Tristes, enojados, con rabia y gran dolor nos ha dejado la mala noticia de tu muerte. No te imaginas. Es inexplicable. Molesto. Increíble. Es difícil de creer.
Luis Enrique era más que un columnista. Era amigo y compañero. Respetuoso de los colegas. Servicial. Serio y a la vez muy carismático. Carrilludo. Platicador con los conocidos. Muy observador. Y vaya que sus ojos expresaban todo. Culto. De letras. Le encantaba jugar con ellas. En el ir y venir de sus publicaciones, siempre había un toque especial, sin duda sabíamos que era él.
Apenas a mediados de febrero, hacíamos un recuento de los crímenes contra el gremio periodístico en nuestro país. Y en el mes de marzo, destacábamos el llamado que hacía el Parlamento Europeo al Presidente López Obrador para tomar acciones y defender a la prensa mexicana.
Al pueblo, a la sociedad; a las autoridades hoy les decimos que la violencia en México es tan real, como increíble. Los crímenes lamentablemente cada día van al alza. ¿Habrá solución a los crímenes de los cientos de periodistas mexicanos?
Todos los compañeros son importantes, con historias longevas, distintas experiencias. Sí a Luis Enrique le pasó esto, con esa exposición, con su gran trayectoria, sin duda nos puede pasar a cualquiera.
“Cada periodista asesinado es un ataque directo contra la libertad y esta, recordemos, es la primera que se pierde en una sociedad; luego viene el quebranto de todas las demás”, así lo dijo nuestro colega, el pasado (25 de enero, 2022) en su columna El Ancla.
El amor por servir
Les cuento; hace más de 10 años. Cuando Luis Enrique llegaba a El Debate, lo hacía de manera discreta. Eso sí, antes de llegar o al salir; dependiendo de la hora, realizaba una gran labor. Por las calles que rodean la casa editorial, se tomaba el tiempo para llevar y dejar comida y agua a muchos gatitos que por ahí rondaban. No eran uno, ni dos; eran muchísimos animalitos a los que nuestro amigo logró salvarles la vida y darles un mejor espacio. Lo hacía diario. Quizá muchos lo hacen; pero sin duda este detalle de Luis Enrique nos dejó marcados a varios que nos tocaba ver o acompañarlo de paso en este caminar.
Amigo y compañero, Luis Enrique el referente de la opinión política en Sinaloa. Cuando decidiste alejarte de los Medios de Comunicación hace años, dejaste un gran espacio; hoy te nos arrebataron y dejas un gran vacío en nuestros corazones.
Este 2022 nos faltan nuestros colegas periodistas: José Luis Gamboa Arenas, el 10 de enero, en el Puerto de Veracruz. Margarito Martínez Esquivel, el 17 de enero, en Tijuana, BC. Lourdes Maldonado López, el 23 de enero, en Tijuana, BC. Roberto Toledo, el 31 de enero, en Zitácuaro, Michoacán. Heber López Vásquez, el 10 de febrero, en Salina Cruz, Oaxaca. Jorge Luis Camero Zazueta, el 24 de febrero, en Empalme, Sonora. Juan Carlos Muñiz Hernández, el 4 de marzo, en Fresnillo, Zacatecas, Armando Linares en Zitácuaro Michoacán, el 15 de marzo y nuestro amigo Luis Enrique Ramírez Ramos en Sinaloa este 5 de mayo.
¡Justicia para todos!