Hasta ahora uno de los más grandes escándalos de corrupción de la 4T es el de Segalmex, una dependencia de la que el presidente AMLO no puede decir que sea herencia y responsabilidad de sus antecesores, ya que fue creada por él en 2019, a imagen y semejanza de la desaparecida CONASUPO.
El escándalo
Lamentablemente la corrupción en Segalmex supera al peor acto de corrupción conocido en la administración de Peña Nieto, la Estafa Maestra. Las irregularidades detectadas por la Auditoria Superior de la Federación (ASF) ascienden a 9 mil 500 millones de pesos y en la Estafa Maestra fueron 7 mil 670 millones de pesos.
Como dice el presidente López Obrador, “para que los jóvenes conozcan” y no se dejen manipular ni engañar, vale la pena recordar que AMLO puso al frente de Segalmex a Ignacio Ovalle Fernández, un personaje con un historial bastante cuestionable, del tipo de Manuel Bartlett.
Ovalle fue el último director de CONASUPO en los tiempos de Carlos Salinas de Gortari. Su equipo lo integraban finísimas personas como: Raúl Salinas de Gortari, director de Planeación; el cuñado de éste, Juan Manuel Pasalagua Branch, director de Comercialización, y como director de Finanzas estaba el hijo del exsecretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú.
Durante la dirección de “Nacho” Ovalle en CONASUPO hubo irregularidades al por mayor. Situaciones como la importación de leche radioactiva, maíz con altos niveles de aflatoxinas que ni para forraje servía porque mataba a los animales, la importación de frijol chino, una variedad que no servía ni para forraje ni para consumo humano, entre otras.
Al final Raúl Salinas de Gortari y su excuñado, que le servía de prestanombres, fueron encarcelados.
Las maromas presidenciales
El presidente de la República que, como es su costumbre, usa la tribuna mañanera para hacer propaganda política, y en ocasiones para exonerar a sus colaboradores envueltos en la corrupción y la ineficiencia, así lo ha dicho.
El reportero del Diario La Razón Jorge Chaparro, le preguntó:
“presidente… los desvíos de recursos que se hicieron en inversiones hacia empresas privadas de Chiapas fueron ordenados por el director y el director sigue estando dentro del gobierno federal”.
Jorge Chaparro, Diario La Razón
Luego de dar largas y responsabilizar al gobierno anterior que, en este caso específico, nada tiene que ver con la nueva dependencia, respondió:
“Sí, pero hay que esperar a que nos explique el secretario, si existe de parte de él responsabilidad.
En su momento lo que se planteó acerca del dinero, porque fue un depósito que hicieron en una caja, en una financiera, supuestamente para obtener más intereses.
Ya se venía haciendo desde el gobierno anterior y es una financiera que trabajaba en el gobierno y que tiene relaciones con gobiernos estatales y también hay esa preocupación en gobiernos estatales”
AMLO
El reportero insistió:
“Es que este tipo de irregularidades a las que se refiere usted, presidente, suman más de nueve mil 500 millones de pesos, supera el escándalo de Peña Nieto de la Estafa Maestra, que fueron siete mil 600, acá es muchísimo más dinero”.
Jorge Chaparro, Diario La Razón
Nuevamente AMLO, como buen escapista, respondió:
“Vamos a esperar de cuánto es, no nos adelantamos”.
AMLO
Entonces el reportero argumentó:
“Eso lo dice la Auditoría Superior de la Federación, no lo digo yo.”
Jorge Chaparro, Diario La Razón
Ante tales argumentos sustentados en datos oficiales, AMLO, como solo él lo sabe hacer, para no afrontar la realidad, se puso a descalificar a las instituciones y salió con otros temas:
“Sí, sí, pero la Auditoría Superior de la Federación también dijo que el aeropuerto, la cancelación del aeropuerto de Texcoco había costado creo 200 mil millones y se demostró que había costado la mitad, 100 mil. O sea, vamos esperando que nos informen bien.”
AMLO
El mega fraude
Ayer el secretario de la Función Pública por fin dio la cara y, cuidadoso y respetuoso de la narrativa que le exige su jefe, trató de explicar qué es lo que se está investigando sobre el mega fraude en Sagalmex y, aunque no quedó claro si se está investigando o no a Ignacio Ovalle, se infería de toda su exposición.
AMLO, al percatarse de que Ignacio Ovalle seguía en el pandero de las acusaciones, salió al ruedo para exonerarlo y empinar a un “chivo expiatorio”. Sí reconoció el fraude, pero aseguró que René “N”, exdirector de Administración y Finanzas de Seguridad Alimentaria Mexicana, quien fue detenido por comprar títulos bursátiles con recursos públicos, no consultó a nadie sobre las operaciones que causaron un daño de más de 9 mil millones de pesos.
“El funcionario que puso el dinero en esta financiera no consultó a nadie, y un dato que es importante, se venía haciendo; o sea, en el sexenio pasado, ya esa financiera había manejado dinero de Diconsa, igual”.
AMLO
Lo que quedó claro es que AMLO ya no puede tapar el sol con un dedo y al reconocer el fraude y el desvío de recursos, admite tácitamente que la corrupción en su administración ya superó a la de Peña Nieto con la Estafa Maestra.
Por otra parte, como cada vez que se presentan acusaciones y denuncias de corrupción en contra de sus colaboradores, trata de exonerarlos y echarle la culpa al pasado, sin considerar que en este caso no cabe ese argumento, porque Segalmex es una dependencia que él creó.