El camino es largo, hoy llueve, el agua no ha parado desde antier; los cazos que recogen las lágrimas del techo están por varios lados, Flavia seca las suyas con su delantal. Las dos camas están cubiertas con cartón y plástico para que los colchones no se mojen. El fuego débil es vencido por los goterones. Las velas también lloran mientras los niños, hacen su tarea con minúsculos lápices…
La educación es el principal “pilar” para el desarrollo del país y para que éste sea firme, los maestros deben ser capacitados y actualizados de manera permanente; deben tener condiciones laborales y salarios dignos para poder realizar su trabajo y tiempo libre para disfrutar de la vida y tener la satisfacción de que sus alumnos van avanzando…
Los niños, las niñas y los jóvenes deben contar con escuelas que cubran sus necesidades según la región; salones con ventilación o bien resguardados según las condiciones del tiempo, todas con lugares de esparcimiento y sobre todo con maestros que estén bien capacitados y saludables.
El personal docente debe tener un buen salario y prestaciones e incentivos para realizar de manera plena, tan necesaria e importante labor. Hay muchos maestros que hacen doble o hasta triple turno para cubrir sus necesidades; dejando ellos mismos a sus hijos en manos de otros colegas esperando que reciban también una buena educación…
Los alumnos pasan mucho tiempo con sus maestros, ellos son el pilar de su formación… Además de sus padres, aunque no siempre. Es una realidad que muchos niños y niñas carecen del afecto y cuidado que requieren dentro del círculo familiar, por eso el maestro o la maestra son fundamentales para que esas carencias afectivas les sean proporcionadas. Que el docente tenga el tiempo para saber quién de ellos necesita más apoyo o atención, más cariño. Muchos niños, niñas y jóvenes por desgracia están sin guía en sus casas, sin un buen ejemplo, por eso los maestros y maestras se convierten en sus mejores amigos, en sus tutores; en su pilar.
¿Cuántos de nosotros no recordamos el nombre de algún maestro que nos dejó hermosa huella; algo impreso en el alma que nos impulsó a seguir? Y, ¿cuántos nos dejaron una que nos hundió hasta lo más hondo por su intolerancia y por ende su incapacidad? Mario Delgado y su equipo deben tener un plantel de maestros que tengan esa convicción, la entrega para con sus alumnos. El gobierno debe proveerles de todo lo necesario para que esto se pueda llevar a cabo.
“¡Siéntate niña, no te estás quieta!” Desesperada la maestra me amarraba a la silla para que no pudiera moverme, aun recuerdo el desprecio de sus ojos…
Urge que el nuevo secretario se rodee de un personal educativo eficiente, de confianza y con buen salario… Que sean motivados los maestros con bonos, con capacitación para estar actualizados, pero sobre todo, deben tener el debido reconocimiento a su labor. El desempeño del personal docente debe ser valorado por el gobierno y por la sociedad.
Mucha gente cree que el maestro, -el que tiene un solo turno-, trabaja solo medio día y se va a su casa a descansar, y no es así, se llevan exámenes para calificar, tareas que revisar además de hacer la planeación para el día siguiente… ¿Qué será de aquellos que tienen, -como ya mencioné-, doble o hasta triple turno? Muchos docentes están sometidos a estrés y agotamiento cada vez mayores…
Un personal cansado, es incapaz de transmitir lo que el alumno necesita recibir; un alumno desnutrido o enfermo es incapaz de asimilar lo que se le enseña por debilidad y por cansancio…
Por eso es indispensable la sinergia educación y salud…
Es urgente soldar la mancuerna entre la Secretaría de Educación y la de salud. Mario Delgado se desempeñará como secretario de educación y el doctor David Kershenobich Stalnikowitz como secretario de salud, ellos deben trabajar juntos, para fortalecer la educación, garantizando además el derecho de gozar buena salud a todos los alumnos y maestros.
Los docentes tienen una responsabilidad de suma importancia, primordial diría yo, para el desarrollo humano… Tienen en sus manos la gran y enorme responsabilidad de moldear la vida de niños y niños de apenas cinco o seis años de edad. Ellos pueden llenar sus carencias emocionales, tienen la oportunidad de mejorar su autoestima, decirles una y otra vez que son inteligentes, que son capaces de cualquier cosa; que la constancia, el esfuerzo y el respeto son primordiales y sobre todo que ellos son de un gran valor…
“Tú no vales nada, lo poco que vales lo vales gracias a mí. Llegaste así arrastrándote por los rincones, vete de mi vista”… Palabras que me marcaron y creí.
El nuevo secretario de educación, Mario Delgado debe tomar en cuenta la situación actual de los maestros, considerar que este personal es primordial para el desarrollo humano, para la buena educación de los niños y niñas cuya formación depende en gran parte de ellos y por ende de él mismo y su equipo.
Son derechos ligados, educación y salud; hay evidencia científica que sugiere que los niños y las niñas y los jóvenes sanos tienen más probabilidades de aprender de forma efectiva cuando tienen mejor salud.
La educación es el medio más importante para lograr igualdad y una importante herramienta para que la salud de las personas mejore y pueda ser transmitida a sus familias y a las generaciones futuras.
Es indispensable una estrecha comunicación y coordinación entre ambas secretarías…
En caso de enfermedad, los niños y niñas deben ser atendidos de inmediato. Deben ser revisados por los médicos periódicamente; si el niño no puede ir al centro del salud, que el médico vaya a la escuela. La medicina preventiva es la mejor y la más barata y ésta debe empezar desde en la infancia.
La buena educación es la base primordial para que el país prospere. Para que no vuelva la manipulación y el abuso.
La labor de los maestros es crucial en la formación de los niños, niñas y jóvenes ya que éstos pasan gran parte de su vida con ellos. El maestro o maestra los forman, los educan, les enseñan valores…
Los docentes deben ser valorados por el gobierno y por la sociedad; y los niños y la niñas deben tener una buena educación para tener un futuro mejor. Un país sin conocimiento está condenado al fracaso…
Las escuelas rurales necesitan de atención especial. Muchas carecen de instalaciones adecuadas para que los alumnos puedan aprender. Están muy lejos de las comunidades. Hay niños y niñas que caminan kilómetros para llegar a su escuela. En algunas regiones existen lugares en los que pueden quedarse los días de escuela para no tener que recorrer la distancia de ida y regreso.
-A las cuatro de la mañana Flavia calienta el café y la leche. Sus tres hijos están frente a un trozo de espejo, arreglando su cabello. Su suéter está viejo y guango. No tienen otra cosa que ponerse. La lluvia se filtra por el techo de lámina, Luis estira la mano ahuecándola para recibir unas gotas y con ellas se alisa el cabello negro. Su madre los apura… Cada uno se echa encima un trozo de plástico, y comienza de nuevo el recorrido que han realizado miles de veces para llegar a su escuela, quince kilómetros, nada más…
Flavia solo estudió hasta cuarto de primaria. Ella no quiere que sus hijos sepan tan poco como ella. Luis, Carmen y Mary caminan atrás de su madre. El sendero es sinuoso, resbaloso, Flavia marca los pasos para asegurar los de sus hijos…
Llegan cansados y hambrientos a la escuela, apenas desayunaron y todavía faltan muchas horas para comer… “a ver que hay”, pensó Luis, ojalá hoy haya algo más que frijoles-.
Deben ser la educación y la salud los pilares del claudismo…