al ingenuo de Pepe: “Ah, chingado, estás bien p3nd3jo, ¿dónde se ha visto que un empleado trabaje por más de 20 años sin que se le dé la planta?”
Conste, eso no lo dijo Reyes Montemayor, lo infiere su irreverente servidor.
El asunto es que ya que Pepe se fue con la cola entre las patas, el líder sindical me dijo que Miguel lo acusó de haberle volteado al personal para que votaran en contra de su reelección.
Y el picudo de don Rafa le dijo: “si el voto es secreto, ¿cómo supo usted que votaron en su contra?”
¿A CAMBIO DE QUÉ SE PRESTA MIGUEL A ESTE ENJUAGUE?
El alcalde reelecto de SPGG alimenta la quimera de contender por la gubernatura de NL dentro de seis años.
No lo podrá hacer como independiente, porque entre otras razones, esa marca la quemó El Bronco.
Su alternativa sería por el MC, pero por delante de él van -en ese orden- Luis Donaldo y Samuel.
Sí, señoras y señores, el alcalde electo de Monterrey aventaja en esa carrera al gobernador electo de NL.
Entonces, Miguel necesita ganar terreno ante sus dos contendientes y ¿qué mejor manera que servirle de trapo al dueño del MC: Enrique Alfaro?
¿Y Dante Delgado? Es figura decorativa, porque está sentenciado por la 4T de que si se les pone sabroso, le van a revivir el desfalco de $430 millones que se aventó durante el año y medio que duró como gobernador de Veracruz, al entrarle al relevo de su papá putativo, Fernando Gutiérrez Barrios, cuando a éste lo llamó Carlos Salinas de Gortari a la Secretaría de Gobernación.
CAJÓN DE SASTRE
“Pobre San Pedro Garza García, ¿en manos de qué engendros de la más supina ineficiencia estamos”, exclama desesperada la irreverente de mi Gaby, y añade: “Lo bueno es que ya nos vamos a vivir a la Villa de Santiago; urge”.