¿Desde cuándo es noticia que los hijos visiten a su padre? La pregunta va dirigida a los editores del Grupo Reforma, propietario de los diarios Reforma, de la Ciudad de México; Mural, de Guadalajara y El Norte, de Monterrey.
Ya es excesivo el acoso de tales medios de comunicación en perjuicio de José Ramón y Andrés Manuel López Beltrán. Ello empieza a rebasar los límites del debate periodístico.
No es ilegal lo que hacen Reforma, Mural y El Norte y sus aliados: es inmoral, absolutamente inmoral y así hay que expresarlo.
Hoy lunes algún fotógrafo de tales diarios captó a los hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador entrando a Palacio Nacional.
El fotógrafo hizo su poco ético trabajo desde lejos, escondido, con el equipo adecuado para lograr imágenes de aceptable calidad a bastante distancia de los hermanos López Beltrán.
¿Un paparazzi? No lo sé. Yo lo calificaría como una canalla porque sus fotografías se han usado solo para molestar a la familia del presidente de México.
¿Que no es culpa del empleado que solo hizo su trabajo? La gente decente no acepta instrucciones que atenten contra la ética más elemental.
En cuanto las fotos llegaron a la redacción de Reforma, este diario, El Norte y Mural las publicaron con una explicación infame.
El tono de la nota es tan ruin que no lo reproduciré. Solo diré que se trata de la continuación del muy fuerte acoso contra los hijos de AMLO que se desató la semana pasada.
Hace no muchos días, en efecto, soltaron toda su artillería de perversidad contra los dos jóvenes López Beltrán tanto el periódico propiedad de Alejandro Junco de la Vega como el portal de internet de la familia del priista Roberto Madrazo —Latinus, en el que difunde videos Carlos Loret de Mola—, lo mismo que la asociación civil fundada por Claudio X. González, Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad.
En el colmo de la irresponsabilidad, la revista Proceso —que a veces no honra su historia— se sumó a ese linchamiento contando una fábula que sus redactores tuvieron que aclarar.
Como no pueden con Andrés Manuel López Obrador, cuya popularidad sube con cada agresión mediática, entonces atacan a sus hijos.
Vaya inmoralidad. La mafia en sus peleas al menos respeta a la familia. La derecha mexicana, con bastante menos ética, no conoce los límites.
Es la razón por la que sea moralmente imposible que en 2024 triunfen los partidos que apoyan el editor en ocasiones sin escrúpulos Junco de la Vega, el político siempre cuestionado Madrazo y el empresario ultraconservador X. González.
PD: El Universal hizo lo mismo al señalar que José Ramón y Andrés Manuel López Beltrán llegaron a Palacio Nacional la tarde del lunes 8 de mayo.