La guerra en Ucrania parece tener efectos políticos en México. A raíz de la intervención rusa, se han dado a conocer distintas posturas en torno a las razones y la supuesta legitimidad de las acciones de Moscú contra su vecino.
Los partidarios de Morena parecen apoyar a Rusia, mientras que el resto de país ha mostrado signos de solidaridad con Ucrania y ha condenado enérgicamente la decisión de Vladimir Putin de invadir y de contravenir flagrantemente el derecho internacional.
Desafortunadamente, México no es la excepción en América Latina. Nicolás Maduro y Daniel Ortega, presidentes de Venezuela y Nicaragua, respectivamente, han apoyado públicamente las acciones de Putin bajo el mañoso argumento de que el mandatario ruso ha actuado en legítima defensa ante el “avance” de la integración de la OTAN hacia el este de Europa.
¿Qué ocurre en nuestro país? En primer lugar, a pesar de que la Inversión Extranjera Directa rusa representa apenas el 0.02 por ciento del total en nuestro país, el presidente AMLO, bajo la bandera del pacifismo, ha rechazado imponer cualquier tipo de sanción económica contra Rusia; acto que ha sido saludado por el embajador Viktor Koronelli, y quien no ha escatimado en publicarlo en su cuenta de Twitter.
Más alarmantemente, la propia Embajada colgó en sus redes sociales una carta enviada por “Jóvenes de Morena Estado de México” por la cual “condenan la desinformación de medios Occidentales respecto a la verdades y razones en la actual intervención de tropas de defensa rusa en territorio fascista ucraniano”.
¡Territorio fascista ucraniano! ¡tropas de defensa rusas! Estas aseveraciones hechas por los simpatizantes de Morena han puesto de manifiesto lo que representa este partido para la mayoría de sus correligionarios: una profunda ignorancia de la historia, de las relaciones internacionales, del derecho internacional, del funcionamiento del mundo, y, sobre todo, traslucen un profundo adoctrinamiento ideológico promovido por AMLO y por el propio partido oficial, anclado en un arcaico sentimiento anti yanqui propio del populismo latinoamericano.
¡Alguien debería recordar a estos despistados que Ucrania es un Estado soberano capaz de tomar sus propias decisiones! ¡que ha sido invadido por una potencia extranjera y que la OTAN es una alianza militar de carácter defensivo y que jamás ha amenazado a Rusia! En relación con aquello de “Ucrania fascista”, huelga señalar que se trata de un despropósito descomunal. Quizá se les debería informar que Ucrania padeció enormemente la invasión alemana durante la Segunda Guerra y que la propia familia del presidente Zelenski vivió las atrocidades del nacional socialismo en su país.
En suma, el apoyo de los simpatizantes de Morena a Rusia es lamentable. Refleja su pobre educación, su falta de instrucción y un nefasto adoctrinamiento promovido desde la cúpula con propósito de afianzar sus bases electorales, en detrimento del bienestar del país.
José Miguel Calderón en Twitter: @JosMiguelCalde4