AMLO desesperado por las pensiones
La reforma para crear el Fondo de Pensiones del Bienestar avanzó en la Cámara de Diputados donde se aprobó por mayoría simple con 252 a favor, 212 en contra y cuatro abstenciones, aunque la controvertida iniciativa plantea que el Estado garantizará que los trabajadores se pensionen con el 100% de su último sueldo, quienes se oponen señalan que se trata de un desfalco a los recursos aportados por los trabajadores que por alguna circunstancia no han sido reclamados.
Apropiarse de 40 mil millones
La bolsa es menor, son 40 mil millones de pesos de aportaciones de trabajadores de más de 70 años que no han sido reclamados y que con fundadas sospechas pasarán a un fondo que administrará el gobierno del presidente López Obrador, al final de su sexenio y en pleno proceso electoral.
Sin dar datos, solo más mentiras y demagogia, ante las críticas y especulaciones AMLO respondió: “Nosotros no somos rateros, tenemos defectos como todos los seres humanos, pero no somos corruptos. ¿Cómo vamos a despojar a los trabajadores si estamos aquí por el apoyo de los trabajadores? Si estamos aquí para servir al pueblo y, sobre todo, a los más necesitados, a los trabajadores, a los pobres”.
Apropiarse de los fideicomisos
Desde el inicio de su administración AMLO fue por los recursos de los fideicomisos que se aplicaban directamente para la población y nunca ha rendido cuentas del destino de esos cuantiosos recursos. Fue en septiembre de 2020 cuando la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados aprobó una iniciativa impulsada por Morena para desaparecer 109 fideicomisos y que los fondos fueran reintegrados a la federación y se reasignaran a temas de salud y financiamiento de los programas sociales del gobierno. Para dimensionar la gravedad del asunto, tan solo tres de los 109 fideicomisos, el Fondo de Salud para el Bienestar, el Fonden y los fideicomisos desaparecidos del Conacyt, significaron más de 135 mil millones de pesos.
Pero esos fondos no se invirtieron en salud, de hecho, el presupuesto para ese sector bajó y pasa por una grave crisis. Del Fonden no quedó nada y los daños de desastres naturales como el paso del huracán Otis por Acapulco fueron escasamente atendidos por el gobierno.
El “pueblo bueno” le vale madres
Con sus políticas de “austeridad republicana”, y “honestidad valiente” y su “no somos iguales”, AMLO deja una deuda de 6.5 billones (siete veces Fobaproa), más otros 340 mil millones del fondo petrolero a las próximas generaciones de mexicanos, acabó con miles de millones de ahorro, exprimió los recursos de los fideicomisos y ahora va por los millones de las afores.
Su iniciativa ya pasó sin mayor explicación que echar culpas y llenar de adjetivos e insultos el ambiente legislativo como justificación. Morena y sus aliados en el Congreso hacen todo para seguir las instrucciones de su líder al pie de la letra.
Cuando se aprobó en comisiones intentaron hacer trampa cuando los “duendes nocturnos” modificaron el dictamen que había sido aprobado aunque ello significara una violación al proceso legislativo.
Falsas promesas
¿Cuál es el anzuelo para hacerse del fondo de pensiones? Crear un fondo solidario para complementar las pensiones de los trabajadores que ganan menos de 16,777 pesos mensuales.
Dicho fondo será administrado por Banxico y se alimentará de las utilidades de empresas del Estado como el Tren Maya, los recursos que obtenga el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep) y de las pensiones de trabajadores de más de 70 años que no sean reclamadas.
Populismo y demagogia, porque en realidad la única fuente de ingresos del fondo serán los recursos no reclamados de los trabajadores.
El Tren Maya no tiene un plan financiero ni de corto ni de largo plazo. Lo trenes en todo el mundo, principalmente los de pasajeros, son subsidiados. El proyecto aún no concluido del Tren Maya ha costado más de tres veces su presupuesto original y no se han iniciado acciones de mitigación ambiental que cuestan mucho dinero, por lo menos en los próximos 15 años no va generar un solo peso entonces ¿cuáles ganancias?.
Jaime Cárdenas antes de renunciar al INDEP denunció que dentro de esta dependencia hay actos de corrupción del personal que fueron denunciados ante la FGR y con los que nada ha pasado.
AMLO se burló de la gente con el “sorteo del avión presidencial”. Sobre este tema, Cárdenas afirmó: “Ese dinero nunca se usó (…) El INDEP legalmente no podía usar el dinero si no es un bien decomisado, abandonado, extinto o asegurado y ese cheque no estaba en ninguna de las cuatro categorías”.
También indicó que el INDEP enfrentaba compromisos como los pagos a extrabajadores de Luz y Fuerza del Centro y que se debían más de mil millones de pesos en el cumplimiento de laudos laborales, sin contar con “liquidez para cumplir”, entonces ¿cuáles ganancias?.
Otro costoso engaño
Demagogia, engaño y burla, un desfalco que el presidente justifica diciendo: “lo otro que les molesta mucho es porque las afores, que son instituciones relacionadas con bancos y con el mundo financiero, administran todas estas pensiones y hay una cantidad de recursos no reclamados por los trabajadores que por ley deben entregar al Seguro Social, pero no lo hacen y se quedan con esos remanentes, que son de los trabajadores, y estamos hablando de miles de millones de pesos”.
Al final, a AMLO, su partido Morena y la candidata que garantiza la continuidad de su fallido y costoso proyecto, van en contra de los más desprotegidos, los trabajadores y los recursos que aportaron en sus afores, para inyectarlo en proyectos fraudulentos donde familiares, hijos, amigos y compadres de Andrés son y serán los beneficiarios.
X: @diaz_manuel