Pasadas las diez de la noche de ayer martes, recibimos la noticia de la localización con vida de Ricardo Villanueva, reportero del Diario Presente de la ciudad de Poza Rica, quien fue privado de su libertad por un comando armado.
Ricardo fue localizado en Tihuatlán, en el estado de Veracruz, a unos 30 minutos de donde fue raptado.
Los detalles de su rescate hasta ahora se desconocen. Lo que importa es que está vivo.
En un video que circula en redes sociales, Israel González, representante de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas (CEAPP), presentó al comunicador de 27 años al lado de su familia.
El padre de Villanueva, visiblemente emocionado, agradeció al gobernador Cuitláhuac García Jiménez y al presidente Andrés Manuel López Obrador la localización con vida de su hijo, además de agradecer a la Guardia Nacional y a cada una de las personas que ayudaron a encontrarlo.
Tras ser rescatado, Ricardo fue trasladado a un hospital para ser valorado por los médicos. Sabemos también que será resguardado por la autoridad y esperemos reciba la atención y protección debida, pues el joven fue amenazado y tanto él como su familia están en riesgo, pese a que se sabe que durante el operativo hubo personas detenidas.
Durante las 24 horas que duró su desaparición el gremio periodístico y la sociedad en general manifestó su preocupación por el secuestro del comunicador, y no es para menos. Sabemos de sobra que los ataques hacia los periodistas son una constante en nuestro país y por desgracia, en muchas ocasiones el desenlace es trágico.
Toca ahora a la autoridad castigar a los culpables y brindar a cada uno de los comunicadores en el país las garantías necesarias para el libre ejercicio de la libertad de expresión. Esta sigue siendo una tarea pendiente.