Tengo la oportunidad de cubrir el Segundo Congreso Internacional para la Prevención de Adicciones en el estado de Guanajuato, que se lleva a cabo en Poliforum León, donde más de 50 especialistas de diferentes disciplinas se darán cita para pensar y debatir en torno a las adicciones. Algunos de los invitados más conocidos son José Narro Robles y María Elena Medina Mora, ambos con amplio conocimiento del funcionamiento de la Salud Pública en nuestro país.
Es a todas luces un proyecto interesante, ya que después de décadas de pensar en México como un país simplemente de paso en cuanto a drogas ilícitas se refiere, comenzamos a darnos cuenta que el consumo de las mismas empieza a ganar terreno, y que hay una relación bidireccional entre consumo y violencia, sobre todo en estados que se han visto afectados gravemente por el crimen organizado, como es el caso de Guanajuato.
Desde el año 2020, Guanajuato decidió sumarse a un ambicioso programa de prevención de las adicciones que ya venía siendo implementado con mucho éxito en Islandia. Si bien es un país lejano y con condiciones económicas, sociales y culturales muy distintas, el programa de Planet Youth, y todos los asesores y expertos que lo integran, parten de que un trabajo social y cultural sostenido puede mejorar mucho las estadísticas en cuanto a consumo de tabaco, alcohol y sustancias ilícitas. Con el fin de adecuar de la mejor forma el programa a nuestro país y en particular a los 46 municipios que participan en Guanajuato, durante los últimos años se han encuestado a más de 128,000 jóvenes, con el fin de conocer cuáles son las necesidades particulares y poder trabajar enfocados en ellas.
Uno de los pilares fundamentales del proyecto es utilizar la evidencia científica para lograr resultados, es decir, utilizar toda la información recabada de las familias, las escuelas, las comunidades y tratar de implementar estrategias, que adecuadas al lugar donde se implementen, puedan replicar los resultados que se han dado en otros lugares del mundo. Actualmente más de 20 países en el mundo son parte activa de la propuesta.
Es destacable que el Gobierno de Guanajuato invierta en este proyecto más de 69 millones de pesos (todo de presupuesto estatal), ya que identifican que las adicciones son a la vez fruto y causa de la violencia que parece imparable en buena parte del país. A su vez, tanto la violencia y las adicciones son producto, en buena parte, de las condiciones sociales y económicas que todavía no hemos podido solucionar.
Es un programa joven, apenas con unos años de desarrollo en México, pero promete brindarnos un diagnóstico mucho más preciso de la situación real que tenemos respecto al consumo problemático de sustancias, y una vez hecha esta radiografía, incidir en los cifras de las adicciones. Hoy en día, en Guanajuato, ya son más de 1,300 escuelas primarias y más de 2,282 secundarias las que forman parte del ejercicio. Será interesante ver los resultados a corto, mediano y largo plazo, y les deseamos, por el bien de Guanajuato y del país, mucho éxito.