Los líderes de la coalición derechista para recuperar la presidencia, “Va por México”: Marko Cortés (PAN), Jesús Zambrano (PRD) y Alejandro Moreno (PRI), declararon a Carlos Loret de Mola (“Lord Montajes”) que, en las elecciones pasadas, el narco intervino a favor de MORENA, en una entrevista para LatinUs.
Este incidente me recordó cuando hace mucho tiempo, el ex presidente Carlos Salinas de Gortari, declaró: “Andrés Manuel López Obrador me gusta para candidato presidencial”, irónica estrategia que revela:
1. Un movimiento tipo “sacrificio de Dama” en ajedrez (o sea, “darse un balazo en el pie” para obtener un beneficio mayor).
2. Los narcos (jefes de jefes de los partidos de derecha), son conscientes de su rechazo social y ahora pretenden usar su mala imagen a su favor (con la intención de recuperar la situación privilegiada que tenían en los tiempos del PRI y el PAN).
3. El hambre de dinero mal-habido les está aniquilando neuronas y ya tiran desesperados bastonazos de ciego.
¿Se han preguntado cuánto cuesta financiar un partido como “Vamos México”?
(Por cierto, lidereado por Felipe “Borolas” Calderón, cuyo ex jefe policiaco, Genaro García Luna, está detenido e investigado en Estados Unidos por asociarse con el narcotráfico).
¿Cuánto cuesta producir al medio LatinUs?
¿Cuánto cuesta sobornar a los principales consejeros electorales del INE, para que, de forma impudente y falsa, acusen al presidente de “populista” y “antidemocrático”?
¿Cuánto cuesta comprar “periodistas” e “intelectuales” para que firmen manifiestos mafufos?
¿De dónde creen que sale ese dinero?
¿Del espacio exterior?
La cocaína que entra por una fosa nasal, sale por el otro lado convertida en un montón de plata, que luego se lava y se reinvierte en negocios legales (como medios “chayoteros” y nóminas de coaliciones derechosas). Es una cantidad inimaginable de dinero, que, en efectivo, podría llenar mil veces el Estadio Azteca (mientras usted y yo, estimado lector, tratamos de colarnos al metro para ahorrarnos el boleto).
Para nuestra mala fortuna, el negocio del narcotráfico jamás se va a terminar, mientras un montón de gente estúpida tenga como meta “aspiracionista” de la vida, tener lujosos carros, sexoservicio con modelos, propiedades descomunales con alberca, caviar, champaña, ropa de diseñador afamado y, por supuesto, montañas de cocaína, tipo “Caracortada”, en vez de leer un buen libro, escuchar una sinfonía o conocer un museo.
Legalizar las drogas para combatir el narcotráfico, es un buen paso, pero tan minúsculo como los gramos autorizados; se deben legalizar todos tipo de drogas sin consideración de cantidades; si no, es un ridículo juego de niños.
Las prácticas tradicionales del PRI
El único argumento que tendría la derecha, la izquierda, el centro, el arriba y el abajo, para acusar al “Peje” de colaborar con el narco, es su necia negativa a apoyar, con una buena inyección económica, al sector cultural. La fórmula es muy simple: Sin cultura, sin arte, sin una propuesta de mejoramiento humano, la gente anda toda idiota y encuentra diversión y salida a sus frustraciones en las drogas (de preferencia caras, para “estar en onda”, como políticos y artistas).
Lo más conmovedor es que la coalición derechosa acusa a Morena de levantamiento de personas (representantes de casillas de sus partidos), robos de casillas y amenazas a candidatos que impugnaron la elección, con la ayuda del narco, como si nos chupáramos el dedo y no supiéramos que esas prácticas son tradicionales del PRI.
¿Un gobierno coludido con el narco?
Mario Zamora Gastélum, ex senador priísta y ex candidato a la gubernatura de Sinaloa, acusa que Rubén Rocha Moya ganó con trampas, con robos de urnas y amenazas (que seguramente hizo el PRI, y aún así perdieron, porque los sinaloenses ya no quieren un gobierno corrupto y coludido con el narco).
Ya me imagino al jefe de jefes regañando a Mario Zamora, diciéndole: “Acuérdate de cómo le fue a Martha Erika Alonso y Rafael Moreno Valle con los ‘huachicoleros’ en Puebla, no es recomendable no cumplir con los acuerdos”, y el otro: “Sí patrón, sí patrón, ahorita digo que fueron ellos quienes armaron el borlote en las casillas”.
¡Por el amor de Dios! ¿Quién querría hacerle trampa al PRI-PAN-PRD en Sinaloa? Sería como sobornar a un árbitro para que el Atlas gane un partido.
Además, MORENA no tiene fama ni experiencia en violentar casillas (es como cuando abrí una investigación por una tarjeta bancaria que me clonaron, pagando un servicio de comida a una APP a la que nunca he pedido nada).
Yo les aconsejaría a los jefes de jefes y subjefes de subjefes, que, si quieren darle credibilidad a su patraña para recuperar los buenos tiempos con las presidencias de derecha, destinen sus cuantiosas ganancias a contratar narcos falsos (norteñotes, bigotudos y grandotes, tipo como los de las narcoseries), y hagan puestas en escena con tiroteos con policías falsos, en lugares cinematográficos tipo Puerto Vallarta, Mazatlán, Cancún, etc., con balas de salva (para no gastar tanto en actores), y que estos digan, frente a las cámaras de LatinUs: “¡Maldito Partido de Regeneración Nacional, que nos dio balas que no son del calibre de nuestras armas!”, a ver si así obtienen un poquito de credibilidad.