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La saturación aérea de las terminales del Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM) ante el incremento considerable de pasajeros de las últimas semanas ha provocado retrasos, incremento de los precios de los boletos, así como un mayor riesgo para la seguridad de los pasajeros, tripulaciones, personal del aeropuerto; esto a pesar de que se invirtieron cuantiosos recursos en la construcción de la Terminal 2 (T2) del aeropuerto capitalino.

La saturación del AICM data de hace al menos 35 años. Ha habido varios intentos por resolver, la problemática, pero estos intentos han sido erráticos, con proyectos de infraestructura llevados a cabo sin trasparencia, con sospechas de corrupción.

El gobierno del presidente Vicente Fox Quezada, empezó a construir en 2005 la Terminal 2, esto con el fin de ampliar remodelar el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y atender los problemas de saturación.

Con 17 meses de retraso la Terminal 2 del AICM fue inaugurada “formalmente” el 26 de marzo de 2008 por el presidente Felipe Calderón.

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La obra se construyó sobre una superficie de 242,666 metros cuadrados, tiene un edificio para pasajeros con 23 posiciones de contacto y siete remotas, estacionamiento para al menos 3 mil vehículos, un tren automatizado de pasajeros que se conecta con la Terminal 1, hotel y puentes elevados.

El proyecto de la terminal aérea de la Ciudad de México que inicialmente el gobierno foxista iba a invertir 200 millones de pesos y cuyo costo, al final, se elevó a 8 mil 595 millones de pesos, y que implicaron la contratación de un préstamo por 400 millones de dólares con cuatro bancos, una larga demora y severos cuestionamientos.

La construcción de la obra fue encargada a las empresas ICA, Gutsa y Geotecnia.

Para la realización de la Terminal 2, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) participó en un mecanismo financiero basado en el uso de los flujos de operación y cedió el derecho de cobro de Tarifa de Uso de Aeropuertos (TUA) de 10.5 años a Nacional Financiera, que contrató un crédito para la obra.

La Secretaria de Comunicaciones y Transportes, como parte del esquema para llevar a cabo la construcción de la T2 en el Aeropuerto, autoriza al AICM firmar un convenio de cesión y por ende, ceder el derecho al cobro de la TUA antes de impuestos a favor de Nafin, en su calidad de fiduciario, revelan estados financieros del aeropuerto.

Nafin obtuvo un crédito por 400 millones de dólares con BBVA Bancomer, Banamex y Citibank. Este mecanismo, avalado por la SCT, permitió que desde 2005 los créditos absorbieran el 50 por ciento del total de los recursos de la terminal aérea.

Al día de hoy, esta terminal ha rebasado su capacidad y registra un hundimiento, de más de 30 centímetros por año por lo que se ha tenido que invertir más para remediar está situación.

En la última década, el incremento en la flota aérea de las aerolíneas que operan en el aeropuerto capitalino, así como la capacidad de cada una han incrementado considerablemente, lo que repercutió significativamente en el número de pasajeros atendidos en ambas terminales, ya que pasó de 34 millones en 2014 a 50.3 millones para 2019, un avance de 47%.

Durante el primer mes de 2022, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) atendió a tres millones 249 mil 487 pasajeros, 56.5% más que en el mismo periodo de 2021.

De este total, dos millones 211 mil 936 pasajeros corresponden al segmento de viajes nacionales (+41.6%), mientras que un millón 37 mil 551 volaron en rutas internacionales (+101.8%). El total de operaciones aéreas fue de 28 mil 778, 28.2% más que el año pasado.

Durante 10 años los usuarios de la Terminal 2 se han más que duplicado, al pasar 9 millones 731 mil 526 en 2008 a 20 millones 829 mil 302 en 2018, lo que muestra un incremento de 114% en ese periodo.

La T2 se construyó para aliviar la saturación que registraba el aeropuerto capitalino, pero esta obra es un fracaso porque no soluciono nada porque el Aeropuerto de la Ciudad de México sigue saturado.

El problema del AICM es que, a pesar de tener dos pistas, éstas no pueden operar simultáneamente por la separación que hay entre cada una. “La separación que tienen es de 305 metros y, para que puedan operar a la vez, deben tener mínimo 1,100 metros de separación.

Es prácticamente como si tuvieras una pista nada más, eso lleva a una saturación en tierra y también en aire, lo que lleva a reducir tu capacidad operativa a una operación por pista, no se puede operar a la vez las dos, puedes despegar de una y otra, pero tienes que esperar a que termine la operación para usar la otra.

La T2 no se ha terminado de pagar, por lo que sigue siendo una carga para el erario.

La Secretaría de Gobernación (Segob) acodó este martes 10 de mayo que el AICM no recibirá nuevos vuelos ni más operaciones, a la par de que el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) alcance más de 100 operaciones diarias, esto con el fin de aliviar la saturación del aeropuerto capitalino.

De igual forma, se determinó migrar las operaciones tipo chárter y de carga nacionales del AICM al AIFA de manera inmediata.

Luego del anuncio de la Segob de mover ciertos vuelos al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), Aeroméxico consideró que estos acuerdos les permitirán mantener su oferta de vuelos desde y hacia el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM)

La empresa del Caballero Águila anticipo que partir de la segunda quincena de agosto, incrementará sus vuelos desde y hacia el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles y para finales de octubre estará realizando 30 operaciones diarias, ofreciendo así 1.5 millones de asientos durante el siguiente año calendario.

La Terminal 2 es un proyecto que no solucionó la gran saturación del aeropuerto capitalino, la construcción de la obra fue poco transparente, con atrasos y sobrecostos, además con sospechas de corrupción, presenta hundimientos y la deuda de esta edificación todavía la seguimos pagando los contribuyentes.