Sonora Power
Sin temor a equivocarme puedo asegurar que mi estado, Sonora, logró ya posicionarse como uno de los estados favoritos en lo que es apenas el principio del llamado segundo piso de la Cuarta Transformación, y es que a Sonora siguen alineándosele los astros respecto a los planes, visión y operatividad del gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo.
Comenzando por el hecho de que a Sonora lejos de recortarle el presupuesto, la federación le amplió las participaciones federales, pues para la entidad hay más de 1 proyecto estratégico, de hecho son 5 los que a la fecha suma la entidad.
Ayer en la presentación del Plan Nacional Hídrico el primer proyecto explicado y desarrollado claramente por los funcionarios del gobierno federal, fue el de agua para Hermosillo, la atribulada (por la crisis hídrica) capital del estado, que necesita de la certeza de abasto del vital liquido a futuro, para mantener los planes, visión y ritmo de crecimiento actual.
Así de buenas a primeras el gobierno de la presidenta Sheinbaum anunció que destinará más de 7 mil millones de pesos para este plan presentado hace meses por el gobernador Alfonso Durazo y que en principio parecía complicado de ejecutar, pero que al final de cuentas fue tomado con entusiasmo por el gobierno federal.
El director de la Comisión Nacional del Agua, Efraín Morales López presentó este plan entre otros 15 más a desarrollar, pero solo el del Hermosillo fue detallado.
Más aún, Alicia Bárcena, la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales adelantó que se avanzará en el plan para limpiar la cuenca del Río Sonora y que incluso hay dialogo intenso con la empresa Grupo México para que asuma finalmente su responsabilidad.
En ambos casos, la presidenta Sheinbaum le está haciendo justicia a Sonora, entidad atribulada por estos problemas y que ha estado a la expectativa de respuestas.
Antes como se sabe, la presidenta Sheinbaum se comprometió con el proyecto del ferrocarril del Pacífico, que conectará desde el centro del país, hasta la frontera de Nogales, lo que dará conectividad terrestre a Sonora de sur a norte y de norte a sur.
Está también el compromiso de completar la red carretera en 2 ejes muy importantes, el proyecto de Guaymas a Chihuahua y el de Bavispe a Casas Grandes, así como el plan logístico de Sonora, que incluye el puerto de Guaymas, los aeropuertos de Cajeme y Guaymas y el mantenimiento de la red carretera federal con el “Bachetón”.
También está el plan para multiplicar la central eléctrica de Puerto Peñasco por 5, el de construir 10 parques industriales y hacer un corredor fiscal de Nogales hasta Cajeme, y un agregado importante de planes, pues Sonora es la puerta del nuevo desarrollo industrial para México, como ha quedado claro con la cuestión del famoso nearshoring, que atrae inversiones en semiconductores, electro movilidad, minería, industria aeroespacial, energía y otros sectores como el turismo.
Esto se suma a la iniciativa del gobernador Alfonso Durazo que realiza obras hídricas en Hermosillo que buscan dar solución a viejos problemas de infraestructura. Son más 550 millones de pesos los que invierte el estado con recursos propios en diversas obras de infraestructura.
Uno de estos proyectos es la inversión de casi los 100 millones de pesos, para la construcción de una línea de conducción que conecte la infraestructura del sur con el norte de la ciudad.
Esta obra ayudará a la mejor distribución de agua, y ante una contingencia hídrica se podrá redistribuir el vital líquido de la ciudad.
Alfonso Durazo sabe que la oportunidad es ahora, posicionar a Sonora como el eje del desarrollo en el norte de México está en sus manos y obviamente que no se debe perder oportunidad de promover, afianzar y consolidar al estado en esa visión.
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