Es evidente que las candidatas presidenciales y las alianzas partidistas que las postulan abanderan dos proyectos totalmente distintos. El arranque de las campañas así lo demostró, normalmente al inicio se fijan posturas, temas de interés y los problemas que los candidatos y sus equipos consideran de mayor importancia.
A todo vapor
Xóchitl Gálvez inició sin perder un solo minuto, la madrugada del pasado viernes con una caminata en la ciudad de Fresnillo, Zacatecas, el municipio con mayor percepción de inseguridad en todo el país, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Luego realizó otros dos eventos en el estado de Guanajuato, en el estadio de la ciudad de León y en Irapuato, otra de las ciudades más violentas del país.
Claudia Sheinbaum arrancó en el Zócalo de la CDMX, arropada por toda la elite de Morena, ex prianistas, empresarios y los porros que llevaron contingentes clientelares de todos los estados de la república, y muchos de sus creyentes que también asistieron.
Por lo general, los políticos tratan de centrar la atención en los temas donde mayor preocupación expresa la ciudadanía. Por ejemplo, en la campaña presidencial de 1994, luego del levantamiento zapatista en Chiapas que marcaba un tema singular de inseguridad política en el país y se discutían aún las inconformidades y desequilibrios electorales vividos en la elección de 1988, cuando Manuel Bartlett protagonizó el mayor fraude electoral de la historia para darle el triunfo a Carlos Salinas de Gortari. En esa ocasión, el candidato del PRI Luis Donaldo Colosio entendió que el grave problema que ya no podía esperar más y a contrapelo de lo que quería el presidente Salinas, inició su campaña en Ocosingo, Chiapas, el corazón de la protesta donde irrumpió el EZLN.
Otro ejemplo fue en la sucesión de Enrique Peña Nieto, donde lo que más impactaba a la sociedad era la corrupción que se vivía. Instituciones como el INAI, IMCO y organizaciones civiles como Mexicanos Unidos contra la Corrupción, impulsaron una importante iniciativa, la famosa declaración 3 de 3, para que los candidatos presentaran una declaración de situación patrimonial, de intereses y de impuestos.
En esta elección el principal agraviado por la iniciativa 3 de 3 indudablemente fue el presidente Peña Nieto que, si bien no se expresó negativamente al respecto, nunca la apoyó. Quien curiosamente tampoco la apoyó fue AMLO, afirmando primero que la 3 de 3 era una tomadura de pelo, luego obligado por las circunstancias, se convirtió en usuario de la plataforma y el debate que se generó en torno a la presentación de su declaración lo enfureció, y volvió a despotricar en contra de la iniciativa, como siempre, si sirve a sus intereses políticos le gusta y si no, descalifica.
En la campaña del 2018 sin sumarse a la plataforma de la 3 de 3, AMLO explotó hasta el cansancio el tema de la corrupción y eso le rindió importantes dividendos electorales.
¿Qué le preocupa a Xóchitl Gálvez?
La seguridad y cómo no, si en el ranking de las 10 ciudades más violentas del mundo, 9 están en México, los homicidios dolosos en el país sobrepasan los 180 mil, y las cifras de desaparecidos, feminicidios y masacres son más grandes que nunca. En este sexenio han sido victimados un gran número de periodistas y el índice de violencia política se ha multiplicado con el asesinado de funcionarios y candidatos a cargos de elección popular, además de que la mayoría de los gobernadores de Morena y hasta el presidente, han sido señalados por su presunta relación con el crimen organizado.
Por eso Xóchitl inició su campaña en Fresnillo, Zacatecas, la ciudad con mayor percepción de inseguridad, un gesto con el que muestra que hay que enfrentar la inseguridad sin miedo, tal y como lo planteó en su momento Enrique de la Madrid.
El legado
En contraparte, Claudia Sheinbaum se comprometió a “cuidar el legado” del actual presidente. Llevó a las pantallas del Zócalo la transmisión de los mensajes de AMLO e inició campaña con acarreados y, como lo dijo nuestra compañera en SDP Noticias, Verónica Malo, en su excelente crónica del evento: “Un ambiente típico del acarreo; la basura, también de acarreo; el nulo interés en los 100 puntos de la corcholata refleja acarreo. Con ese ambiente… De acarreo, Sheinbaum celebró su evento”.
Luego de meses de simulación, los dados están echados y bien podríamos afirmar que la primer semana la ganó Xóchitl. Mientras la corcholata decidió que su prioridad es defender a AMLO, la candidata de Fuerza y Corazón por México decidió “tomar el toro por los cuernos” y lanzar un valiente mensaje, que está dispuesta a combatir la inseguridad y atender los mayores problemas que aquejan a México.
X: @diaz_manuel