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El organismo descentralizado creado por el gobierno de la cuarta transformación (4T), en 2019, que lleva por nombre Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), el cual tiene como objetivo buscar la autosuficiencia alimentaria en los cuatro granos básicos (maíz, trigo, arroz, frijol) y leche, fomentar el desarrollo económico y social del país, a pesar de esta noble misión, en la institución se dio un millonario desfalco el cual reconoce el presidente Andrés Manuel López Obrador que ha sido el único acto de corrupción en su sexenio.
El plan trazado por la actual administración para tratar de llevar la autosuficiencia alimentaria para el país a través de este nuevo organismo que fusionó las empresas Diconsa y Linconsa, de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), para crear así el organismo descentralizado, sectorizado a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), no ha cumplido con su cometido, debido a las irregularidades que se dieron en esa dependencia desde hace más de cinco años.
En la conferencia de prensa mañanera de este jueves 5 de septiembre Roberto Salcedo Aquino, titular de la Secretaría de la Función Pública (SFP), recordó que este escándalo salió a la luz luego de que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó irregularidades por miles de millones de pesos tanto en Segalmex como en sus filiales Diconsa y Liconsa, dijo el funcionario.
El titular de la Secretaría de la Función Pública señaló que el posible daño patrimonial observado en ese organismo fue de 9 mil 500 millones de pesos, sin embargo, ya se habían aclarado y recuperado 4 mil 700 millones de pesos que equivalen al 50% del monto detectado.
Salcedo abundó en que hay 2 mil 100 millones de pesos de los que se tiene información en análisis en instancias fiscalizadoras y que equivale al 22% del daño observado y que se tiene hasta la fecha un presunto daño patrimonial denunciado ante la Fiscalía General de la República (FGR) y el Tribunal Federal de Justicia Administrativa por 2 mil 700 millones de pesos.
Hasta el momento por el caso de Segalmex se han presentado 156 denuncias ante la FGR por delincuencia organizada, lavado de dinero, defraudación fiscal, uso ilícito de atribuciones y facultades, peculado, enriquecimiento ilícito y captación indirecta de recursos.
La investigación sobre el desfalco en el organismo de Seguridad Alimentaria Mexicana arroja que hasta el momento se tiene a 47 personas con orden de aprehensión 26 individuos vinculados a proceso penal y una persona detenida en Argentina con orden de extradición.
Sería bueno recordar cómo fueron dándose los actos de corrupción del organismo, las primeras alertas se dieron en septiembre de 2019, cuando medios de comunicación informaron que la dependencia otorgó cientos de millones de pesos en contratos sin licitar.
Para junio del 2020 René Gavira Segreste presentó su renuncia como director de administración y finanzas de Segalmex, luego de que fue señalado como el presuntamente responsable de haber otorgado dichos contratos de forma irregular.
En agosto del 2020 la bancada de Morena del Congreso de Zacatecas estado donde Segalmex tiene sus oficinas centrales denunciaron que “altos funcionarios” del organismo habían repartido 5 mil toneladas de semilla de frijol basura a 110 mil campesinos.
Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) documentó en julio del 2021 que el organismo Seguridad Alimentaria Mexicana otorgó 797 millones de pesos a una red de empresas fachada que incumplieron con entregar herramientas como pesticidas, costales y lonas que servirían para proteger y almacenar granos como el maíz y el frijol.
Un experto financiero que no quiso revelar su nombre nos dice que fueron dos casas de bolsa las que fraguaron el esquema de corrupción en Segalmex con una red de empresas fachada una perteneciente a Roberto Guzmán y la otra de René Dávila las cuales operaban de la siguiente forma:
“Empresas subsidiarias de ambas casas de bolsa constituyen varios fideicomisos emisores en diversos Bancos que actúan como fideicomitentes. El Fideicomiso emite Certificados Bursátiles Fiduciarios (títulos de deuda) de manera privada, es decir, que no se registran en el Registro Nacional de Valores de la Comisión Bancaria y de Valores y que por tanto no pasan por ningún tipo de control. En el acta de cada emisión se establece que los recursos captados serán usados para ser la fuente de pago de la misma”.
Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad
Las empresas fachadas no producían flujo de efectivo por lo que los intereses prometidos por la emisión de bonos eran impagables.
Las casas de bolsa cobraban un 10% por la emisión de los bonos el cual se repartía entre quién vendía el título de deuda y quien lo compraba, en el caso de Segalmex, se hizo entre los emisores del título y René Gavira, entonces tesorero de la dependencia.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) reveló en julio de 2021 que ya investigaba al organismo por compras simuladas, desvío de subsidios, adjudicaciones directas a empresas fantasma y faltantes en inventarios.
En febrero de 2022, en la fiscalización de la cuenta pública de 2020, realizada por la Auditoría Superior de la Federación, Segalmex por primera vez encabezó las irregularidades detectadas, que ascendían en ese entonces a 8,636 millones de pesos.
Las irregularidades detectadas por la Auditoría Superior de la Federación correspondieron a la adquisición y pagos sin soporte documental de maíz, frijol, canasta básica, leche y subsidios de arroz, trigo y maíz; pagos que excedieron el tonelaje o precio de garantía establecidos para maíz y frijol; pagos sin acreditar la prestación del servicio de subcontratación de personal (outsourcing) entre otros.
La ASF informó en la cuenta pública del 2021 que Segalmex tendría que aclarar otros 2,346 millones de pesos, por irregularidades detectadas en ese organismo.
El desfalco en un organismo como Seguridad Alimentaria Mexicana que, a través de ofertar precios de garantía en granos básicos para la alimentación de los mexicanos, cultivados por los productores con mayor marginación del país, vender a estos fertilizantes o regalar fertilizantes, semillas mejoradas y elevar la productividad agrícola, que es una tarea de justicia, ha desvirtuado esa institución federal.
El gobierno de la 4T tiene que llegar a sus últimas consecuencias para aclarar y consignar a todos los que participaron en el millonario desfalco en Segalmex y que quede resuelto para que la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador no sea manchada por este caso.