Ante la falta de resultados en su administración, el compañero presidente y camarada Andrés busca escudarse en el pasado y responsabilizar a todos de su fracaso, mientras, quienes se oponen, resaltan una y otra vez cada tropiezo, distractor y caída del gobierno y de quienes lo integran, pero Orta hay quienes nos hemos percatado de que la verdadera pregunta es ¿cómo ser objetivo y tratar de encontrar puentes de entendimiento y soluciones?
Los polos opuestos cada vez se están aislando más y se hablan entre ellos, tanto así, que en estos momentos el discurso que sostiene cada parte ya se está volviendo irrelevante. Una y otra vez se repiten los mismos argumentos hasta caer en un lugar común.
Nos hemos convertido en una caja de resonancia de lo que dice o deja de decir el presidente, quien simplemente puede decir lo que sea y lo que brota de un extremo a otro es el fanatismo.
Una sociedad crítica no fanática
Aquí de lo que se trata es de construir una sociedad crítica. Independientemente de que apoyes o no apoyes al presidente, ser capaz de construir puentes de entendimiento, negociación y diálogo para verdaderamente influir de manera positiva en las políticas públicas y, de aquí en adelante, ver hacia el frente por el bien del país.
Las discrepancias de una buena parte de la sociedad que se dedica a subrayar la falsa retórica, las mentiras, la simulación y la falta de cumplimiento de las promesas de AMLO y la 4T, ha rendido tan escasos frutos como el gobierno que critica y solo ha venido a acrecentar la polarización del país.
Sin autocrítica, no puede haber avances
Pocas cosas retratan tan bien lo que ha sido la 4T en su discurso, retorica, mentiras, simulación que se ven en la actuación de los incondicionales de AMLO, como el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz, el director de la CFE, Manuel Bartlett, el director de Pemex, Octavio Romero, la Secretaria de Energía, Rocío Nahle, el secretario de Gobernación y tapado de AMLO, Adán Augusto López Hernández, gobernadores como Alfonso Durazo en Sonora y antes secretario de Seguridad, el de Morelos Cuauhtémoc Blanco, el de Veracruz, Cuitláhuac García y la Jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum.
Efectivamente, AMLO se ha negado a aceptar el retrato de horror de los primeros tres años de la de la 4T escudándose en las más absurdas justificaciones, pero no por ello debemos renunciar a la búsqueda de la construcción de acuerdos y menos en un momento en que, afortunadamente, los fanáticos de ambos lados cada vez se están aislando más y dejando espacios para los que de verdad entendemos la importancia de construir y de dialogar, y que estamos dispuestos a empezar con lo que hay y esos ciudadanos no somos pocos.